About those days (when I was happy) | BokuAka

Days

Siete días.

"¿Real?" Repitieron ambos y Bokuto levanto las manos frente a él.

"Un momento, eres tú quien no es real" declaró el alto, Akaashi negó.

"No, se supone que eres tú el producto de mi imaginación"

Silencio, ambos se quedaron mirándose fijamente y sin decir una palabra. Los minutos corrían y la hora de entrar a clase se acercaba, pero esa parecía ser una preocupación de segundo plano cuando tenían a su amigo imaginario de pie frente a ellos en carne y hueso.

"Bokuto, ¿Sabes quién soy?" Comenzó Akaashi, porque sinceramente Bokuto parecía a punto de sufrir un ataque o algo.

Bokuto balbuceo palabras sin ningún sentido, cosas como "amigo, Akaashi, real, no, loco, morir" fueron las palabras que mejor entendió, Akaashi tuvo que acercarse y darle un golpecito en la frente con su dedo índice para despertarlo.

"Soy Akaashi, ¿Cómo me conoces?" Preguntó está vez y Bokuto frunció el ceño, no molesto, parecía más conflictuado.

"Eres mi amigo imaginario, o eso se supone, no hablabas ni te podía tocar y ¡Oh! Puedo tocarte" de repente la mano de Bokuto tomo el brazo del otro y sus ojos se abrieron tanto que Akaashi temió que se salieran de sus cuencas. "¡Puedo tocarte! esto es tan genial, nunca pude y..."

"Bokuto" lo interrumpió, su mano libre se posó sobre la del más alto y oh, mi mano es más grande que la suya, pensó. "Se supone que tú eres parte de mi imaginación, un... mecanismo de defensa para mí"

"¿Mecanismo de defensa?" Bokuto ladeó la cabeza y Akaashi pensó que se veía muy lindo así. "¿Cómo?"

"Bueno, eso..." su celular volvió a vibrar y recordó no solo la fecha, sino que tenía una clase a la que asistir. "Oh, debo ir a clase... ¿Debemos? No estoy seguro, ¿Vas al mismo lugar?"

"¿La escuela?" pregunto Bokuto señalando al frente, el camino que debían seguir para llegar a la escuela. "Si, a esa misma voy"

Akaashi asintió. "Bien, caminemos entonces, no puedo llegar tarde, se supone..." si era nueve de verdad debía tener un importante examen de física esa mañana. "¿Has visto la fecha, Bokuto?"

"No, no realmente" y de la nada se detuvo, su expresión cambio a una de pánico. "¡Akaashi!" grito. "¿Y si no hay escuela a la cual ir? ¿Qué tal si también mi salón ha cambiado y no estudio en el mismo lugar?"

Esa era una posibilidad, pero Akaashi no estaba listo para enfrentarse a eso. "Por ahora será mejor ir, si no deberíamos estar allí simplemente... veremos qué hacer, pero si tenemos que asistir entonces será mejor hacerlo, no queremos perdernos lo que sea que pase hoy" finalizó mostrando la importancia de ir. Bokuto pareció aceptarlo porque asintió con la cabeza.

"Si, sí, siempre supe que dirías cosas inteligentes, Akaashi." Esas palabras tomaron por sorpresa al más joven, fueron tan sinceras y hacía mucho que no escuchaba felicitaciones verdaderas. Akaashi sintió su corazón latir un poco más rápido.

Ambos comenzaron a caminar, un paso un poco rápido debido al poco tiempo. Aunque sus ojos estaban al frente no podían evitar mirarse de reojo una que otra vez.

Akaashi era más discreto, se sentía diferente caminar sabiendo que la persona a tu lado era real. Bokuto era más alto de lo que imaginaba normalmente, también tenía un cuerpo más grande, sus hombros anchos y una cintura un poco más estrecha. Sus ojos eran tan dorados como pensó, un brillo especial en ellos y, aunque solo fue unos instantes que la vio, su sonrisa era tan cálida como siempre. Su cabello era un poco más ridículo teniéndolo ya frente a él, pero no dejaba de ser lindo y sus manos picaban por tocarlo. Cómo imagino, Bokuto era fácil de leer, todo su cuerpo le gritaba las emociones del chico, nervioso, feliz, entusiasmado y sus ojos no dejaban de ver a Akaashi cada cinco segundos.