De regreso

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Marinette estaba con mirada llena de fastidio, desinfectando sus manos con alcohol mientras llegaba al colegio, con ése molestó cubreboca puesto que no le dejaba respirar bien.

No había nadie en el mundo que odiase más usar un cubreboca que ella, nadie.

La chica levantó su mirada, para encontrarse con su mejor amiga, parada de brazos cruzados, con el obligatorio cubreboca puesto y sus anteojos completamente empapados por su respiración.

-¡Alya! ¿Estás... bien?- pregunto la azabache, acercándose a su amiga.

La morena, levantó la mirada.

-¿Marinette? ¿Eres tu? Me disculpo por no reconocerte, pero ya me aburrí de limpiar mis anteojos.- aclaró la chica, agotada por éso.

Y Marinette sintió pena por su amiga, dándose cuenta de que algunos la pasaban peor que ella.

-¡Je! Alya parece una pervertida.- dijo Alix, llegando y acercándose a sus amigas, con su cubreboca por debajo de su nariz.

Marinette, al ver éso, fruncio el ceño y le hizo una señal para que se lo coloqué bien, cosa que Alix hizo con mala gana.

-¡Lo sé! ¡Ahora mis hermanitas creen que soy una pervertida!- gritó la morena, recordando que sus hermanas menores... y su hermana mayor, la veían como una pervertida, sólo por sus anteojos empapados.

Sabía que sus hermanitas lo hacían para molestar, pero de igual modo le dolía.

-¿Y no lo eres?- pregunto Alix, levantando una ceja.

-Sí, lo soy, pero es molestó que me lo digan.- respondió Alya, quitándose sus anteojos para limpiarlos.

Alix, volvió a mirar a Marinette quien veía a su mejor amiga con lástima.

-Por cierto, no creí que vendrías tan tranquilamente al colegio ya que en clases online hiciste tantas Marinette.- dijo la patinadora.

-¡No digas tantas Marinette! Sólo... sólo dilo normalmente, que hice muchas cosas vergonzosas.- dijo la azabache, apenada.

En su historial en clases online, hizo cosas como dejar encendida la cámara mientras se cortaba las uñas de los pies... con los dientes, se largaba una flatulencia y no soportaba el aroma, teniendo que abrir la ventana, tirar perfume y al final salir de su habitación por la peste, decía en voz alta que se aburría y una vez por distraída casi se cambia de ropa pero la maestra y todas sus amigas le gritaron al mismo tiempo para que recuerde que estaba en clases online y tenía la cámara activa, mientras los chicos se quejaban, chicos con los que no hablaría por ser unos cerdos... y esas fueron las cosas menos vergonzosas que hizo.

-No me lo recuerdes, al menos con esto puesto, cubro un poco mi vergüenza.- dijo la chica, señalando el cubreboca.

Alya, levantó la mirada y vio como Adrien y Nino iban llegando.

Sí no se equivocaba, sólo serían 8 alumnos por curso, para mantener la distancia.

-Oigan, no sería raro sí alguien no es capaz de distinguir a los demás por el cubreboca.- dijo la morena, divertida al imaginar ésa situación.

Marinette, dio un suspiro agotada.

-Por favor, Alya, no digas tonterías, ¿qué clase de idiota no reconocería a los demás por sólo usar un cubreboca?
Todos nos conocemos bien, así que sería algo muy tonto de imaginar.- dijo la ojiazul.

Los dos chicos se acercaron a ellas, encontrándose Alya con Nino que tenía sus lentes empapados como ella.

-Otro pervertido.- dijo Alix.

-¡Ey!- dijo Nino, enojado, mirando al lado opuesto de Alix.

No sabía quien dijo éso, pero se las pagaría.

-Hola Alix, hola Alya.- saludo Adrien, alegré por regresar al colegio y salir de su casa.

Las dos chicas le devolvieron el saludo mientras Marinette lo veía con confusión.

Bien que era algo bajita, pero era más alta que Alix, así que Adrien la podía ver, ¿verdad?

-Hola... Adrien.- saludo la azabache, teniendo iniciativa.

El mencionado la miró con sorpresa por unos segundos y luego saludo con su mano.

-Hola, ¿eres una nueva estudiante?- pregunto el rubio.

Marinette quedó hecha de piedra por el shock al oír éso mientras Alya negaba con la cabeza y Alix se aguantaba la risa.

Y así, los mejores amigos se vuelven a encontrar y Adrien cree tener una nueva compañera de clases que muy posiblemente sea una fan ya que lo conoce.

Continuará...
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¡Hola

... tengo un problema con escribir nuevas historias, lo sé, y todavía queda una.

Espero que les haya gustado el capítulo.

Gracias por su tiempo m

Volveré...