driving (me crazy)

Eran como las once de la noche cuando Sunwoo salió del trabajo. La jornada había sido algo estresante, por lo que no veía la hora de llegar a su departamento, tomar una ducha, comer y lanzarse a los fuertes brazos de su pareja a dormir hasta que el fin de semana acabara. Pero debía esperar a que Hyejin, su amiga y compañera de trabajo, terminara de hacer sus necesidades en el baño para llevarla a casa como lo había estado haciendo toda la semana al quedarse sin tu auto por enviarlo al taller.

Diez minutos después de haber estado recostada contra la pared revisando su inicio de Instagram, Kim oyó una puerta abrirse, por lo que levantó la mirada y vio a la pelinegra salir del baño de damas obsequiandole una sonrisa.

-Perdón, cielo. Tomé mucho té hoy -Se disculpó caminando hacia la castaña.

Esta le restó importancia devolviéndole la sonrisa y se dirigieron a la salida, saludando al guardia de seguridad antes de encontrarse con la fresca brisa otoñal. Se encaminaron por el extenso estacionamiento recordando sucesos interesantes y graciosos del día hasta encontrar su auto, pero algo que vio Ahn la detuvo de abrir la puerta.

-No me dijiste que tenías nuevo chófer -Mencionó, a lo que la menor la miró confundida. Hyejin hizo un gesto con la barbilla hacia el frente y Sunwoo siguió la dirección hasta hallar a... ¿Su novio recostado en su auto?

Sunwoo se despidió de su amiga y fue hacia Yunho, quien se encontraba inmerso en su celular, que ni se percató de su presencia hasta que sus zapatos aparecieron en su campo de visión. Elevó la mirada de su celular y. Dios. Sunwoo podía jurar que ninguna de sus ex parejas la habían observado con tanto brillo en los ojos por más de cinco meses.

Y con Yunho llevaba un año y medio siendo novios, y tres conociéndose. Y aún así, la ha mirado con adoración desde el primer momento.

-¿Por qué no me avisaste que vendrías? Habría bajado más temprano -Dijo ella antes de rodear su torso con sus brazos.

Él recibió su abrazo con gusto, depositando un beso en su cabeza antes de alejarse un poco para volver a mirarla a los ojos -Quería confirmar que no me estabas engañando con algún compañero tuyo.

-Justo hoy faltó.

La expresión del alto cambio a una alarmada -¿Ha-hablas en serio?

El serio semblante de Kim se arruinó al escaparsele una carcajada -¡Claro que no, tarado! Intentaba seguirte el juego.

La tensión y el miedo pronto abandonaron al castaño -Es que... te salió tan natural que me lo creí -Expresó soltando una risita nerviosa.

-Explícame ¿Cómo podría engañar al dulce gigantón que me pagó todo el arreglo del auto?

-Bueno, era mi deber. Después de todo, yo provoqué los daños -Lo último lo dijo en voz baja, evitando mirarla por vergüenza.

Yunho acababa de sacar su licencia para conducir, le pidió prestado el auto a su novia para buscar unas cosas en lo de un amigo pero los nervios le jugaron una mala pasada y terminó estrellando el vehículo contra un poste de luz. Estuvo el resto del día sin poder mirarla a los ojos por lo culpable que se sentía. En cambio ella se encontraba aliviada de que él no haya salido herido.

-Ya hablamos de esto, bonito. Fue un accidente -Murmuró con una dulce voz, acariciando su mejilla con su pulgar. Él pareció relajarse ante su toque, cerrando los ojos e inclinando su rostro contra su mano en busca de más caricias -Hablando de mi auto ¿No era que mañana me lo devolvían?

-Se suponía, pero Namjoon Hyung se libró de otros pendientes y terminó de repararlo antes de tiempo. Hace una hora me llamó y fui por él. Y también aproveché para adelantar la compra del mes.