El extraño 9 años después

Capitulo 8: La batalla final y la maldición de Shinichi

Gorilath entró en la sala donde se encontraban un decidido Shinichi y una aterrorizada Shiho.

Gorilath- ha sido enternecedor, Kudo

Conan- ¿Gorilath?, supongo

Gorilath- no te equivocas. Y ya que estamos, ¿que te parece ser uno de mis hombres?

Conan- ¿como dices? ¿tu te drogas?

Gorilath- no, no me drogo

Conan- entonces, ¿que te hace pensar que quiero se uno de los tuyos?

Gorilath- esto de aquí, la droga del mal

les muestra un bidón conectado a una especie de apresador, como un extintor

Ai- ¿¡la droga del mal!? ¡imposible!

Conan- ¿la conoces?

Ai- yo no la creé, pero si la supervisé: usamos a un enfermo mental como señuelo y le encerramos en una cambra hermética, le administramos esa droga volatilizada y en cuestión de segundos se volvió loco y hostil. Metimos a un cachorro de gato en la cambra, y el hombre le arrancó la cabeza al gato de un mordisco, pero fue muy salvaje, como si tuviera el impulso de hacerlo, es más, se comió al gato. Durante horas estaba muy hostil y tuvimos que matar al sujeto, el efecto era permanente.

Conan- ya veo... interesante

Ai- ¿¡interesante!? ¿¡has perdido la razón!?

Gorilath- eso es, el veneno te penetra por la piel y te llega hasta el sistema nervioso hasta que todas tus neuronas del paleocórtex, tu zona cerebral que controla los instintos prehistóricos, propia de los reptiles, sea, por decirlo de alguna manera, activada y pierdas el control de tu cuerpo

Inmediatamente, Gorilath aprieta el gatillo de la bombona; impulsivamente, Shinichi, aparta a Shiho, cayendo él mismo sobre los efectos de la droga en cuestión de segundos, empezó a gruñir y a mostrar los dientes, Shinichi perdió el control de sus actos.

Ai- Shinichi, ¿que te ha pasado?

Gorilath- eso es, Kudo, déjate llevar por tus instintos asesinos y ofréceme la cabeza de Sherry como sacrificio

Aún así, Shinichi no respondió, aún le quedaba algo de conciencia, pero le costaba controlar su cuerpo.

Ai- eso es, Shinichi

Gorilath- ¿que quieres decir?

Ai- Gorilath, el Shinichi del que yo me enamoré es un gran detective justiciero (mientras se acercaba a Shinichi y le abrazaba)

A Shinichi, esas palabras le llegaron y le resonaron en la cabeza junto a una hermosa imagen de Shiho bajo a una lluvia de pétalos de cerezo

Ai- el Shinichi del que yo me enamoré es un gran detective justiciero 

Shinichi empezó a recuperar el control, pero aún le quedaba. Su instinto le llevó a agarrar a Shiho de los brazos, cosa que le dolía.

Ai- (pensando) ¿como puedo devolverle a la realidad?

A Ai se le ocurre una idea: un beso en la boca

Gorilath- ¿¡que!?

Shinichi y Shiho parecían tener las mentes conectadas, por que al oír cierta frase, Shinichi recuperó el control total:

Ai- (pensando y con lágrimas, mientras duraba el beso) Shinichi... ¿querrás estar siempre conmigo?

Shinichi recupera el control y él también colabora en el beso, y cuando se separan:

Ai- Shinichi, ¿ya te encuentras mejor?

Conan- Shiho (le abraza apasionadamente) tontorrona, ¿por que has hecho algo tan peligroso?, siempre, siempre estaré contigo 

Gorilath no se lo creía, no sabía que hacer y, de golpe un montón de policías se presentaron en la sala, Shinichi les llamó antes de entrar en la mansión. tenían que traer todos los furgones. Shinichi y Shiho pasaron a testificar y les contaron toda la verdad. Al final, todos estuvieron condenados a cadena perpetua sin posibilidad de condicional.

Pasaron ya 2 meses desde su aventura y estaban ya en Navidad, y...