Regresando a tus brazos (SUPERBAT)

Capitulo 2

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Constantin junto a zatana revisaron toda la librería, pero no hallaban nada, no tenía sentido, qué podría causar todo esto.

Y como si fuera el destinó, un libro muy viejo y gastado resaltó entre todos, grueso y de un color vino muy viejo, en el centro una figura de una especie de calavera deformada en oro oxidado.

Constantin lo tomo con mucho cuidado, casi temiendo que al solo tacto se decidiera en pedazos

Era un libro que narraba historias de los seres místicos, adas, duendes, hombres lobo, vampiros, etc. El ya lo había leído y casi se lo aprendía de memoria. Pero ahora sentía una necesidad de ojearlo, como si el libro lo invitará a abrir sus hojas; con determinación abrió el libro y una a una fue pasando las hojas, adas, duendes, ciclopes, minotauros, seres del bosque, del agua, sirenas, grifos, trolls, así continuo hasta casi al final donde se encontraban unas hojas en blanco, pero al llegar a ellas no pudo esconder su asombró, el ya había leído ese libro cientos de veces y esas okas siempre estaban en blanco, no deberían estar ahí! El estudio de varias formas esas páginas y nunca mostraron nada!

Zatana noto su desconcierto y se hacerlo lentamente– Constantin, encontraste algo?– no recibió respuesta por lo que se acerco para ver lo que había encontrado.

Era un libro, y por lo que pudo observar uno vastante viejo, en la parte que Constantin veía, al parecer se narraba una historia.

En los principios de los tiempos cuando solo las criaturas y seres mágicos habitaban la tierra, no existía agresión, estás convivían unas con otros de forma pacifica y respetuosa, pero esto cambio con la llegada del hombre, que desprecio a los seres de las sombras y alabo alos que vivían en la Luz. Los seres de luz se volvieron vanidosos ignorando a sus contraparte considerándolos inferiores. Enfadados los seres de las sombras sembraron en su corazón odio y rencor, su enojo los segó causando muerte y tristeza a aquellos que los despreciaron provocando el inicio de la enemistad entre especies y causando guerras, guerras que costaron la vida de muchos seres.
Siglos pasaron y las cosas seguían igual, pero cuando todo parecía perdido un ser único se alzó sobre todos y trajo orden al mundo, con su poder dividió los reinos, reclullendo a los demonios al infierno, los seres de luz fueron enviados a una tierra inaccesible para los demás, quedando los humanos habitando la tierra.
Hubo paz durante siglos, pero el mal siempre existira, traicionado por quienes más confiaba le arrebataron aquello que más amaba condenandolo, pereciendo a sus manos.
En su último momentos y con lo último que le quedaba condenó a sus traidores, augurando les un futuro donde el regresaría, volvería a traer orden y terminaría con aquellos que lo traicionaron.

“Cuando los bandos vuelvan a estar en guerra y la esperanza parezca perdida, volveré y con migo todo lo que debió sér y será”

Termino de recitar Zatana.

Está historia parecía incompleta, partes importantes parecían faltar, siendo un adelanto de una historia más grande y triste.

Volvió su mirada a Constantin, quien también leyó la historia– Constantin, está historia, siento que es lo que está causando todo esto, pero creo que falta algo más, que está incompleta–termino de decir.

–Yo también lo creo Zatana–concordo– pero también siento que está historia la escuché en otra parte– dijo de manera pensativa, necesitaba buscar más información.... Y quién mejor que quien vive en uno de los lugares mencionados– dime querida, que te parece dar un paseo al infierno– termino con una sonrisa algo burlona