Era una tarde hermosa de verano, había visto muchas pero esta simplemente no tenía comparación. Artie y yo habíamos decidido salir ese día a un lugar turístico de nuestro país, una hermosa montaña que te permitía ver el hermoso cielo.
Dimos un recorrido por todo el lugar, viendo si había chicos guapos, claro. 7v7
Luego, nos pedimos un batido. Yo uno de chocolate (perdonen la obsesión) y Artie uno de moras. Luego de esto, hablamos de banalidades. Sin importar el tema, siempre la pasabamos bien.
Nuestras personalidades siempre han sido diferentes pero esto no toma importancia a la hora de compartir tiempo, simplemente somos nosotras y nos divertimos.
Cuando terminamos nuestros batidos y, claro, luego de que pidiera un pastel para llevar (Because son el amorch de mi life) nos retiramos del lugar y nos dirigimos a un bello sitio que te permitía mirar la mejor parte del atardecer.
Mientras estábamos recostadas en la grama nos sumimos en nuestros propios pensamientos. Era un silencio cómodo acompañado por el sonido de las aves y tranquilidad.
Oyee.. Amiga de mi alma y mi corazoncito bello -. Arti me dirigió una mirada indecisa y una sonrisa y luego de una pequeña pausa decidió hablar -. ¿Jamás te preguntaste dónde está tu padre en estos momentos o que es de su vida?-. Voltee a verla algo sorprendida. Jamás me esperé una pregunta así. Llevabamos siendo amigas 3 años y teníamos la confianza suficiente de preguntarnos algo así pero seguía siendo un tema del que no me gustaba hablar.
Lo que ella sabía era lo mismo que yo, se había ido cuando yo era apenas una niña. Recordar no me gustaba nada así que sacudí ligeramente mi cabeza a modo de sacar aquellos pensamientos Era un tema que siempre evitamos con mi mamá, no saber nada se había vuelto algo cómodo pero empezaba a sentir el peso de la ignorancia.
Eres demasiado curiosa Artie-. Soltamos pequeñas sonrisas y ella movió sus hombros en un gesto de indiferencia.
¿Qué te puedo decir?-. Hizo una cara chistosa y río junto a mí, le di un pequeño manotazo en el hombro e hicimos silencio por un momento. Confiaba en ella, pero aún era difícil expresar lo que sentía por medio de palabras, esto sin contar el miedo que tenía de ser juzgada.
Ay..A ver...- No sabía como expresarme sobre el tema, tenía que ordenar mis ideas-. Déjame saco mi pastel-. Si iba a hablar de algo así necesitaba que el pastel me distrajera lo suficiente como para no entrar en detalles. Después de el primer mordisco me decidí:
Claro que lo he pensado. Hay una parte de mi que quiere encontrarlo-. Saqué mi lengua a modo de limpiarme la barbilla de las migas y proseguí.- Y Hablarle pero otra solo quiere deshacerse de su recuerdo.- Tragué y proseguí:
Por un lado, se que se fue dejándome sola, desatendiendo de mi sin importarle nada. pero quiero saber porque dejarme así. Porque se desapareció de nuestras vidas de esa manera.Y no quiero culparlo por ello, quiero pensar que tiene una razón.- Suspiré de manera pesada trayendo a mi cabeza todos aquellos recuerdo que tanto me gustaba ocultar y recordando que por más que me tratará de ocultarme debajo de vagas esperanzas la verdad era inminente:
Del otro lado está la parte que lo culpa de todo y no quiere saber nada. Esa parte que me parece egoísta pero que a la vez sensata. Si me lo preguntas ahora, sí, sí me gustaría verlo, saber que está bien, y aclarar mis dudas.No quiero seguir juzgandolo por algo que yo pienso y, sobre todo, no quiero guardarle rencor-. A pesar del debate que llevaba conmigo sabía que era inútil tratar de engañarme. Me dolía sí, pero también quería hablarle y no guardarme mis sentimientos, quería aclarar lo que sentía y no seguir llevando ese peso en mi corazón. Después del silencio reconfortante que se formó y agarrar un pedacito más del pastel, hable de nuevo:
Ahora es tu turno. Cuéntame sobre tus padres. Consideralo.... una paga-. Le dije con una sonrisa y extendiendo mi mano como para sellar nuestro trato, ella la aceptó con un puchero.
Eres mala.- Me sonrió pero luego se quedó pensativa por un momento- Bueno, es hora de una trágica historia-. me dijo esto acompañado de un gesto exagerado, sonreí de manera triste a sabiendas de que lo hacía para que no le doliera demasiado el recordar. Siempre fue un tema sensible, por más que pasara el tiempo le afectaba mucho, aunque no quisiera aceptarlo-.
Mis padres tuvieron un accidente automovilístico cuando yo era pequeña-. Se quedó en silencio y supe que los recuerdos inundaban su mente de nuevo. Apreté su mano en un gesto conciliador, sabía cuan difícil era hablar de lo sucedido para ella. Y la comprendía.- Mi padre falleció al instante y mi madre murió poco después de llegar al hospital..... Yo recuerdo la angustia de mi tía cuando nos avisaron y su llanto cuando se enteró de lo sucedido.- Sus ojos empezaron a llenarse de lágrimas y supe que debía abrazarla. Ella rápidamente se separó de mi abrazó para secarse las lágrimas con rabia y tratar de sonreír de nuevo.
Y allí estábamos, tratando de ignorar los sentimientos que nos producía hablar de nuestros padres, era nuestro talón de aquiles y no queríamos admitirlo. Deseábamos con todo nuestro corazón olvidar y no sufrir.
Luego de un rato habló, fue algo simple. Algo que parecía una promesa de unas chicas ingenuas pero fue lo que marcó nuestras vidas para siempre.
Busquemos a tu padre. La ví a los ojos de manera indecisa ¿Mi madre me dejaría buscarlo? ¿Es la mejor decisión tratar de encontrarlo? Me quedé un gran rato pensándolo sin saber que decirle. ¿Lograríamos algo? Al fin que solo eramos unas adolescentes con la cabeza en los cielos. Al ver mi silencio ella habló.
Hazlo, no sabes lo que daría por ver de nuevo a mis padres. Quiero que tu si tengas esa oportunidad.- La vi y supe que debía hacerlo, tenía que tratar de encontrarlo, por mí y por ella.
Hagámoslo
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𝑬𝒍 𝒔𝒊𝒍𝒆𝒏𝒄𝒊𝒐 𝒅𝒆 𝒍𝒂 𝑽𝒆𝒓𝒅𝒂𝒅 ...
RomanceDos amigas emprenden un viaje a París, pero se dan cuenta que su trabajo no es cosa fácil