Prólogo

15 2 1
                                    


-Dime llorón, ¿Te sigue gustando Isabella?

-¿¡EH!? ¿A qué viene esa respuesta tan fuera de contexto? oye, ¡NO SOY UN LLORON!- Le dije a Thomas con todo pulmón y sin contener ninguna emoción, como siempre actuó ante su presencia cuando estamos solos.

- je,je,je. Lo siento. ¡OhVamos! Se como la miras en clases. Se como siempre te colocas al lado derecho de la ventana del auto cuando vamos a ir al colegio para verla salir de su casa. Sé que le dejaste una rosa en su casillero el día de los enamorados.

-E-E- ¡ESPERA! ¿¡TU COMO SABES LO DELA ROSA!?

¿Qué es esto? ¿Otra pesadilla acaso? Lo que menciono Thomas me puso nervioso, creo que él se burlo de lo rojo y nervioso que estaba. No podía comprender como supo lo de la rosa, si prácticamente no le coloque remitente. Así nadie sabría que fui yo, ni siquiera Isabella…

-Soy tu mejor amigo tonto. Lo sé todo, je,je,je. Así que dime, ¿Todavía te gusta?

-¡NO! Es una niña fresa que solo piensa en ella misma. Además, ella ni si quiera me toma en cuenta.

- Aun así le regalaste una rosa, ¿Por qué?

- ¡ESO NO IMPORTA THOMAS, TERMINEMOS NUESTRA TAREA!

-Hmmmm, que te parece esto, esta noche va a haber una fiesta en la casa de Airon. Todos estamos invitados, ¿Irías conmigo?

-¿Por qué haría eso? Ellos no me quieren ahí.

-No. Pero quizás Isabella este ahí. Además, dentro de poco nos vamos a graduar y jamás has ido conmigo a una fiesta, así que ven a esta conmigo ¿Si?
-*Suspiro* Esta bien. Solo si terminas tu tarea. –Prácticamente toda mi personalidad rechaza el contacto físico con las demás personas, y más cuando son de nuestro colegio, y se bien que Thomas me invitaba por una buena acción. Al final termine aceptando.

-¡Ja! ¡La terminare antes que tu, ya verás!

-¡Es un reto entonces!

El día se paso rápido mientras Thomas y yo hacíamos nuestra tarea juntos como hacemos usualmente. Usualmente la hacemos escuchando música, el día de hoy escuchábamos Green Day. Mis favoritos, aunque Thomas es mas de raperos como Snoop Dog y así, pero ambos respetamos nuestro gusto en música.

-Eh chicos, ¿Quieren unos refrigerios?

-¡OH, claro que si Mamá!- Dijo Thomas dirigiéndose a su madre. La señora Hayle.

-¡Vale. Voy con jugo y galletas en camino! -Dijo la Señora Hayle desde la cocina.

-Tu madre es un pan de Dios.-Le dije a Thomas.

-Sí. Oye, ya que vamos a terminar ¿Quieres jugar COD un rato en la play?

-Pensé que nunca lo dirías.
Al terminar finalmente la tarea de la semana Thomas enciende la PlayStation 3 para abrir el COD, y  llega su madre con el refrigerio.

-Díganme mis tesoros ¿Ya terminaron con la tarea? – Dijo su madre mientras colocaba el jugo y las galletas en el mesón.

-Si Mamá.-Dijo Thomas sin despegar su mirada de la pantalla.

-Thomas, mírame a los ojos cuando te hable. –Dijo su madre con un leve tono de enojo.

-Si Señora Hayle. Ya culminamos con todas nuestras tareas, y gracias por el jugo y las galletas.- Le conteste estando de pie y no en el suelo junto a Thomas colocando mi mano sobre su hombre y una sonrisa para apaciguar su ira y no nos quitara el juego.

-Gracias a ti cariño, por aguantar a mi hijo. Eres libre de servirte cuanto desees.-Dijo la Señora Hayle con gran amabilidad y una cálida sonrisa y que enamoraría a cualquier hombre.
Al irse la Señora Hayle tomo un poco de jugo y como un par de galletas para así unirme a la campaña del juego junto a Thomas.

Inseparables (ESCRIBIENDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora