capítulo 2

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A la tarde siguiente volvía de las clases de piano que doy en Brodway con la señorita Saranndon en su casa, le volví a ver a ese guapísimo que vi la noche anterior en el pub. El me sonrió y yo me paré al de poco el se giró fue a besarme, pero pensé "Otra vez no puede ser me va a besar de nuevo" me sentía como de una burbuja de aire se tratase, estaba empedernido, impresionado, asombrado de que aque guapísimo (macho ibérico) me besará una y otra vez. Volví a casa y se lo conté todo a mis hermanas, Kate y Shara se quedarón patidifusas. Lo malo que Mark, Tom y Brenda lo oyeron todo y le fuerón con el cuento a mama, pero ahí no terminó la cosa cuando se enteró mi padre la cosa fue más intensa todavía, el se enfadó mucho pero mi madre era más abierta de mente y le dijo "es nuestro hijo y quieres o no hay que aceptarlo". A partir de ahí mi vida se fue complicando poco a poco. El rumor no tardó de propagarse por todo el instituto, la gente no paraba de preguntar yo no sabía que hacer. Pero derrepente apareció Zaira que me tranquilizó, me dijo que estuviera tranquilo que nada me iba a pasar pero eso era incierto. Al de días empecé a recibir mensajes de tipo [ Marchate de Manhattan, por que aquí no hay homosexuales, solo hay gente normal] Suspiré, miré al frente y dije esto no se puede soportar.

Una historia que jamás debió de ocurrirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora