Han pasado casi dos años desde que la Generación Dorada de Japón consiguió el Campeonato Mundial Juvenil del Fútbol, sus integrantes se han enfrentado a muchos obstaculos y lo que en un principio parecia que les abriría las puertas del mundo se convirtio en una carga para cada uno de ellos.
Pero como siempre, acostumbrados a luchar y no rendirse ante nadie ni nada, demostraron al mundo de lo que estaban hechos y de que no había sido "suerte" ganar el Campeonato Mundial Juvenil.
Ahora se encontraban ante otro reto, los Juegos Olímpicos de Madrid, el camino fue largo y dificil, pero con las habilidades de Matsuyama, Misugi y Misaki consiguieron el pase deseado y solo esperaban la inaguración para que junto a Tsubasa, Wakabayashi y Hyuga consigan la presea dorada.
Sanae Nakasawa, estudiaba la carrera de Medicina Deportiva en la Universidad de Tokio, pero pidio un cambió para irse a estudiar en la Universidad UMD, para que pueda estar junto a su más grande amor, Tsubasa Ozora, ya que despues de estar en Brasil entrenando junto con Roberto, fue enviado al equipo del Barcelona. En la vida de Tsubasa comenzó un cambió, y ella le ayudo a escoger una casa y decorarla, en agradecimiento el joven le dio una copia de su llave para que vaya a visitarlo.
Amaba su carrera y la idea de mudarse no le fue tan desagradable, porque gracias a eso podria conocer más países y ciudades, pero en el fondo sabia que todo eso lo había hecho por estar al lado del chico. Aunque no estuviera en la misma ciudad que él, iba a verlos en sus partidos y ahora que empezó los Juegos Olímpicos el entrenador Kira mandó a llamar a las antiguas mánagers porque tanto ellas como los jugadores eran importantes para el equipo.
Y el día llego, Sanae fue a su casa para saludarlo y prepararle su comida favorita, pensando que el se encontraria cansado por entrenar mucho. Entró a la cocina y vio al chico escondido debajo de una mesa, este cuando la vio llevó un dedo índice a su boca, pidiendole silencio.
- Tsubasa, ¿que haces ahí?.- le preguntó la pelirroja.
- Estoy escondiendome de Misaki, Wakabayashi y Hyuga.- respondio el chico que sonrio.
- ¿Por que?.- Sanae enarcó una ceja, confundida.
- Bueno... es que... les hice algo.- Tsubasa estaba con la cabeza baja y jugaba con sus dedos.
La puerta se abrió con brusquedad, y salio disparado un chorro de agua, mojando a ambos jovenes.
- ¡Te encontré, bastardo!.- exclamó Genzo quien al ver a Sanae soltó la pistola de agua que tenía en sus manos.
- Dejame algo a mi, si este maldito me baño con la mangera.- entró un empapado y molesto Hyuga, lanzando varios globos de agua.
- ¡Ya basta par de odiotas!.- ordenó Tsubasa.
- Que bueno que te vi entrar Sanae, sino tambien te hubiera mojado.- llegó Misaki que traía una pistola de agua al igual que el portero.
- ¿Y porque no nos dijiste, imbecil? Ya mojamos a la pobre de Sanae.- le reclamó Hyuga que le dio un zape al chico.
- Par de picarones, ¿por que estaban tan solos en la cocina? Por eso no te encontrabamos.- bromeó el portero quien sonrio con diversión.
De pronto los tres jovenes se sonrojaron y desviaron la mirada, haciendo que tanto Tsubasa como Sanae los miraran con extrañez.
- ¿Que les pasa?.- interrogó Tsubasa.
- E-es que... Sanae...- Misaki estaba muy nervioso, señalo a la pelirroja haciendo que esta y Tsubasa miraran hacia donde apuntaba el chico.
Sanae se puso como tomate, gracias a que la mojaron su blusa se habia pegado a su cuerpo y se notaba su sosten, se abrazó a si misma cubriendose sus pechos con sus brazos. Tsubasa tambien se sonrojó, saco una toalla de quien sabe donde y se la dio a la chica para que se cubriera.
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キャプテン翼 (Tsubasa y Sanae)
RandomTsubasa, Misugi, Matsuyama y Ishizaki fueron abandonados por sus managers, Sanae, Yayoi, Yoshiko y Yukari, quienes se cansaron de que los chicos no las tomaran en cuenta. ¿Podran los cuatro jóvenes volver a su lado? Algunos personajes son creados po...