Imperio Azteca.

5.2K 527 556
                                    

-- Izuku, por todos los Dioses. ¿Dónde te has metido.? -- Cuestionaba un molesto rey mientras revisaba cada una de las cámaras en el gran Templo. 

--Mi rey, el joven Izuku se encuentra en sus aposentos como se lo ordeno.-- Sus acciones fueron interrumpidas por la voz de un joven Omega de cabellera rubia. 

El único que residía ahí como próximo sacerdote y fiel compañero del futuro rey, con el que pasaría los celos una vez que su pareja fuera sacrificada para bien del pueblo.  

--Es cierto, que despistado soy.-- Dio un pequeño golpe en su frente y luego emprendió camino para ver a su primogénito. 

Podría ser el Tlatoani supremo de una de las civilizaciones más importantes del periodo Posclásico, pero seguía siendo un completo despistado cuando no tenía asuntos importantes que atender. 

Tlatoani: Término usado para designar a los gobernantes.

Período Posclásico: Periodo en el que se desarrollaba la civilización Azteca. 

Decía llamarse Hisashi y que Itzcóatl era su sobrenombre.

Itzcóatl: Fue el cuarto rey Azteca. 

Antes de perderse entre los largos pasajes del Templo le pidió al Omega que llevara un mensaje.

--Kaminari, avisa a Eijiro que los preparativos deben estar listos en dos días y los guerreros informados.-- Su tono de voz había cambiado de uno tranquilo a uno más profundo y lleno de autoridad. 

--Como ordene mi rey. -- Hizo una reverencia antes de tomar el camino contrario a su líder. 

El mayor imito sus acciones y continuo su camino. Encontrándose minutos después frente una gran puerta hecha de plata e incrustaciones de jade formando lo que parecía ser un colibrí. 

Dio unos cuantos golpes suaves y luego abrió, dejando ver un cuarto prácticamente vacío a excepción de un solitario Izuku sentado en el centro de espaldas aparentemente meditando. 

Portaba unas delicadas prendas hechas a mano cien porciento de algodón que solo cubrían una parte del pecho y su entrepierna hasta la parte baja de los muslos. Dejando al descubierto su abdomen, piernas y hombros adornado con pequeñas joyas.

Sobre sus rizados cabellos verdosos posaba un pequeño tocado hecho de oro, plata,  incrustaciones de jade y hermosas plumas de quetzal como símbolo de su realeza.  

Múltiples accesorios del mismo material relucían en sus muñecas y cuello.

Pero lo que más llamaba la atención  era un hermoso collar de conchas que terminaba en una preciosa piedra de color turquesa en forma de corazón.  

--Estaba buscándote, creí que habías desobedecido y salido del Templo.-- Entro tratando de no hacer ruido y alertar al menor.

--Ordenaste que esperara aquí los próximos dos días para mantenerme protegido hasta que acabara el combate... padre.-- No realizo ningún movimiento, parecía estar hablando dormido.

--Eso no fue lo que dije, solo te pedí permanecer dentro.-- Coloco una mano sobre el hombro del peli verde, pero esté seguía sin reaccionar. 

--Es lo mismo. ¿Me necesitas para algo.? o ¿A que se debe tu búsqueda.?.-- Retiro la mano de su progenitor y comenzó a levantarse lentamente para poder dar media vuelta y quedar frente a frente. 

--Necesito que vengas conmigo para un asunto importante.-- Giro un poco su cuerpo y levanto su mano señalando la puerta para que saliera. 

El pecoso no hizo esperar al mayor y obedeció la orden.

Imperio Azteca [Katsudeku One Shot] [Omegaverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora