Club

3.2K 281 58
                                    

-Bueno chicos, es hora de escoger un club, esta vez lo haremos distinto, entre ustedes repartirán los miembros, sin peleas- Dijo Kakashi saliendo de la clase para ir a darse una vuelta.

-¡Bien! Comencemos- Dijo Sakura quien era la presidenta de la clase.

-Los clubes son: Costura, Arte, Cocina, Modelaje, Artes Marciales e Historia, así que creo que podemos empezar por lo más aburrido- Comenzó a liderar el Haruno el asunto.

-Artes marciales, ¿qué les parece las mitad hombre?-

-¿A quién llamas así?- Preguntó Temari achicando los ojos.

-Pues vaya, tú, Tenten, Karui, Yugito y Fuu- Aclaró la rubia de coleta.

-Pues ¿sabes? Sí, sí nos parece- Contesto Karui, no se iba a rebajar como esa pelichicle.

-Bien- Y así continuó eligiendo los grupos hasta que solo quedaron dos; costura y modelaje.

-Bueno, por último creo que Sasuke-kun, Ino y yo deberíamos estar en modelaje-

-¿Y por qué ustedes?- Preguntó una curiosa Yugito.

-Pues porque tenemos el físico necesario- Aclaró la ojiazul.

-Hinata también- Agrego Tenten.

-Yo pienso que al menos una debería ir a costura, Hinata quedó sola- Hizo ver el Nara que poco le importaba la pelea absurda por su amigo.

-¡Que no!- Gritó Sakura un poco cansada de que quisieran interferir con sus planes.

-Yo quiero ir en costura- Exclamó el Uchiha sin siquiera mirar a sus compañeras.

-E-tto... entonces podemos ir nosotros en costura y Hyuga en modelaje- Propuso la Yamanaka.

-Volvieron a dejar sola a Hinata- Dijo el pelirrojo girando los ojos.

-Yo no tengo problema en estar sola en costura- Comentó la peliazul para calmar el ambiente.

-Decidido- Gritaron ambas amigas felices de estar con el Uchiha.
○○○○

-Hina, ¿en serio no te molesta estar sola en ese club?- Consultó su amiga castaña.

-No, supongo que será más tranquilo. No quiero problemas- Contesto llevándose un rollo de canela a la boca.

No le importaba mucho realmente, pero estar con Sasuke solos sería lo mismo que tirar a la basura el esfuerzo que llevaban haciendo las últimas semanas.

-¿Sabías que le madre de Uchiha tiene una Boutique súper famosa y él ha modelado para eso? Seguro debe estar harto de eso- Expuso Temari mirando el cielo.

-No tenía idea- "Tengo esas fotos en mi mesa de noche" pensó para sí misma.

De pronto escucharon como todas las chicas de la cafetería comenzaban a cuchichear mirando a la entrada.

En la cual, un grupo de 8 chicos iban entrando, escena digna de película de Hollywood.

Todas babeaban, por todos, pero claro, había uno en particular por el que todas se mojaban; Sasuke Uchiha.

Ninguna se atrevía a perseguirlo o tirarsele encima cuando estaban juntos, eran como un dios en la tierra.

-Sasuke-senpai- Unas chicas de primero se arrodillaron frente a él sacándolo de sus casillas.

-Por favor, acepte nuestra humilde comida- Dijeron en coro poniendo sus bandejas en el suelo.

-Si vas a regalar comida que sea a los pobres- Soltó sin siquiera mirarla y continuó su camino.

-No entiendo como se pueden humillar tanto por ese tipo- Exclamó molesta la ojiverde.

-¿No te agrada?- Preguntó Hinata.

-Claro que me agrada, no habla mucho pero es buena persona, solo no pienso que sea para tanto- Explicó mientras sus amigas asentian.

Continuaron conversando acerca de distintos temas, sin ninguna importancia, pero una mirada llamó su atención.

-Nos vemos en clase, voy a hablar con mi madre- Les comentó a las chicas sacando su celular y se marcho.

-Azotea-

Era el mensaje que tenía en su bandeja de entrada y corrió para allá, si Sasuke quería hablarle en el instituto era cosa sería.

Entró y cerro la puerta cuidadosamente, dándose cuenta que no había nadie, o bueno, casi nadie.

-Hola- Pronunció sentado en una banca algo escondida.

-¿Necesitas algo?- Consultó acercandose poco a poco.

-Sí, me siento un poco mal- Rápidamente la azabache llevo su mano a la frente de su novio, dándose cuenta que estaba en perfectas condiciones.

-¿Qué tienes?-

-Se llama "Mi novia no me quiere en el mismo club que ella"- Pronuncio llevándose la mano a la cabeza como si doliera.

-No exageres- Dijo riéndose y sentándose junto a él.

Pronto el pelinegro tumbo a la Hyuga en la banca tomandola de las muñecas.

-Deberias pedirme disculpas- Soltó con su ronca voz muy cerca de su nuca.

-A-aquí no-

-¿Por qué?- Sabía la razón pero iba a ser divertido escucharla intentando explicarlo.

-P-porque esta-mos a-aquí- Pronuncio sonrojada esperando que por favor nadie se atreviera a entrar.

-Sé que también quieres- Comenzó a tocar sus suaves músculo de arriba hacia abajo con mucho cuidado, rozando solo la yema de sus dedos.

-B-asta- Intentó decir pero se vio interrumpida por la mano de su novio apartando sus bragas para introducir un dedo.

-¿Pa-para eso me di-jiste que viniera? ¡Ah!- Contenerse era demasiado difícil, él sabía donde tocar y como hacerlo para llevarla al extremo.

-Sí, estoy muy caliente- Susurró siendo sincero. Desde que se levantó las ganas lo estaban matando.

Cada vez sus dedo iba tomando movimientos más profundos y rápidos, gracias los fluidos naturales de la chica.

Decidió desabrocharse su pantalón para sacar la enorme erección que llevaba guardando un rato.

La ojiluna se sorprendió al verla, nunca dejaría de hacerlo, era demasiado perfecta, grande, gruesa y estéticamente envidiable.

Movió la punta de arriba hacia abajo, pasando por los pliegues tan empapados de su novia.

-Sa-Sasuke-kun- Gemía ansiosa de sentirlo completamente dentro.

-Dime que la quieres y tal vez lo haga- Dijo sin dejar de frotarse cada vez más rápido.

-L-la quiero-

-¿Dónde?- Verla rogando por sexo era algo que lo prendía de una manera inigualable.

-A-adentro- No se hizo más de rogar y con una profunda estocada se abrió paso por los pliegues.

-¡Ah!- Gimieron ambos las mismo tiempo que empezaban las embestidas.

Quería comenzar suave pero al carajo, la adrenalina de que alguien los descubriera era excitante.

-Te encanta- Gruñó el Uchiha al ver como su princesa llevaba su mano al clitoris para tocarse.

De pronto sonó la alarma para entrar a clases, por lo que la pareja quedo aún insatisfecha, pero esperarían a la salida para la segunda ronda.

Misión: proteger noviaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora