𝖏𝖔𝖓𝖌𝖍𝖔 𝖗𝖊𝖆𝖈𝖙𝖎𝖔𝖓𝖘

❝heater❞

jongho siempre había sido tu amigo, no sabías si su amistad llegaba a los alcances de ser llamados mejores amigos pero sabías que la pasabas bien saliendo con él.

una simple palabra de seis letras rompía toda ilusión que pudieras tener con él, pues siempre te ha visto como una hermana pequeña a la que quiere demasiado y con la que disfruta salir los fines de semana.

miraste cómo jongho caminaba por la colina correteando mientras tú le veías desde atrás mientras cargabas la sábana de cuadros roja.
jongho había llegado a tu casa sin aviso y con una canasta con sandwiches que había preparado para decirte que tuvieran un picnic improvisado esa misma tarde y accediste sin poner peros, pues pasar una tarde a su lado era de tus mejores y únicos planes.

debimos traer algo para reproducir música— jongho colocaba la manta mientras tu colocabas algunas cosas pesadas en cada esquina de esta para evitar que saliera volando por el aire que corría a esa altura.

—debiste decirme que subiríamos tan alto, hay demasiado viento aquí— te tumbaste en la manta y viste cómo jongho comenzaba a sacar un par de latas de jugo para ustedes, dejó una a tu lado y abrió la suya para beber su contenido y acostarse a tu lado.

—si te lo decía iba a perder la magia— le miraste de reojo y te sonrió, apenada por el contacto visual regresaste rápidamente tu vista al cielo y comenzaste a ver las nubes —¡mira esa!— jongho alzó la mano señalando un punto en el cielo— parece una galleta.

te reíste, jongho siempre pensaba en galletas —¿trajiste galletas?— le miraste nuevamente e hicieron contacto visual, una sonrisa apareció en su rostro y se reincorporó para extender su mano hasta la canasta y sacar un paquete de sus galletas favoritas.

—¿si quiera me conoces?— reíste por su tono y te reincorporaste intentando alcanzar la canasta para descubrir qué más traía esta dentro.

una sonrisa de emoción apareció en tu rostro al ver tu bebida favorita, un yogurt de fresa y una galleta de avena —¿es para mi?— lo sacaste mostrándoselo a jongho y él asintió mientras mordía una galleta.

—¿luce como si yo fuera a beber eso? tengo mis galletas— le diste un rápido abrazo y abriste el yogurt para comenzar a beberlo a tragos.

—¿cómo descubriste este lugar?— miraste a jongho, quien tenía la mirada perdida.

—una vez me trajo mamá, y desde entonces siempre vengo a escuchar música o... a pensar.

—¿qué piensa tu mentesita?— jongho acercó sus piernas a su torso y dejó sus brazos sobre sus rodillas.

—de la vida— su mirada quedó en el vacío y después de unos segundos, te miró de nuevo con una sonrisa.

—al menos debiste decirme que haría un poco de frío— comenzaste a frotar tus brazos intentando buscar calor.

—lo lamento, pero debiste de darte cuenta al verme con suéter a mi— jongho rió y tú te limitaste a rodar los ojos  —es broma, toma — jongho dejó su empaque de galletas sobre la manta y se quitó el suéter, te lo extendió para que lo tomaras y dudosa lo aceptaste —ahora póntelo y deja de llorar— jongho te sonrió e hiciste caso, te colocaste su suéter, el azul de poliéster con el que se veía increíblemente guapo, que olía a su perfume y que te quedaba absurdamente grande.

una risita de pena salió de ti al ver lo grande que te quedaba y miraste a jongho con un puchero, él, con una sonrisa en los labios, se acercó a acomodarte las mangas del suéter para que este te quedara bien.

—te ves bonita en él— dijo al terminar de acomodarlo, una sonrisa fue lo único que expresaste, a comparación de la enorme presión que sentías en el estómago al escuchar ese comentario acompañado de una dulce mirada que hacía que sus ojos se vieran más pequeños y su sonrisa gummy saliera a relucir.