🍃Capítulo 19🍃

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PoV' s JiMin






Primera vez que sentía a mi cuerpo desfayecer, nada me había pasado comparado a esto: segui el camino de aquel angosto túnel para ver hacia donde me llevaba, tenía miedo, mucho miedo no quería ser encontrado, por que si lo hacían no se que podría pasarme y también sabía que si me encontraban, el esfuerzo de Jungkook habria sido en vano y solo una pérdida de tiempo.
Estaba cansado de seguir caminando y no encontrar la tan esperada salida, a cada paso que daba me desesperada más, pero seguía caminando por que si ellos venían detras de mi, no quería que me atraparan; caminaba sin descanso alguno, la garganta la sentía seca, sentía que faltaba agua en mi cuerpo.

Minutos después suspire de alivio al encontrar la salida, que estaba cubierta por una pequeña rendija un tanto oxidada, golpe fuertemente aquella rendija haciendo que se quebrara el cristal, los poco vidrios que quedaban ahí los golpe con mi ante brazo haciendo que pedazos de vidrios se incrustaran en mi piel, sintiendo como cada pedazo que entraba sobre mi piel me ardía, pero no era momento de pensar en las heridas tenía que escapar y rapido, una vez echo todo esto salí de ahí por el pequeño cuadro: ví la luz del día nuevamente.

—Donde estas Hyung..... —murmure limpiando lo sucio de mi ropa.

Por fin habia salido de ese lugar muy escalofriante, ví todo a mi alrededor y pararecia ser una estación de trenes abandonados hace mucho tiempo, mire a todos los lados pero no encontré nada, todo era silencio y el aire que pasaba por las piezas viejas de aquellas máquinas grandes, hacia un sonido terrorífico.
Inesperadas lágrimas comenzaron a salir de mis ojos al notar que lo que Jungkook me había dicho no era cierto, y que todo era una mentira para desacerce de mi.

—¿Hyung no, por que me dejó?..... —pase mis manos sobre mis cabellos hacia atrás.

Todo comenzaba a dar vueltas y el estómago se me revolvió, ví la sangre que traía sobre mi ropa y el brazo chorreando de sangre. Caí sin fuerzas al suelo, me quedé observando las nubes que pasaban alrededor del cielo, una sonrisa salió de mis labios, tal vez solo estaba delirando ya.
Mis párpados comenzaron a pesar y comenze a cerrar los y abrir los una y otra vez, la vista se me puso oscura y borrosa a la vez: era verdad que aquí y sin nadie moriría de deshidratación y nadie lo notaria.

Pasos se escucharon pero exactamente no sabía de dónde provenía, hacia que con la poca fuerza que tuve me levante del suelo para ir a esconderme a uno de los viejos trenes, sin hacer mucho ruido me escondí en un lugar donde no me pudieran hallar.

—¡Deve estar aquí! ..... Maldición busquen bien joder, la única salida es por aquí, así que revisen bien. —la voz de alguien re sonaba por el lugar mientras daba indicaciones.

Pero la voz de aquella persona se me habia echo  conocida ahora y cuando le grito a Jungkook, solo que en ese entonces no la pude distinguir bien debido a las balas, pero ahora se perfectamente quien es....

Temblaba en mi lugar, no se que sea Min-Ho ahora pero no me iré con el por que siento que el es malo y que ya no es el mismo de antes, el mismo chico y amigo que juró que siempre me protegería.
El sonido de una zuela de zapato resono por los oxidados pisos del tren y senti que el corazón se me salía del pecho, mordí mi puño para callar los quejidos que hacia al tener tanto miedo.

—Al parecer no está ¡aqui!, debió averse ido rumbo a los ríos.

Solo informo aquello y salió nuevamente del lugar, suspiro de alivio cuando ví que se fue, el miedo cesó un poco y trate de tranquilizar me pensando en otra cosa......
Pero fue entonces que me calme un poco....
En un abrir y cerrar de ojos todo cambio y todo puede tomar un curso diferente, a veces me preguntaba por que no podemos cambiar el destino.... Pero la respuesta esta frente a nuestras  narices, simpre lo a estado ahí y siempre lo estará.

Fui jalado de mis cabellos y sacado de forma abrupta de mis escondite, pataleo varias veces, grite por el dolor que sentí al ser sacado de los cabellos y por como me estaban sacando. Estaba siendo arrastrado por aquellos angostos pasillos, asta llegar a caer en el suelo de manera brusca, el dolor dolió como la mierda y sentí que el aire de mis pulmones se escapaban. El rostro lleno de polvo, mis brazos más rasguñados de los "normal" Por el arrastron qué me dieron, ya tenía pedazos de vidrios incrustados sobre mis brazos y ahora se les sumaba las pequelas piedritas ser metidas sobre las heridas que ardían como el maldito infierno, me retorci en el suelo lleno de polvo ensuciando más mi ropa junto a mi rostro.


—¿Creíste que podrías escapar de mi dulzura?... —la risa más siniestra que había escuchado de el asta ahora. En que se había convertido el chico que creí que simpre me protegería.


No dije nada antes lo que me pregunto, no por que no pudiera, sin no por que en este momento no podía sentir nada de mi.
Aprete mis ojos con fuerza al verlo inclinarse hacia mi donde estaba tirado como basura, mientras me retorcia del dolor en todo mi cuerpo.

—Ahora eres mío.... Y simpre lo serás, sabes que eso jamás lo podrás cambiar niño imbécil. —colocó su arma sobre mi abdomen. Y carcajeo me asuste. Recorrio mi cuerpo con su arma desde mi vientre, pasando por mi abandone nuevamente, hacia mi estómago, asta llegar a mi pecho, pasando la punta de su arma hacia mis clavículas y asiendo su recorrido desde mi cuello asta mis mejillas y detenerce en mi barbilla. —Dulzura abren la boca —soltó una risita macabra. —¡Que abras la puta boca de una vez! —con brusquedad me abrió la boca y puso su arma dentro de cavidad bucal.


En ese momento sentí que el corazón se me detenía, un gran escalofrío recorrio mi cuerpo, las manos las sentí mojarse del sudor que provocaba el miedo, cerré mis ojos fuertemente para esperar el impacto de bala que atravesaria mi cabeza. El miedo era tan grande que el corazón comenzo a bombear sangre rápidamente, los párpados al abri los se me tornaban oscuro y mi cuerpo se quedó como gelatina........ Fue donde todo sonido de miedo se fue y solo quedó aquel sonido sumamente fino como un chillido, aquéllo quedó sobre mis oídos, mi cuerpo se quedó débil y depués de aquello todo se volvió negro.



























































































































                                               ♣











Abri mis ojos lentamente y los volvían cerrar, por que la luz qué entraba provenía de aquel ventanal. Era muy fuerte la luz de día al parecer, abri mis ojos una vez más acostumbrandome a lo claro que estaba dentro de aquella habitación, observe la habitación de color blanco y máquinas a los costados de mi, también ví un pequeño sofá y eso era todo no había más nada en aquella habitación. Trate de pararme pero no pude por que varios cables conectados a mi me lo impidieron, estaba confundido..... Que era lo que me había pasado y por que estaba aquí o por que tenía todo esto sobre mi cuerpo.
Gire mi vista hacia todo alrededor pero no encontraba a nadie. Entoces cuando estaba a  punto de gritar y ponerme histérico alguien entró por aquella puerta.


—¡JiMin hijo!. —una mujer castaña de tez clara entró y se acercó a mi. —Por fin despiertas. —corrió a abrazarme.



—No entiendo.... —quede confundido por su acto.


—¿A caso no te acuerdas? —fue que con esa palabra que dijo, llegó a mi mente de forma abrupta y inesperada, las imágenes de los recuerdos comenzaron a viajar y a pasar por toda mi mente como flash.


—¡JUNGKOOK!. —me exalte y grite recordando a mi hombre.




























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No diré más y me iré lentamente jijiji.

*Se fue*

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