Extra:

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El moreno tal y como había mencionado se encontraba fuera de la casa del modelo, eso si, un poco impaciente ya que había pasado más de 30 minutos desde que la carta había llegado a su rubio amigo, además las luces de aquella enorme casa estaban encendidas. ¿Le habría pasado algo? No lo sabía, así que sólo se limitó a acomodar un poco su bufanda, dispuesto a tocar la puerta; sin embargo un enorme peso lo hizo caer al suelo.


---¡Aominecchi! ---chilló el rubio, abrazando al peliazul mientras acomodaba su rostro en el pecho del moreno.---

---¡Al menos avisa que vienes, tonto! Me lastimas. ---reclamo Aomine.---

---Solo unos segundos, ¿Si? Es sólo que... Estoy feliz. ---dijo, apretando un poco más el abrazo.---

---Lo que digas... ---respondió el moreno con una pequeña sonrisa, acariciando las hebras rubias de su ahora pareja.---


Porque era así, ¿No?

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¡Hola a todos! Les habla Mei.

Supuestamente este pequeño extra tendría que haberse publicado junto con la segunda parte de estas cartas, pero grande fue mi sorpresa al revisar la historia y notar que no se había publicado! ;;

Y bueno, a causa de esta pequeña confusión quiero agradecer a las personitas que apoyaron este pequeño proyecto desde el inicio, que, al ser solo dos capítulos esperaron por una segunda parte en un largo lapso de tiempo! ♡.

Aún tengo varios proyectos por publicar, y, ahora que la escuela me ha soltado un tiempo quiero dedicarme a ellos, esperando encontrarlos en mis demás historias, y que obviamente sean de su agrado.

Nuevamente, ¡Gracias por todo! Nos leemos pronto.

--- Mei.

Cartas de dos enamorados [AoKise]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora