Un novio para Hyunjin (hyunmin)

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Estába inseguro de ir a casa de Seungmin, sabía que estaba solo, su madre trabajaba hasta las 8 de la noche pero, no sabía cómo reaccionaría, después de la carta de ayer su mente y su corazón le decían que fuera ahora mismo a recuperar lo que era suyo, pero su miedo seguía ahí, las inseguridades lo atormentaban, estaba convencido a dejarlas de lado y arriesgarse por primera vez, y lo haría. Salió de su departamento, pasó a la tienda por los dulces favoritos de Seungmin que, inconscientemente sabía que le encantaban ya que era los que siempre le pedía que se los comprara, camino directo con la mente en blanco, se las arreglaría para hablar frente a Seungmin, no dejaría que el miedo lo traicionara.

-¿Estás mejor?.- preguntaron en la otra línea por teléfono.- si hyung pasar tiempo contigo y con Jaeminnie me hizo muy bien.- eso es bueno Seungmin-ah ya sabes que si quieres hablar de eso puedes hacerlo conmigo.- gracias Hyung, pero estoy bien, enserio.- bueno te creo, nos hablamos después tengo que ir a un lugar.- está bien hyung me saluda a Jeongin.- ¿Hey como sabes?.- yo lo sé todo ahora adiós hyung.- dijo finalmente dejando su celular a un lado, cada vez que Seungmin se sentía triste veía un maratón de dramas, era masoquista le gustaba sufrir con historias tristes, aunque que no tan tristes porque al final los protagonistas siempre se quedaban juntos y eran felices, el quería una historia de Dorama.

Estaba por el capítulo en donde la chica iba a aceptar los sentimientos de su enamorado, un chico alto y bastante guapo que traía un enorme ramo de flores, los protagonistas estaban por besarse cuando el timbre de su puerta fue tocada, estaba dispuesto a ignorarlo porque iba en la mejor parte pero la insistencia del otro lado de su puerta era mucha, se preguntaba ¿quién podría ser?.

Llevaba alrededor de 20 minutos parado en la puerta de la casa de Seungmin, se sentía muy nervioso, tanto que un nudo se formó en su garganta, dentro estaba el chico que había llegado como un Pequeño ángel a su vida y el lo había herido, finalmente se decidió a tocar el timbre desesperadamente pues tenía miedo de si mismo, de salir corriendo. Se escuchó como abrían la puerta, aunque fueron solo segundos lo vió, ahí están el pequeño ángel, su pequeña molestia, justo como lo recordaba, tenía la ropa algo sucia de al parecer helado de chocolate, estaba en pijama y parecía sorprendido. Seungmin al ver de quién se trataba entro en pánico e intento cerrar la puerta rápidamente pero en un rápido movimiento Hyunjin logro meter un pie a la casa ocasionando que quedara entre la puerta, sintió dolor y exagero un poco, solo para que Seungmin lo dejase entrar.

- ¡¡ahhhh Mi pie!!.- gritó Hyunjin, tirado en el suelo sosteniendo su pie.
- lo siento no pensé que cerré la puerta tan fuerte, déjame ayudarte.- dijo Seungmin intentando levantarlo para llevarlo al sofá.
- ¿Estás bien?, ¿Te duele mucho?.- preguntó sentándose a su lado.
Hyunjin aprovecho el acercamiento y rápidamente atrapó al chico en un abrazo, lentamente sus ojos fueron soltando las lágrimas que había retenido, había extrañado mucho a Seungmin.
- ¿Estás llorando? ¿Te dolió mucho?¿Quieres que te lleve al doctor?Respóndeme Hyunjin.- preguntaba Seungmin desesperado cuando lo sintió llorar.
- Tu eres mi medicina.
- ¿Qué?.
- perdoname, no debí gritarte aquella vez, perdoname por no ponerte suficiente atención, y perdoname por no haber sido un buen novio pero, tenía miedo, siempre he vivido con miedos sobre todo si de una relación se trata, me daba miedo que todo saliera mal, y lo arruine, por mi culpa y mis traumas del pasado  te lastimé cuando tú solo eras un ángel demasiado hermoso para mí .- dijo Hyunjin aún aferrado al chico.
- Hyunjin, mírame.- hablo Seungmin, tomando el rostro de Hyunjin entre sus manos limpiando sus lágrimas.- no llores más porque si no llorare contigo, pero debiste hablarme de esto antes se que aveces soy muy intenso y quizá llegué a hostigarte pero no te guardes cosas así porque te hacen daño, no te preocupes ya quedó todo en el pasado, aveces no puedo hacer tanto con mi torpeza pero gracias por venir hoy y disculparte, eso demuestra que eres mucho más que el chico amargado que dicen que eres, ahora ven y abrázame.- dijo Seungmin extendiendo sus brazos a lo cual Hyunjin correspondió más tranquilo, se quedaron por un rato así, abrazándose reparando poco a poco el corazón de ambos.
- ¿Entonces serás mi novio de nuevo?.
- aún no.
- ¿Porque no?.
- porque quiero una propuesta de dorama.
- ¿Y como es eso?.
- Tienes que averiguarlo por ti mismo.
- ¿Puedo besarte entonces?.
- No, ya te lo dije yo no beso sin compromiso... Pero puedes besar mis mejillas.- dijo Seungmin a lo que Hyunjin no desaprovechó y comenzó a besar repetidas veces las mejillas del chico incluyendo su frente y su pequeña naríz, se quedaron ahí mirando el drama que veía Seungmin hasta que finalmente dieron las 8 de la noche, Hyunjin sabía que su casi suegra estaba por llegar.
- Tengo que irme pero no quiero irme.
- ¿Y quién te dijo que te vayas?.
- tu madre llegará pronto.
- ¿Y?.
- ¿crees que le agrade verme aquí a solas con su hijo?.
- no lo se, hay que averiguarlo, hace unos días me preguntó por ti así que ¿Porque no le damos una sorpresa?.
- está bien me quedaré un rato más.
- muy bien dicho jinnie, por cierto creo que ya llegó.- mencionó Seungmin escuchando como unas llaves sonaban afuera.

- Seungmin cariño traje tu pastel favorito .- hablaba la señora Kim.-  oh Hyunjin hace un tiempo no te veía por aquí, que milagro cariño.
- Hola señora Kim estaba algo ocupado estudiando y trabajando pero le prometo que vendré más seguido.
- Me alegra escuchar eso, creí que habían terminado o algo, mi Seungmin esta semana se veía triste.
- Bueno sinceramente tuvimos una pequeña discusión pero vine a solucionar todo y ya estamos mejor.
- eso es bueno, eres un buen chico, no cualquiera acepta sus errores y busca solucionarlos.
- Gracias señora Kim.
- ¿Te quedas a cenar?.
- Si me invita claro que sí.
- pero claro hijo, esperen aquí mientras veo que preparo.- dijo la mamá de Seungmin caminando hacia la cocina.
- ¿Vez? te dije que te extrañaba.
- créeme que aunque la conocí una sola vez le tome aprecio.
- ¿Y si te quedas?.
- ¿Puedo?
- tendría que preguntarle a mi mamá.
- pues si ella está de acuerdo con gusto.

- la cena estuvo muy buena.- dijo Hyunjin a su casi suegra.
- Gracias, es la comida favorita de mi bebé.
- si omma estuvo muy buena, también el postre que me compraste.- dijo Seungmin con bigotes blancos por el pastel que comía, Hyunjin lo miraba con adoración.- por cierto ¿Hyunjin puede quedarse ? Ya es tarde y no quiero que ande solo por ahí.
- claro, con la condición de que respeten está casa.- dijo la señora, la cara de Hyunjin se volvió completamente roja comprendiendo lo que la señora quiso decir, por su parte Seungmin estaba confundido al no entender a lo que se refería su madre.- ¿Eso es un sí o un no?.
- claro hijo puede quedarse, espero hayas entendido mi punto Hyunjin, mi bebé es muy inocente para esas cosas.
- entiendo señora Kim no se preocupe por eso.
- ¿Que cosa?.- Seungmin seguía confundido.
- nada cariño termina tu postre y vayan a dormir.
- está bien omma.

- Tu duermes en tu cama y yo en el piso.
- No, tu dormirás en mi cama y yo en el piso.
- que no.
- que sí, ¿Y si dormimos  los dos en mi cama?.
- ¿No te molesta?.
- para nada ven aquí que ya tengo sueño.- dijo Seungmin tapándose con las sábanas.
- está bien, pero ¿ Puedo abrazarte?.
- claro.- dijo Min gustoso.
- ¿Puedo darte un besito de buenas noches?.
- si pero en las mejillas.
- como el bebé ordene.- dijo Hyunjin.