Eran exactamente las 7 de la mañana y debiamos estar en la empresa de Calle a la 9.
La mire y estaba aun dormida, respiraba lentamente y podia lograr sentir los latidos de su corazon.
A veces siento miedo, digo ella es hermosa y yo siento sinceramente que no estoy a su nivel.
-¿En que piensas?- su voz me saco de mis pensamienos, sonrei en cuando la escuche mas ronca de lo normal.
-En cosas...Buenos dias!
Me beso cortamente y al rato entro Salo refregandose el ojito con la mano empuñada.
-Hola....-ambas le dimos en la mejilla y el se recosto contra Calle, ella solo rio y lo apego a su cuerpo, era adorables.
-Salo...luego te quedaras con los padre de Calle..te portas bien ¿eh...?- en realidad me habia quedado mucho mas tranquila al saber que ellos estarian con el.
Asintio adormilado, y estoy segura que no entendio nada de lo que dije, los deje dormir un poco mas y a las 8:30 los levante a ambos, me costo pero lo logre, era como dos osos que odiaban moverse.
Hice mi aseo personal y me vesti semi-formal al igual que Calle, me quede mirandome al espejo con una sonrisa, Calle me miraba desde el umbral de la puerta y se acerco para acariciarme mi mejilla.
Mientras tanto, Salo ahora estaba un poco mas emocionado con la idea de salir de la casa de Calle.
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Dejamos a Salo donde German y Mafe y partimos directo a la empresa, pense que Salo estaria algo mas cohibido al estar sin mi, pero no.. en cuando bajo del auto se olvido por completo de nosotros.
Estaba nerviosa, y precisamente no era la mas coordina cuando estaba asi.
Bajamos del auto y Calle entrelazo nuestras manos dandome apoyo, cosa que internamente agradeci.
Entramos y de inmediato miradas se posaron en la jefa y la chica que la acompañaba.
Un hombre se acerco y Calle siguio caminando mientras el hombre nos seguia hablando de algo que no entendia del todo.
-Las fichas estan listas solo falta su firma...- asintio con el ceño fruncido y subimos al ascensor, en ese momento me di cuenta en lo que decia su madre.
Ella aca era distinta daba un paso y todos se estremecian al verla como si estuvieran viendo a la mismisima malefica.
Ni siquiera daba las gracias o los buenos dias solo pasaba como si nadie existiera.
Odio a la gente asi pero Calle rompia los estandares, me parece increiblemente sexy su cara seria y su caracteristico ceño fruncido pero por mucho que adorara que fuera asi, tambien podia llegar a ser irrespetuoso para algunas personas.
Entramos a su oficina y se sento frente a mi mirando una carpeta.
-Bien, señoria Garzon-sonrei y ella me siguio pero luego volvio a estar seria-¿porque busca trabajo aca en empresa Calle?
-Porque me han dicho que la jefa es muy guapa y queria comprobarlo.-Ella arquea la ceja.
-¿Y lo comprobo?- lo pense unos segundos pero termine por asentir mordiendome el labio inferior- bueno, la jefa dice que solo la contrata con una condicion.
-¿Cual seria, Señorita Calle?
-Un beso y un abrazo le vendria bien...-rei negando.
Me levante y me sente en su regazo y la bese, era el cielo... sus labios aprisionaron los mios mientras mi mano apretaba su nuca, abri los labios cuando los suyos me lo pidieron y cuando el aire fue necesario me separe y escondi mi rostro en su cuello.