Capítulo 35: Acto de Apertura.

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— ¡Hu-Hunger!.— Dijó temblorosa Yukino mientras instintivamente retrocedía un poco.

— ¿Cómo están señoritas?.— Expreso el susodicho con una sonrisa santurrona en su rostro.

En algún punto, la siempre calmada y serena Yukinoshita Yukino comenzó a sudar profusamente. Aunque no se notasé mucho para Uraraka e incluso Momo, alguien que la conociera mejor sabría que estaba muy nerviosa.

Pero, ¿Quién no lo estaría? Aunque las estudiantes del 3-A no recordaban al pelinegro se sentían tensas, la razón, la presencia abrumadora que inflingia.

— L-Lo, ¿lo conocés Yukinoshita-senpai?.— Habló Momo, nerviosa.

No hubo respuesta por parte de Yukino por unos segundos.

— Yaoyorozu-san,.— Dijo Yukino— Retrocede, llama a algún héroe profesional, y también a Edgeshot-sensei...— Ordenó sin dejar de mirar al hombre que no se había movido ni un poco.

— ¿Q-Que pasa...?.— Dijó sin comprender Uraraka.

— Es un villano.— Dijo Yukino.

Con eso finalmente todas las señales de alerta que habían suprimido ambas chicas para no ser descortéses con un "conocido" de Yukino se reactivaron, Momo por instinto creo un tubo de combate.

— Vaya, pero que agresivas señoritas, eso no es muy atractivo ja.—  Hunger se burló.

— ¿Que quieres?.— Dijó Yukino mientras con un leve golpe de su codo incitó a Momo a moverse.

Estaba por crear una granada cegadora para que así Yukino también pudiera huir, sabía que intentaría detenerlo para que ellas escaparán y avisarán a los héroes después de todo. Y si Yukino estaba tan tensa en presencia de ese sujeto debía ser por algo.

— Yo no haría eso si fuera tú...— Momo se paró en seco y Hunger sonrió burlón— Ja ja, vaya lo siento mucho hija de los Yaoyorozu pero eres tan predecible que tenía que decir esa frase.—

Momo sintió un escalofrío y a pesar de que quería salir corriendo junto a sus compañeras, como consecuencia de lo que dijo el villano, su cuerpo no respondía.

Uraraka por su lado tenía un millar de dudas atacando su lógica, justo cuando necesitaba un tiempo lejos de la U.A., e Izuku, se encontraba con su actual... Novia (Aún le dolía), un entrenamiento habitual para recuperar su ritmo se había convertido en un encuentro peligroso en extremo con un villano que ponía nerviosa con su sola presencia a la chica que le pateó el trasero, sin ir en serio.

— **¿Por qué me pasa esto a mi?**.— Pensó y lloro internamente la castaña.

— ¡Oye! Habla claramente... Y dime, ¿cuáles son tus asuntos con nosotras?.— Sentencio Yukino— **No puedo vencerlo, estoy convencida, lo ví en Hage, los dos mejores héroes e Izuku apenas pudieron hacerlo huir... No tengo oportunidad, ¡Debo ganar tiempo!**.— Pensó frenética la azabache

— Tranquila Yukinoshita-san, solo quería visitar a la chica que se ganó el corazón de mi querido amigo, Izuku... O debería decir, ¿Chicas?.— Volteando a ver la castaña quién incómoda se encogió en su sitio Hunger hizo aún más grande su exhaustiva mueca "feliz".

Sin darse cuenta, tal manera de subestimarlas, y por supuesto el comentario sobre la castaña hizo que Yukino activará su quirk instintivamente, sus ojos brillaron por un segundo en una violeta luz.

El Olvidado.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora