Little things (Ironstrange)

Little things

-¡Stark!-

Un angustiado hechicero grita desde la entrada del laboratorio en el que trabajaban Bruce Banner y Tony Stark; este último pegó un brinco al oír su apellido de esa gruesa voz, tirando algunos químicos en la mesa, provocando una pequeña explosión. El mecánico cayó de su silla por la sorpresa sacando una leve risa en los otros dos hombres.

-¡¿Qué diablos quieres, Strange?!

-Ya, no te enojes. Rogers convoco una reunión de emergencia. -el azabache se acerca y le extiende la mano. El otro la toma, pero en lugar de impulsarse para poder levantarse, solo se queda ahí, disfrutando del tacto. Stephen no se movió tampoco, se dejo llevar por el momento en el que las dos manos se llenaban de electricidad por el suave toque. Por un momento se transportan hechizados por la perfección de aquel imperfecto toque, que al parecer pasó de ser casual a romántico en segundos.

"Tu mano encaja en la mía, cómo si estuviera hecha solo para mí. 

Pero hay que tener en cuenta que estaba destinado a ser así."

-¡Tony!- el Doctor Banner los saca de la burbuja en la que estaban sumergidos- El Cap nos necesita-

-Ah sí, vamos- dice levantándose con ayuda de la mano ex cirujano, pero cuando estuvo arriba sintió un apretón de parte de Stephen, quien veía a todos lados menos al multimillonario. En respuesta, Tony comenzó a caminar, sin soltar en ningún momento al azabache, o al menos no hasta que llegaron con el resto de equipo.

(...)

-¿La puedo publicar?

Un hechicero se encontraba mirando la foto que el joven Peter Parker acababa de tomar, en ella aparecían los dos sonriendo y haciendo gestos. Sinceramente le había gustado bastante la imagen y no tuvo ningún problema con que el adolescente la guardase, sin embargo la pregunta que le fue lanzada después le hizo pensar, provocando que el hechicero buscara cada detalle que, según él, lo hacían ver mal.

"Sé que nunca has amado las arrugas de tus ojos cuando sonríes."

-Me veo viejo.

-Claro que no- le responde el adolescente en un intento de convencerlo.- Ni siquiera se le notan los años, ¿cuantos tiene? ¿20?

- Y parece que estoy algo gordo.

-Señor Strange, usted está en perfecto peso.Además por su altura se ve aún más flaco.

-Tienes razón, parezco un cepillo de dientes desgastado.

-Eso no fue lo que quise decir.- murmura el chico algo apenado.

-Mi cara esta estirada y me veo muy pálido- afirma con una certeza tan innegable que cualquiera que no lo conociera le hubiese creído.

-Si no quiere no la publico y ya-

-¿Qué van a publicar?- pregunto un hombre de ojos avellana que llegaba a la cocina después de una larga ducha.

-Una foto que me tomé con el señor Strange- dice emocionado enseñándole aquel retrato en la pantalla de su celular a su tutor.

-Es linda- sonríe con la adorable escena representada  por dos de sus personas favoritas en el mundo.-¿mándamela  quieres?- le susurra a Peter procurando que el otro no lo escuche y piense que es un acosador o algo del estilo.