Había escondido en mi mochila unos buenos cigarros y un buen vino que le había sacado a Florencia de su bar cuando pasaba por un reconocimiento en su distrito.
Coloqué varias cargas de dinamita en la entrada de la catedral y puse la caja de música al lado de los megáfonos, así los alemanes sabrían que los estaba llamando y de paso quería escuchar música antes de morir.
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Una ciudad en llamas. [Legado de Redil]
Mystery / Thriller(Tercer libro) Mis memorias, mis errores y mis victorias están aquí.