Una visita inesperada

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Ya habían pasado dos años de la guerra contra Gea en la que casi me había convertido en una sombra permanentemente, y eso definitivamente no estaba en mi lista de cosas por hacer, después de este tiempo la vida en el campamento era... ¿cómo decirlo sin ofender a nadie? ABURRIDA, sí, con mayúsculas, Rachel, Ella y Tyson seguían sin averiguar cómo volver a tener las profecías, y la verdad es que nadie se había quejado por la falta de ellas, especialmente yo: Nico di Angelo, la única vez que me habían mencionado en una estuve encerrado en el frasco de bronce, una experiencia que no se la deseo a nadie. Pero regresando al tema, la vida es un poco aburrida por aquí, tanto que he tenido que apuntarme a dar clases de espada a los chicos nuevos, ¿quién iba a decirlo?

Bueno, tampoco ha sido tan malo, ya he empezado a trabajar sobre hacer amigos y todo eso, creo que voy progresando, al menos ya puedo soportar que la gente me toque y me abrace, sobre todo Jason, quien siempre que se emociona me abraza. Incluso ya puedo decir que Percy y yo somos amigos, como sea, todo eso ha estado bien, pero... hay alguien que hace que mi estómago se revuelva cada que se me acerca, lo cual, tengo que agradecer a los dioses, pasa muy seguido, estoy hablando de Will Solace, en este tiempo hemos logrado conocernos más, lo cual es bueno y malo, bueno porque puedo estar con él mucho tiempo, y malo porque, creo que estoy enamorado de él. No le he dicho nada obviamente, no quiero asustarlo, pero por momentos creo que él siente algo por mí, lo cual no dura mucho ya que recuerdo inmediatamente quién es él: hijo de Apolo, rubio, con ojos azules increíbles, pecas, alto como modelo... lo bueno es que en este tiempo también he crecido, ya casi lo alcanzo, pero aun así, sigo siendo más bajo que él, básicamente soy más bajo que cualquiera de mis amigos, ¿por dónde estaba? ¡Ah, sí! Will, en pocas palabras él es increíblemente atractivo, mientras que yo... pues, digamos que no tanto.

-¡Nico!- volteo a ver quién es y me encuentro con el problema número uno de mi vida.

-Hola Will- le respondo tratando de ocultar mi alegría de verlo, él me alcanza y nos dirigimos a desayunar como cada mañana, creo que es una rutina que me gusta

- ¿Qué vas a hacer hoy?- es la pregunta que siempre me hace, creo que si no fuera él lo consideraría aburrido, pero es la única manera de saber algo sobre sus planes del día y así, tal vez darme una vuelta por donde él se encuentre, claro, si es que me da tiempo.

-Tengo que dar unas clases de espada a unos chicos de Hermes y Piper me pidió que dejara entrar a la clase a dos de sus hermanos que acaban de llegar- él me sonríe y yo volteo hacia otro lado para que no vea que estoy rojo.

-Suena bien, yo tengo que quedarme en la enfermería hasta las 4, pensaba que tal vez... quisieras pasarte un rato y ayudarme con unas cosas.

-Tienes a tus hermanos Solace, no necesitas un esclavo más- sonrío mientras me imagino pasando la tarde con él, como a veces lo hacemos, claro que quiero ir pero no le diré que sí luego, luego.

-Vamos Di Angelo, me gusta cuando pasas a ayudarme, además la chica de Afrodita que ayudaste hace dos días con su rodilla raspada se pasó para preguntar por ti.

-¿En serio?- me acuerdo de la niña, tenía como 10 años y estaba llorando, solo le había limpiado la rodilla como Will me había enseñado y después le había puesto una gasa, no había sido gran cosa.

-Preguntó por el doctor que usaba una playera negra, quería darle las gracias, le dije que irías hoy

-Bueno, iré después de las clases- trato de sonar aburrido, pero la verdad es que me estoy muriendo de emoción, creo que esa niña merece un regalo por ayudarme.

-Te estaré esperando- por un segundo miré a Will a los ojos y me arrepentí, solo asentí y me fui a la mesa que compartía con Jason y de pronto no tenía mucha hambre, cada que me pongo nervioso me pasa eso.

-Siento una especie de tensión por aquí

-Cállate Grace- miro su plato lleno de hot cakes y tomo uno- no empieces.

-Todo el campamento nota que hay algo entre ustedes- me dice mientras sonríe divertido, a veces Jason es como el hermano molesto que nunca pedí pero agradezco por tener.

-Es porque son unos chismosos- Jason se empieza a reír y yo logro sonreír un poco- necesitan ocuparse de sus cosas.

Terminamos de desayunar y nos vamos a nuestras actividades, la clase de hoy era algo fácil, les enseñe a los chicos los movimientos más sencillos con la espada al estilo griego y al estilo romano, resulta que después de pasar tiempo en ambos campamentos había logrado aprender las dos técnicas lo cual, según Clarisse, era sumamente útil, así que terminé dando clases. Contaba los minutos para que la clase terminara y así pudiera ir a las duchas y pasar por algo para llevarle a Will, ¿por qué me pasaban estas cosas a mí? Primero Percy, luego Will... solo esperaba a que pasara y así ya no me sienta mal cada que estoy con él, me siento como un mentiroso, porque no lo veo como amigo, y se me hace un poco bajo, pero cada que lo veo y me sonríe, se me olvida toda la culpa.

Cuando ya voy camino a la enfermería con dos platos de comida, noto una figura familiar cerca de los árboles, parece que mi día no será tan común después de todo.

-Hola padre

-Es mucha comida para ti- trata de hacer un comentario divertido pero definitivamente las bromas no están en el repertorio del dios del Inframundo, ni las relaciones padre-hijo sanas

-No es sólo para mí, es para un amigo

-¿El chico de Apolo?, los he visto pasando mucho tiempo juntos- oh, no ¿él me espía?

-Mejor dime qué es lo que quieres y nos ahorramos la plática inútil

-A veces se me olvida que tienes un carácter extraño- murmura mi padre

-Entonces no olvides de quien lo heredé- a veces siento que si sigo contestándole así no viviré mucho, pero mi boca parece no importarle y lo sigo haciendo.

-Jovencito, no me hables así, ya que quieres que vaya al punto lo haré, Cerbero escapó- al escuchar eso casi se me caen los platos- hace dos días que no está y necesito que lo encuentres y lo traigas a casa.

-¿Cómo que escapó? ¡¿En qué momento el perro más grande del mundo escapa y nadie lo ve?!

-No te concentres en de quién fue la culpa, de eso me estoy encargando yo, quiero que busques a mi perro y lo traigas a casa

-Pero, ¿por qué yo?

-Disculpa si te veo muy ocupado perdiendo el tiempo con tu "amiguito"- Hades hace una mueca burlona y mi mano parece cobrar vida y quiere aventarle mi plato de comida pero me resisto.

-Bien, lo haré- digo esto de la manera más seria que puedo- ¿alguna idea de por dónde estará?

-Ninguna, lo cual lo hace más divertido, ¿no crees?- alzo una ceja y mi padre comienza a caminar hacia unos árboles, lo veo alejarse y suspiro, después recuerdo a donde iba y comienzo a caminar, cuando llego veo a Will con la niña de Afrodita, ella se me acerca y me da una paleta mientras me da las gracias, pongo los platos sobre una mesa y la tomo, esto es raro, volteo a ver a Will y me dice moviendo los labios "abrázala", lo hago y ella me sonríe y se va.

-Eso estuvo bien Di Angelo- le paso su plato de comida- ¿por qué esa cara?

-Mi padre quiere que vaya a buscar a su perro...

-¿Te refieres a...?

-Sí, quiere que vaya a buscar a Cerbero, al parecer escapó del Inframundo y está dando un pequeño paseo.

Cómo encontrar a un enorme perro de tres cabezas y no morir en el intento.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora