Capítulo 1

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Despertar

(Ah~ que pasó?)

Un techo blanco, paredes de colores apagados y un pequeño armario en la esquina del cuarto, con solo ver eso sabía que no estaba en mi hogar. Me levante y mi balance falló haciendo que viera todo borroso, por instinto busque unas gafas en el escritorio hallando unas gafas gruesas de color negro, que encajaban con mi cabeza.

(Porque me siento tan pesado, comí demasiado?) pasé mis ojos por mis manos, las callosidades que había trabajado ya no estaban ahí, mis manos parecían hinchadas pero no era una reacción alérgica era una nueva cantidad de grasa en mis brazos.

Al notar esto solo pude entrar en pánico pensando en la situación posible de que toda mi vida haya sido un sueño.

Mi primera reacción fue buscar un espejo, sentía que de alguna forma verme al espejo cambiaría mi situación, sabía conscientemente que este no era mi cuerpo pero no podía creerlo.

Gracias a mi necesidad de espejo me arme de valor y abrí la puerta a lo demás de la casa, en el camino pude notar por la estructura que es una casa de un piso con dos baños y dos  habitaciones, pero en ninguno de estos lugares había espejo ni siquiera en el baño.

Suspiré haciéndome recordar ciertas cosas, en mi cabeza comenzó a pasar recuerdos que no eran míos, se sentía una sensación horrorosa como recordar todos los momentos incómodos y dolorosos que había vivido este cuerpo, por el conjunto de sentimientos y experiencias quise vomitar, todo ese golpe de información me había mareado, caí de rodilla tocando mi cabeza mientras la información fluía.

(¡¿Puede ser que pusieron mi cerebro junto al cuerpo de una chica para hacer experimentos?!) porque sí, en mis genitales no sentía el bulto familiar, sentía algo diferente por lo que con solo un vistazo pude saber la diferencia, la verdad sentí vacío además de una sensación de perdida, aunque después de unos momento de pensar pude sentir mayor comodidad de esta situación, dolía en mi ego ahora ya no tan masculino que me sentía más cómodo con esto, sentía mas libertad al mover las piernas, de cierta forma ya no tenía que preocuparme por ciertos ideales, aunque ahora estoy seguro que se me impondrán otros.

Busqué en mis nuevos recuerdos la situación actual, podía ver el sufrimiento de esta chica, podía escuchar claramente los insultos que le enviaban despectivamente por su cuerpo, su peso y por erróneamente enamorarse de una persona horrible, la verdad sentí pena y al mismo tiempo tristeza, era como yo sentir lo que ella sintió, no noté que había comenzado a llorar, seque rápidamente mi rostro y entré al baño más cercano, necesitaba alguna forma de distraerme.

Bañarme no fue de las mejores ideas que tuve, fue simplemente estresante, debía de lavar por debajo de mis senos y todo mi cuerpo con más cuidado para asegurarme de estar limpio, opte por lavar mi pelo que estaba muy sucio, con un poco de crema me peiné y me puse un conjunto de ropa sencilla para el hogar.

Algo que había notado es que mi libido había disminuido de forma radical, era algo extraño pero bueno (Ya no tengo que sufrir vergüenzas) que tu amigo se levante de forma brusca porque le daba la gana no eran buenas experiencias así que estaba a gusto por esto, tal vez era mi mente intentando encontrar ventajas de ser mujer para no volverme loco pero de cierta forma funcionaba.

Noté un celular encima de la mesita lo tomé buscando la cámara, no pasó mucho para que pudiera ver mi nueva apariencia, se podía ver un pelo totalmente negro junto a ojos ámbar que casi no se notan por la falta de luz.

“Debería de hacer ejercicio, no pienso verme así toda mi nueva vida” prendí la TV y me puse a ver las noticias, ya que buscaba alguna forma de manejar mis pensamientos…

Reencarnado En MarvelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora