Mi click

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   Un hermoso día de sábado, apenas salía el sol y la brisa era muy agradable. Las personas de la ciudad de Los Santos salían a pasear sin preocupaciones, todo era felicidad...

Bueno al menos para algunos , porque para el superintendente de la ciudad el imponente alfa Jack Conway de aroma a Tabaco y cuerpo mamadísimo el día comenzaba con el pie izquierdo, había ya dado de baja a varios alumnos de su malla por incompetentes y ahora el trabajo de comisaría se acumulaba.

 La gente se amontonaba con denuncias de mierda lo que ocasionó que el Alfa con un fuerte gruñido y un asfixiante aroma los ahuyentara a todos mientras decía que no atendería  denuncias que no fueran de vida o muerte, aunque sabia que no debía hacer eso... por ética, pero ya lo habían colmado. Dejó a uno de sus comisarios  Greco otro fornido y barbudo alfa de aroma a Madera que se hiciera cargo de los que quedaron y subió a su despacho con un creciente dolor de cabeza.

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  Mientras tanto no muy lejos de ahí dos omegas traviesos, sin dinero y sin un lugar fijo para vivir  ideaban un plan para atracar una tienda y poder dormir hoy bajo un techo y al menos comer algo calientito...

   El primero de ellos Gustabo García un Rubio de ojos azules tan brillantes como el cielo, esbelto pero de buen cuerpo y de aroma a pastel de chocolate, se acomodaba el pasamontañas mientras cuestionaba a su acompañante: 

   G.-- Ok  Perla has entendido el plan?- * le volteó a ver con una mirada inquisitoria*

  El segundo, Horacio Pérez un aperlado y alto omega (mas que un omega normal) de aroma a algodón de azúcar , de cuerpo perfectamente cuidado y  peinado con una muy llamativa cresta de color rojo sacaba su pasamontañas de la bolsa de su sweater y respondió:

   H.--  aaaam si , haber.... *decía éste mientras recordaba volteando hacia arriba viendo a la nada y contando con sus dedos* ...tomamos prestado un coche, entramos al primer badulaque que veamos con clientes, tomamos el dinero , esperamos a que lleguen los polis  y  te dejo que uses tu pico de oro * sonrió por haberlo recordado todo mirando a su amigo.

  G. -- eeeeeeso es , y si sucede lo impensable? * el rubio volvió a cuestionar a su amigo*

  H.-- no te preocupes bebé, hemos practicado bastante  y solo debo recordar que nadie puede obligarme a nada * le respondió con una sonrisa de orgullo antes de ponerse el pasamontañas.

 G.-- ese es mi niño¡ , bien , vamos ya  que  nuestros últimos supresores no duraran toda la vida y hay asquerosos alfas violadores por todos lados.  * dijo el rubio poniéndose en marcha seguido del de cresta* pillaron el primer auto que vieron y se dirigieron al establecimiento mas cercano.

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   En comisaria el superintendente sentado en su despacho estaba  sobando sus sienes  con los codos sobre su escritorio -- que maldito dolor de cabeza--  pensó para si cuando otro de sus comisarios  entro sin tocar, Viktor Volkov un alto y espigado alfa de cabellos y ojos grises y piel blanca un ejemplar modelo ruso de aroma a vodka 

 C.-- anormal , no te enseñaron a tocar antes de entrar?¡ * le reclamo el super  mirándolo de mala manera

 V.-- disculpe superintendente pero ha saltado un alerta de robo y pensé que.... * el mayor  ni lo dejo terminar , se paro de la silla y se encamino fuera , lo que mas quería en ese momento era salir de ese ambiente en comisaria y sentir la brisa del día en la cara, aunque esto fuera para ir a un atraco

si, pero noDonde viven las historias. Descúbrelo ahora