MLP -[La Gran Leyenda Del Furia Nocturna]-

-Omaque 4-

Omaque 4: Potencia Desatada En Los Cielos.

(Dos meses después de La Plaga Del Siglo)

La tarde empezaba, el sol empezaba a bajar de su punto más alto poco a poco, los habitantes de Ponyville hacían sus cosas, uno tan diferente como el otro, dormían, limpiaban, jugaban, comían, salían de sus hogares, hacían sus pasatiempos, tanto o tan poco como alguien podría querer.

Una habitante en particular hacía algo diferente que de otros días, una pony de la raza pegaso de pelaje y plumas de color azul cielo, melena y cola multicolor y ojos morados se encontraba en su hogar echo de nubes y cataratas de arcoíris.

Ella volaba por todo el lugar con los ojos cerrados, parecía estar pensando en algo que no se le salía de la cabeza, sentía que se le olvidaba algo, algo que para ella era "importante" a falta de un término mejor... se frotaba las yemas de sus dedos en los costados de su cabeza, frunciendo el ceño por tratar de encontrar el archivo en su cabeza con los recuerdos...

Rainbow Dash-... mmph... ¿era una apuesta? No, no era eso... eh... una broma, tal vez... vamos, si no lo recuerdo no podré dormir bien- ¡HAY!

Dijo a lo último al haberse golpeado la cabeza con el borde de su cama... de alguna manera, tal vez por el golpe o por la conveniencia del guion, un foco se había iluminado en la cabeza de Rainbow, finalmente había recordado lo que tenía pendiente.

Sin decir nada y con una sonrisa determinada, se reincorporó y se fue de su hogar volando por la ventana.

Había sobrevolado por todo el pueblo buscando algo que desconocemos, veía las calles, los techos, a su alrededor por si se encontraba en el cielo, incluso tuvo que aterrizar para ver si se hallaba dentro de alguna tienda o casa.

Tuvo que detenerse para pensar en dónde podría estar, murmuraba en vos baja, enumerando todos los lugares donde había buscado... hasta que abrió sus ojos como platos y se dio un facepalm tremendo.

Rainbow Dash- ¡ugh, pero claro!

Reclamó empezando a volar nuevamente, ¿cómo no se le había ocurrido que PODRÍA estar en donde casi siempre está? Se sentía tan ignorante pero era un sentimiento que se guardaría para sí misma.

Finalmente vio el lugar a lo lejos y sonrió al mismo tiempo que volaba a menor velocidad hasta que sus cascos regresaran a la tierra, llegando a paso rápido hasta la puerta de madera y tocarla con algo de insistencia, dando leves saltitos con impaciencia...

Al final abrieron la puerta, dejando ver a la portadora de la magia y amiga de Dash, Twilight Sparkle.

Twilight- ¿Rainbow Dash? ¡Hola! ¿Sucede algo?

Rainbow Dash- hey, Twilight, quería hablar con Chimuelo.

Twilight- ¿Chimuelo? Claro, yo lo llamaré, pasa.