PERFECT10 -JohnTen

Capítulo 8: Perfecto

El pequeño tailandés se encontraba fuera del complejo de departamentos en el que vivía, esperando a que Johnny llegase a recogerlo. Miró hacia arriba, contemplando el cielo nublado, parecía que iba a llover o incluso nevar por el frío que hacía; menos mal la sesión de hoy sería en la casa de Johnny porque a este punto apenas sentía sus mejillas y manos y eso que no llevaba mucho tiempo afuera.

A pesar de eso, nada le quitaba la emoción que sentía ahora, provocada precisamente porque iría por primera vez a la casa del mayor. Ten quería conocer más de él, se había dado cuenta de que había realmente muy poco que sabía de Johnny y esperaba hoy tener la oportunidad de descubrir más cosas de su vida. Dicen que la casa de una persona puede contar muchas cosas de ella y Ten quería ver que tanto podría descubrir del mayor al verla.

Era curioso que, a pesar de la forma descontrolada en que latía su corazón cada vez que veía a Johnny y la forma en la que su cuerpo se estremecía cuando lo tenía cerca, deseaba con toda su alma verlo, especialmente en un ambiente distinto del trabajo que era cuando más cercano a él se sentía.

Su pulso se aceleró rápidamente al ver el auto aparecer frente suyo.

"¿Puedo llevarte a algún lado, belleza?" le dijo Johnny asomándose por su ventana abierta, con una expresión exageradamente coqueta en su rostro.

"Tú puedes llevarme al paraíso si quieres" pensó Ten, descartando la vergonzosa frase inmediatamente y limitándose a reír en respuesta. Caminó hasta el asiento del copiloto y se sentó junto a Johnny, lo saludó apropiadamente y el chico condujo esta vez a la casa de Taeyong para ir a buscarlo y luego conducir a su propia vivienda.

Cuando llegaron a su destino final, Johnny se estacionó y todos bajaron del auto. Ten miró con asombro la residencia del fotógrafo que tenía una apariencia minimalista y moderna, justo como se la había imaginado. Al entrar al lugar, lo primero que Ten sintió fue un agradable aroma en el aire, era el mismo que el auto del mayor tenía, ese olor le gritaba "Johnny" por todas partes, era tan dulce y sutil, pero a la a vez tan masculino, tan suyo.

Avanzaron por el pasillo principal y llegaron al salón que había sido desmantelado por completo, todo el mobiliario se encontraba desparramado deliberadamente por la sala de estar y la cocina, a excepción de un largo sofá de color gris que estaba posicionado justo frente al gran ventanal que daba al patio. Vio cuadros de todos los tamaños apoyados sobre algunos muebles y sillones e identificó inmediatamente alguno de ellos como trabajos del fotógrafo y unas cuantas fotos familiares.

"¿No se te ocurrió una manera más desordenada de desocupar el salón?" preguntó Taeyong sarcásticamente, mirando el descuidado lugar.

Johnny le lanzó una mirada "¡Tuve que moverlos solo, no pude hacer mucho! Además, es solo por un rato, no importa tanto" le respondió el chico.

"Están hasta en la cocina y sé que no los vas a mover hasta mañana ¿Cómo piensas cocinar después, ¿eh?" exclamó de vuelta Taeyong.

Ten rio suavemente detrás de ellos por la trivial discusión que estaban teniendo. Cómo se notaba que se conocían hace años y, la verdad, se sentía un poco celoso de Taeyong porque había tenido la oportunidad de estar con Johnny por tanto tiempo.

Los otros dos hombres se giraron al escucharlo "¿Te parece gracioso?" dijo Johnny intentando parecer enojado, pero no pudo contenerse de reír junto con él mientras Ten le respondía con un tierno "sí" de vuelta.

Dejando las bromas a un lado, se pusieron manos a la obra, y lo primero que hicieron fue cerrar todas las ventanas y encender el calefactor para disminuir el terrible frío que había en la habitación y así evitar resfriados indeseados. Johnny ubicó el trípode mientras Taeyong se encargaba de la iluminación y Ten iba a cambiarse al baño (Johnny le ofreció su habitación, pero no se atrevió a entrar así que terminó yendo al baño) aunque lo único que tenía que hacer era desnudarse de la cintura hacia arriba porque la primera parte de la sesión sería así.