❝Night 2❞ NJ

Sangre ✟ 12

Pero ahora sera un híbrido y ya nadie podrá hacerle daño, ve lo por ese lado– hablo el rubio–

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Namjoon con el paso del tiempo se volvió muy unido a Soobin, de alguna forma se sentía identificado, por culpa de los demás terminaron malditos en el bosque

El moreno miraba al menor como si fuera su hermano pequeño, lo cuidaba y protegía de todo, Soobin se sentía feliz de ya no ser golpeado, de tener una familia que lo tratara bien

Pero por otro lado Yeonjun lo extrañaba, no supo que pasó con su amigo, simplemente un día ya no volvió a la escuela, desaparecio y nadie sabía nada, a nadie parecía importarle que aquel joven dejara de asistir a la escuela

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Mamá, dios debe de estar molesto conmigo– dijo tristemente Yeonjun–

¿por qué dices eso mi cielo?– cuestiono la mujer–

Se que mi deber es ayudar a los demás, ayudar a quien lo necesita y lo intente pero no lo logre–

¿Lo dices por el joven del que nos hablaste?– Yeonjun asintió– a veces dios tiene otros planes, nosotros debemos hacer todo lo que esté en nuestras manos para ayudar a los necesitados, como Jesús lo hizo, amar al prójimo pero el único que puede decidir nuestras vidas es el, quizás tiene algo planeado para el joven Soobin y tú ya cumpliste con tu labor–

Pero... Lo extraño, quiero saber cómo esta–

Solo dios sabe hijo mío, pero no te sientas mal, tú cumpliste con tu deber mi vida, es más el padre Taehyung quiere que lo ayudes en la iglesia, eres tan bueno que hasta el lo ha notado–

¿En serio?–

Cuando acabes este año escolar empezarás a estudiar en la iglesia con el–

¡Gracias mamá!– la abrazó–

Pero en el fondo, aún sentía que tenía que ayudar a Soobin, tenía que encontrarlo y no le importaba lo que dios hubiera planeado para el esta vez

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Una misa especial era llevada a cabo, ya solo faltaban dos días para el viernes santo y los feligreses estaban emocionados, después de una hora aproximadamente la misa concluyó, así que todos comenzaron a salir de la capilla, sin imaginar lo que verían

Toda la fachada estaba manchada con sangre, está aún se encontraba cayendo por las paredes incluso estaba escurriendo en el suelo una biblia empapada de esta

¡Dios santísimo!–
No puede ser...–
¿Quién ha hecho está atrozidad?–
¡Jesús bendito!–

Exclamaban los feligreses con terror y sorpresa