El nuevo gato de Unohana

Capitulo 4

El día siguiente....

Ichigo se estaba enfriando en el bolsillo del Capitán Unohana, sintiéndose bastante cómodo mientras el capitán lo llevaba por los pasillos. Se sentía un poco preocupado por su actual cuidador en este momento. "No tengo idea de cómo se va a sentir cuando se entera de que ha estado haciendo todas esas cosas justo en frente de mí después de dar marcha atrás a la normalidad. Estoy más aterrorizado de que ella me desgarre miembro por miembro o me haga cosas que asustarían a Kenpachi...'.

Las reflexiones del gatito se interrumpieron cuando el capitán Unohana se detuvo y miró hacia arriba. "Habla del diablo...". Sus ojos se agrandaron cuando vio a Kenpachi parado frente a los dos. '¡Mierda! ¡Es incluso más grande que antes!'

Ichigo vio como los dos capitanes se miraban en silencio y tenía una extraña sensación recorriendo su pelaje, casi como si pudiera sentir la intensa animosidad entre ellos. Le hizo esconder la cabeza en su bolsillo por miedo. '¡Guau! ¿Kenpachi era así de aterrador cuando estaba peleando conmigo?'

El silencio era tan tenso que Ichigo pensó que podía masticarlo con los dientes. Afortunadamente, la situación incómoda se rompió cuando Yachiru asomó la cabeza por detrás del hombro de Kenpachi. Vio a cierto gatito escondido en el bolsillo de Unohana y su rostro se iluminó como si fuera su cumpleaños 10. "¡GATO!" Ambos capitanes terminaron su mirada mutua por la timidez de la hija de Kenpachi hacia la nueva mascota de Unohana. Aunque Ichigo protestó, Unohana se agachó, sacó al gatito de su bolsillo y se arrodilló.

"¿Puedo acariciarlo, Capitán? ¿Puedo? ¿Puedo?" Yachiru preguntó con ojos suplicantes.

Unohana se rió entre dientes. "Por supuesto que puedes, Yachiru. Solo sé amable con el pequeño Ichigo."

"¡Hurra!"

Ichigo sintió sus pequeñas manos subir y bajar por su espalda y ronroneó por reflejo. Entregándolo, Yachiru sostuvo a Ichigo cerca de su pecho, sus torpes manos pasaron sus dedos detrás de sus orejas. A Ichigo le dolía un poco la forma en que Yachiru lo acariciaba con demasiada fuerza, pero lo soportó. No tenía ninguna duda de que si mordía a Yachiru, incluso por reflejo, terminaría cubriendo el parche de Kenpachi.

"¿Puedo jugar con pequeño Ichi hoy, Capitán Unohana? ¡Prometo que seré amable con él!"

Unohana sonrió. Esto fue realmente útil para ella porque le ahorró la molestia de encontrar a Yoruichi para ver si podía cuidarlo nuevamente. "Por supuesto que puedes. ¿Prometes traerlo de regreso esta tarde?" Yachiru asintió felizmente. Unohana miró hacia arriba y vio a Kenpachi asentir con aprobación.

Ichigo dio un maullido de protesta cuando Yachiru se lo llevó. '¡Ayuda! ¡Me han secuestrado!'

Más tarde ese día....

'Lo juro, si vivo para ver el mañana, nunca dejaré que Kon vuelva a sufrir a manos de Yuzu. ¡Diablos, le daré una revista sucia para empezar!'

Ichigo estaba sentado en medio de la habitación de Yachiru, con un vestido rosa de muñeca y una tiara de juguete en su pequeña cabeza. Actualmente estaba "disfrutando" del placer de tener una fiesta de té con Yachiru. A su alrededor en una pequeña mesa en el medio de la habitación de Yachiru había montones de animales de peluche. En el centro de la mesa había una tetera y varias tazas diminutas.

Si bien Ichigo no era ajeno a las fiestas de té, con sus hermanas menores, especialmente Yuzu, haciéndolo y todo, esta era la primera vez que se había visto obligado a hacerlo mientras usaba un atuendo ridículo y tuvo que soportar el té SUPER dulce de Yachiru. 'Dios mío, Yachiru, ¿acabas de echar una libra de azúcar en la olla y agregaste agua?'

Al ver algo detrás de la chica, Ichigo miró más allá de ella por la ventana y vio a cierto gato negro mirándolos desde un tejado más allá. Si bien Ichigo no tenía una visión nítida en su forma actual, tenía la clara impresión de que Yoruichi se estaba riendo de él....

'Lo juro, si vivo para ver la próxima semana, ¡Le afeitaré cada centímetro de pelo!'

Lamentablemente, primero tendría que soportar su fiesta del té. Se encogió cuando Yachiru puso una taza de té ultradulce frente a él. "¿Más té, Princesa Ichi?" Mientras Ichigo bebía a regañadientes el brebaje, deseó no haber tomado ese libro por enésima vez....

Más tarde esa noche...

Ichigo exhaló un suspiro de alivio cuando Yachiru lo llevó de regreso al Escuadrón 4. Durante todo el camino, la pequeña niña rascó las orejas de Ichigo, riendo mientras el pequeño Ichigo ronroneaba. Encontró a la capitana Unohana en una de las salas médicas del escuadrón haciendo sus rondas. "¡Capitán Unohana! ¡Traje al Pequeño Ichi!" Unohana sonrió cuando el diminuto teniente le entregó el gatito.

"Gracias, teniente Kusajishi. Espero que el pequeño Ichigo no le haya causado ningún problema."

"¡No! ¡Nos divertimos mucho!" Yachiru le dio una palmada a Ichigo en la cabeza antes de salir por la puerta. "¡Adiós, pequeño Ichi!"

Unohana se despidió de la chica antes de regresar a su habitación para pasar la noche. "Jeje," se rió Unohana mientras cargaba al pequeño Ichigo en sus brazos. "¿Te divertiste con Yachiru, Pequeño Ichigo?" preguntó mientras rascaba a Ichigo detrás de las orejas.

"Sí, eso fue tan divertido como luchar contra Kenpachi..."

Al entrar en su habitación, Unohana dejó a Ichigo en su almohada como de costumbre y se movió para desvestirse para ir a la cama. Sin embargo, la detuvieron cuando escuchó un golpe en la puerta. Poniéndose un camisón, Unohana abrió la puerta y vio a Isane de pie frente a ella. Ichigo vio que la chica tenía una mirada asustada y su camisón estaba cubierto de sudor.

"Um... ¿Capitán? ¿Puedo pasar la noche con usted?" preguntó el teniente tímidamente.

Unohana sonrió a su ayudante y la llevó a la cama de la mano. "Por supuesto, Isane. ¿Tuviste otra pesadilla?" preguntó mientras se sentaba con Isane.

"Um... sí... pensé que estaba a punto de ser devorado por fresas asesinas...". Isane tenía la cara hacia abajo para tratar de evitar mostrar su rostro avergonzado. Ichigo, quien también tenía sueños extraños, no se rió como lo haría la mayoría de la gente. Unohana, que estaba acostumbrada a los terrores nocturnos de sus lugartenientes, tampoco se rió.

"Está bien, Isane, no estás en peligro aquí." Acarició la cabeza de Ichigo y sonrió. "Estoy seguro de que el pequeño Ichigo nos protegerá a los dos". Decidiendo ayudar a la pobre chica, Ichigo se levantó de la almohada y saltó al regazo de Isane, acurrucándose en el teniente. Isane se rió de la suavidad del pelaje de Ichigo y lo rascó detrás de las orejas en agradecimiento.

"¿Ves? Es un pequeño guardián." Unohana apartó a Ichigo de Isane y desató el lazo del camisón de Isane. "Aquí, Isane, vamos a sacarte esa ropa mojada. Vas a coger un resfriado." Los ojos de Ichigo se agrandaron cuando Unohana le quitó la prenda a Isane, exponiendo su hermoso cuerpo sudoroso ante él. Para ayudarla a sentirse cómoda, Unohana se quitó el camisón, revelando su cuerpo maduro a los dos. A pesar de que estaba acostumbrada a este tipo de tratamiento erótico, Isane todavía se sonrojó al mirar el hermoso y bien formado cuerpo de su capitán. Ichigo fue recogido por Unohana, quien lo colocó sobre su almohada antes de acercar a Isane. Ichigo yacía junto a ellos mientras Unohana ponía la cabeza de Isane en su pecho, pasando una mano por su cabello plateado mientras arrullaba a su teniente para que se durmiera.

Continuará...