capítulo 18

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—corbyn tranquilízate, se que quieres saber qué es. Pero tranquilízate un poco— dije acariciando su mano nerviosa.

Y si, estábamos en el medico. Ya a pasado dos meses más desde el embarazo y ya llevaba seis meses. Y hoy me decían el sexo del niño.

Estaba Corbyn más nervioso que yo, tenía muchos nervios de saber si era niño o niña. El quería que fuese niño y yo quería que fuese niña. Ya teníamos hasta los nombre pensados.

Si era niña, Ashley y si era niño, Michael. Nombre comunes y muy bonitos. Al fin y al cabo vamos a tener un bebe y no me importaba si iba a ser niño o si iba a ser niña. Yo solo quería vivir feliz con las personas que más amo.

—¿Familia Besson?— dijo la doctora saliendo de su consulta.

—¿Besson?—dije en el oído de Corbyn confundida.

—si, lo puse yo. Quiero que seamos de la familia besson—dijo con cara victoriosa.

Cuando entramos a la consulta nos sentamos en las sillas. Ya me habían hecho la radiografía para saber si era niño o niña y ahora me iban a decir que era. Estaba sujetada de la mano de Corbyn esperando la enorme noticia.

—antes de decirles, ¿Cómo va el bebé?— dijo sonriendo a lo que me puse nerviosa.

—em, bien. No me ha dado nada malo de momento— digo mirando a Corbyn nerviosa y el asintió varias veces. Estábamos demasiado nerviosos.

—veo que estáis nerviosos de saberlo, pues vamos a ver qué es— dijo abriendo los papeles para verlo.

Se llevo unos minutos mirándolos, odio a las personas lentas, necesitan gafas o un turbo para poder leer y encontrarlo rápidamente.

—¿ustedes que creen que será?— dijo a lo que los dos nos miramos sonrientes.

—niño/niña—dijimos los dos a la vez.

—valla, no lo tiene decidido— dijo riendo a lo que yo miré mal a Corbyn y el sin problema me la devolvió.— pues la sorpresa es que es niña— dijo sonriendo.

—¡¡NIÑA!!—dije alegre.

—si, niña. Felicidades familia, van a tener una niña— dijo para después levantarse y abrazarnos.

Cuando salimos del médico lo primero que hice fue saltar de alegría.

—asi que es lo que yo dije corbs— dije con una sonrisa de lado.

—si, pero no por eso me voy a enfadar. A lo contrario me voy a alegrar, tú quieres una niña. Pues hay tienes una niña.—dijo contento para después darme un abrazo mientras andábamos para ir a casa.

Esta vez nos vinimos andando ya que me dijo el médico de que andará y eso hice. Estábamos andando a un paso lento, no teníamos prisa.

—¿le contaste a tus padres lo del bebé?—negué—. Deberías contarles. Hoy por la tarde irás a su casa y le contarás todo, ¿vale?— dijo a lo que asentí no muy convencida.

Mis padres y yo no nos llevábamos tan bien que digamos, desde que me marché de casa junto con mi hermano, los dos se quedaron solos, a ellos no le agradaba la idea de que sus dos únicos hijos se iban a ir lejos de ellos. Que viviríamos una nueva vida lejos de ellos, pero ya era ahora de enseñarles de que queríamos vivir a nuestra manera. Y se lo enseñamos de una manera a la que les cabreo un poco.

Aveces mi madre me llama y hablamos pero ya no tanto, se me olvida por que vivo más pensando en todo los demás que en mi familia.

Cuando ya por fin llegamos a casa me fui a la habitación y me cambié de ropa a algo más cómodo. Cuando abajo me tiro al sofá, me entrego mucho mareo.

𝓡𝓸𝓶𝓪𝓷𝓬𝓮 // 𝘊𝘰𝘳𝘣𝘺𝘯 𝘉𝘦𝘴𝘴𝘰𝘯 // 𝘛𝘦𝘳𝘮𝘪𝘯𝘢𝘥𝘢 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora