Entró a los vestuarios del pabellón echando humo por las orejas y maldiciendo por lo bajo después de ser enviado a estos mismos casi a patadas por sus propios compañeros, apretando sus manos en forma de puño por la rabia de tener que detener el entrenamiento justo en ese momento. Varios estornudos y la dificultad para moverse habían sido la razón por la cual decidieron dejar que se fuera a casa; o mejor dicho, echarlo a empujones y amenazas por la constante testarudez del de cabellos teñidos de rubio. De no haber sido por la llegada del capitán justo en ese momento y de sus palabras firmes hacia él, Atsumu se habría quedado discutiendo con su hermano y sus otros amigos allí en medio de la pista, negándose a marcharse hasta que se terminara la hora del entrenamiento.
Por esa razón, enfurecido consigo mismo por no haberse cuidado correctamente, golpeó con fuerza una de las puertas de los taquilleros, soltando un grito ahogado que le provocó una constante tos por más de cinco largos segundos. Suspiró aliviado cuando por fin pudo recuperarse, cerrando sus ojos por unos momentos antes de dirigir su mirada hacia su taquilla.
Ahí se percató de algo. Frente a la puerta y sobre los banquillos que estaban pegados justo a los pies de los taquilleros, había una bola llena hasta arriba de objetos que no distinguía a la perfección, pero podía, tal vez, hacerse una idea de qué eran: comida y medicamentos.
Se acercó para revisarlos, intrigado para intentar saber quién había sido el responsable de ello y quién parecía preocuparse por él a tales puntos de tener que dejarle las cosas allí mismo. Seguramente su hermano no habría sido, más porque lo conocía y con facilidad podría atenderle una vez llegara a casa. Los otros chicos tampoco parecían ser los típicos que te dejaban una ' bolsa sorpresa ' para que pudieras recuperarte lo antes posible; eran más de esperar a que te recuperaras que otra cosa en especial y desearte lo mejor para que volvieras a jugar con ellos lo antes posible.
Así que, aún confuso por querer saber de quién se trataba, llegó frente a la bolsa, encontrándose con una pequeña nota pegada en el borde de esta y escrita con unas simples palabras.
❛ Atsumu, asegúrate de comer y dormir.
ㅤㅤ─ Kita。❜El rubio releyó una y otra vez la misma nota, como si de una declaración de amor se tratara. Sus labios se curvaron y un ligero puchero se instaló sobre estos, llenando sus ojos de pequeñas lágrimas al ver que su querido capitán y uno de sus amigos cercanos, había sido el primero en preocuparse por él y dejarle comida y medicamentos para que mejorara rápido.
Sí era cierto que hacía un par de días ya se empezaba a encontrar mal, pero pensó que tal vez era un simple resfriado que no afectaría en las prácticas. Con el pasar de los días, ese simple resfriado parecía ir en aumento, a tal punto de conseguir que su frente estuviera ardiendo por fiebre en mitad de los entrenamientos. A consecuencia de ello, era obvio que en ese último día se hubiera comido varios balones por no saber ni adónde se encontraban.
Alejó la bolsa, dejándola a un lado para al menos poder cambiarse rápidamente y así irse lo antes posible, evitando que sus compañeros fueran a buscarle por tardar tanto allí dentro. Dejó la camiseta que estaba usando en la bolsa de deporte y la cambió por la nueva; una vez en casa ya se bañaría con más comodidad.
Una vez listo, cerró con la contraseña del candado de su taquilla y salió de los vestuarios con ambas bolsas: la de deporte, y la ' bolsa sorpresa del bien '. Los chicos le miraron y alzaron sus manos para despedirse tras soltarle un « recupérate » con una ligera sonrisa de compasión. Miya les devolvió la sonrisa, entre agotado y todavía enfurecido por tener que marcharse, y empezó a dirigirse hacia la salida del pabellón. Hasta que una voz le hizo detenerse casi pisando las escaleras.
ㅤㅤ─────Ey, ¿tomaste la bolsa? ─────Volteó para mirar al de cabello albino con aquellas mechas azabaches, parado justo a dos pasos detrás de él. Se estaba terminando de poner correctamente la chaqueta, pasando la cremallera hasta arriba y acercándose los pasos que los distanciaban hasta colocarse a su lado. Atsumu asintió con la cabeza, alzando la mano con la cual cargaba la bolsa mencionada─────. Te acompaño a casa ─────Respondió sin más, manteniendo su mirada fija al frente.
ESTÁS LEYENDO
#ㅤ𝐓𝐀𝐊𝐈𝐍𝐆 𝐂𝐀𝐑𝐄 𝐎𝐅 𝐘𝐎𝐔 | atsukita。
Fanfic❛ Atsumu, asegúrate de comer y dormir. ㅤㅤ─ Kita。❜ Haikyuu!! fanfic . ¡¡ AtsuKita ; Atsumu Miya × Shinsuke Kita. Si no te gusta, evita malos comentarios. ♡ One Shot Cortito. Intenté asegurarme de que no hubiese un fic parecido. Si existe alguno, esp...