꒰ ꒱ Solo un pequeño libro en el que nos imaginamos como algunos personajes y mods de FNF viviendo su día a día en los pequeños apartamentos de la gran ciudad.
Inicio : 29 - O3 - 21
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Habían pasado semanas desde que Girlfriend había llegado al pequeño apartamento de Boyfriend, las cosas habían cambiado un poco desde su llegada. Su casa cada vez estaba más limpia y ordenada, pintaron y arreglaron las paredes que en algún momento estaban llenas de moho.
Gf como de costumbre se levantó temprano a realizar todas las actividades de su día a día, que mejor que para empezarlo unos ricos panqueques con jarabe uno de los mayores lujos que se podían dar.
Daban las once de la mañana cuando Bf se despertó, los rayos de sol alumbraban toda la vivienda.
- ¡Hola amor! Estoy estudiando un rato, el desayuno está en la cocina.
- ¿Porque le dices 'la cocina" si es la misma habitación?- dijo Bf algo confundido y con ojeras.
-La costumbre.
El se dirigió a "la cocina" un poco desconcertado por la situación. Después de un rato se oyó que alguien tocaba a la puerta.
Bf abrió la puerta todavía con sueño, debido a que se le hacía muy temprano levantarse a tales horas. Pero había algo afuera que ocasionó que este se despertará y cerrara la puerta de un golpe.
-¿Quién era?- preguntó Gf después de sobresaltarse por el fuerte sonido.
-¡Nadie!, solo no abras la puerta.
-Bf, todas las personas son bienvenidas aquí, voy a abrir la puerta- Gf se dirigió hacia la puerta para abrirla y recibir a quien Bf le cerró de manera tan descortés.
- Ho...- Gf volvió a cerrar la puerta nuevamente de un portazo sin dejar terminar al del otro lado su frase.
- Si, mejor... no hay que abrir.
- ¡No les voy a hacer nada, carajo!- grito el pelirrojo quien se encontraba afuera de su hogar.- ¡Abran la maldita puerta!
Ambos abrieron lentamente, asomando sus cabezas por la entrada. A decir verdad, Pico se veía algo demacrado y agotado, además de tener cara de que realmente no quería estar ahí.
- ¿Me van a dejar entrar o no?- dijo con un tono monótono.
Pasó al pequeño domicilio, podría decir que si bien no era lo mejor estaba ordenado y olía bien, se sentó en el sofá que estaba frente a la entrada.
- ¿Y que haces por aquí? - pregunto Bf mientras mantenía su mirada en Pico, más específicamente en su arma
- Lamentablemente no tengo donde vivir, me corrieron de mi casa por "perturbar el orden público" y ustedes son mi última opción, créanme que ni yo quiero pedirles esto- volteó a ver para otro lado sin mantener contacto visual- ¿Me podría hospedar aquí?- se ruborizó un poco sintiendo la mayor vergüenza del mundo. Los dos se quedaron pensativos acerca del asunto.
- ¿Puedes darnos un momento? - dijo Gf para posteriormente llevarse a Bf a otra habitación. Al cerrar la puerta de la habitación Bf dijo repentinamente.
- Yo opino que no hay que dejarlo vivir aquí, siento que nos va a matar tarde o temprano, y además... - Gf lo dejo sin terminar la frase dándole un pequeño golpe en la cabeza.
- Mejor si hay que dejarlo, ¡No tiene donde quedarse! - dijo en un tono bajo algo enojada por la actitud de su novio - Agregando que si le damos hospedaje tal vez no nos mate...
- ¿Estas segura? Realmente no tenemos mucho presupuesto como para mantener a alguien más - dijo un poco preocupado
- Em... ¡No sé! Solo me siento mal al dejarlo así
- Está bien, dejaremos que se quede -dijo Bf aún ligeramente en desacuerdo.
- ¡Vamos! Probablemente sea una buena decisión - Después de eso ella lo abrazo con una gran sonrisa en la cara.
Salieron de la habitación cuando Bf recordó otro detalle del porque no quería dejarlo quedar. El único cuarto que le sobraba era el cuarto en el que había escondido su desorden el día que Gf llegó y que no había recogido debido a que no quería que ella observara eso, entrando un poco en pánico.
- ¡Bf y yo estaremos encantados de hospedarte aquí!- Gf salió del pequeño cuarto llendo a abrazar a Pico quien la apartó rápidamente.
- Dijiste que éramos tu última opción ¿Cuáles eran tus "otras opciones"? - dijo Bf aún pensando en el desorden de aquel cuarto desocupado, pensando que era su momento perfecto para huir a sacar todo lo que estaba ahí.
- Lugares a los que definitivamente no pienso volver nunca.
- ¿Pero quienes eran?- le siguió Gf a lo que Pico rodó los ojos para a continuación contar toda su travesía hasta su "nuevo hogar"
