Lee min-ho, el jefe de la pandilla más grande y temida de Estados Unidos.
Kim sohyun, una japonesa dispuesta a cumplir todos sus sueños llegando a USA.
¿cómo podrían estos dos tener algún tipo de relación?
minho: CHANGBIN!!! - corrió donde este, disparando al asesino de su amigo justo en el corazón, mientras llegaba con lágrimas a su lado y cogia su cuerpo agonizando
seo: lee.. yo. yo qu... quiero - salía sangre de su boca
lee: solo calla, no trates de hacer fuerza ahora - sus lágrimas caían sobre la cara de su amigo
yo mientras, estaba tirada a un lado de la escena, en un estado de shock por no poder alanizar la situación lo suficientemente rápido
seo: te... quiero.... - dijo para después relajar todo su cuerpo e irse de este mundo
aún en una esquina, veía como minho lloraba y maldecia desesperadamente, con el cuerpo sin vida de su amigo al lado lamentaba no haber disparado antes a aquel hombre
xxx: así que tienes sentimientos? - por favor que esto se acabe ya - eres una bestia, llorar por un amigo no es muy demoníaco de tu parte
lee: ya veras estúpido - ambos comenzaron a golpearse
yo sin poder decir una palabra aún, vi todo lo que pasaba, de un momento a otro el hombre quedó encima de minho, comenzó a golpearlo sin piedad mientras toda su cara sangraba, aquel chico de solo 18 años se burlaba mientras estaban a punto de matarlo a golpes. Al escuchar su risa algo dentro de mí se activó, una risa contagiosa pero peculiar que nadie posee
me levanté como pude y cogi una de las botellas de cerveza vacía que estaban en la calle, tomé impulso y la rebente en su cabeza causando su desmayo
me quede viendo la escena mientras minho se quitaba a ese hombre de encima y comenzaba a hablarme, nada de esto tiene sentido, nada debió haber pasado, cuentas vidas se perdieron y en vano, esas preguntas rodeaban mi cabeza una y otra vez, pero sin pensarlo le extendí una mano a minho
- no puede ser estas bien? - trate de limpiar un poco su sangre
lee: estaré bien, que hay de ti? - puso su mirada en mis rodillas ensangrentadas
- no es nada, lo siento mucho, nada de esto hubiera pasado si changbin no me hubiera defendido, lo siento de verdad - ahora era yo quien lloraba
lee: vaya chica - rio un poco - porque me ayudaste?, pude perfectamente ser el malo de la situación
- no lo se, algo en mi dice que no lo eres - lo mire unos segundos y note como un brillo emergía de sus ojos
xxx: ahí están, corre a buscarlos - dos hombres corrían hacia nosotros
lee: pase lo que pase, no me sueltes - antes de que reaccionara ya estábamos corriendo de nuevo, sostenía mi mano con una fuerza extraordinaria, sentía que se la llevaría si no estuviera unida a mi cuerpo
pasamos por una cantidad excesiva de calles, barrios y callejones para perderlos de vista y que no nos siguieran, después de aproximadamente 5 minutos de que dejaran de seguirnos minho me llevó a un lugar que parecía ser su sala de reuniones
lee: se que no es lo mejor, pero al menos estamos seguros - dijo sentándose en el sofá
- claro, tienes botiquín? - pregunté al recordar las heridas
lee: en el baño, a mano izquierda encima de los tanques - dijo sin siquiera mirarme
me dirigí donde me dijo, busque bien y pille un pequeño maletin con todo lo necesario
- bien, sientate bien para curar tus heridas - dije sentandome a su lado
lee: que crees que haces niña - está claramente molesto
- primero que nada tenemos la misma edad, y segundo salvaste mi vida, dejame curarte al menos - le respondí un poco tímida
pude notar como se relajó ante mi comentario e intentó no mirarme a la cara, comenze poniendo un poco de alcohol en un algodón y lo puse sobre sus heridas repetidas veces mientras el solo se quejaba
- ey, se que no es el momento más indicado, pero sabes, yo estaba trabajando con mi tía.... -
lee: se fue con felix, no te preocupes
- pues yo no conozco a ese felix -
lee: es de confiar, te lo digo yo, es el jefe de los australianos
- creí que el único jefe eras tú - ahora estoy confundida
lee: existen gerarquias niña, así como felix hay más líderes en la pandilla, pero yo soy el jefe de todos
- pues muy grandioso, pero podrías llevarme con mi tía? -
lee: imposible, ahora saben quien eres, si sales de aqui te harán daño, mucho daño..
iba a responder cuando la puerta se abre dejando ver a mi tía acompañada de muchos de esos hombres
lee: señora chae, ven con tu sobrina - le ordenó que se sentara a mi lado - lamento meterlas en esta situación pero ahora son parte, saben sus nombres y probablemente ya todo de ustedes, si se van de aquí morirán, no busco ser simpático, son parte o no?
nos miramos con mi tía por unos segundos, y luego respondimos al mismo tiempo
- estamos dentro -
que puedo perder, no tengo nada ahí fuera de todos modos
lee: bien necesitan presentarse, soy lee minho o pueden decirme minho, aquel pecoso que trajo a tu tía, es Félix, líder de los australianos
felix: hey - dijo con una voz de demonio que ni el mismo lucifer tiene, abrí los ojos como platos al escucharlo hablar y este solo río
lee: calmate niña, ese pelinegro que ves allá, es el líder de los chinos, es japonés al igual que tú
xxx: que onda peque, me llamo han jisung, puedes decirme han
- hola a todos - dije no muy convencida
lee: el resto llegará luego, aun así los más importantes ya los conocen así que pueden estar en paz, ahora déjenme un rato a solas
todos salieron de la habitación menos el japonés y nosotras
han: hermano, es cierto lo de changbin?
lee: así es, prepara algo decente para el, como lo merece
han: como diga jefe
chae: podemos ayudar en algo?
lee: solo salgan de aquí - se sentó dándonos la espalda
hicimos caso a sus palabras sin objeción pues es el jefe por algo, salimos a una pequeña terraza en donde estaba el líder de los australianos con otro chico hablando animadamente
felix: chae, sohyun vengan acá, el es bangchan, mi mano derecha....
el chico bastante bien parecido que estaba su lado nos saludo y correspondimos correctamente....
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