Un último Suspiro

Ayer, en la noche, ordenando mis cabeza, mis ideas te encontré; estabas tan perfecta y delicada como siempre,con tus cicatrices, marcas, heridas pero te mostrabas en tu más pura esencia, esa forma de ti que tanto me encantaba.

A estas alturas ya ha pasado un año desde que aquel mensaje enviado hizo el comienzo de esta historia, un año en el cual a pesar de haber pasado tanto en tan poco sigo pensando que me salvaste; aún recuerdo tu sonrisa, tu voz, tus alagos, tus lágrimas, tu pena, recuerdo tanto de ti que hizo que me olvidará de mis propios problemas y hoy después de tanto tiempo cuando ya imaginaba que ese fuego exhausto y apenas sin vida rogando por algo a lo que aferrarse me di cuenta que en las ascuas más sencillas de mi que una vez fue un deseo carnal, sentimental,puro como un juego de niños termino siendo la razón por la que aún sigo en pie.
Ahora veo que seguiste mis consejos aunque, lejos de pensar en cómo lo harías has pasado página, has conseguido lo que tanto he buscado que pudieras sostener en tus manos, alguien que al fin custodie ese frágil corazón tuyo pero lo que no imaginaba  era que mi página, adherida a la historia también pasase como el resto y aquí me veo como un simple espectador de la tuya, de tu vida pudiendo solo sonreír para no afectar, sin interceder.
Me doy cuenta justo en el momento en el que escribo esto que ya no llueve pero mi vista sigue húmeda, sin explicación,estoy orgulloso y feliz pero mis ojos se niegan a dar una plácida sonrisa y mis dedos aún sujetan un bolígrafo, temblorosos al escribir con este, obligándome a preguntarme a mí mismo si en realidad he de escribir esto aún sabiendo que eres mi debilidad,el veneno más adictivo que sin ser dañino me termina por carcomer la cabeza cuando se ausenta y entonces es cuando miro hacia atras, al pasado, cuando aún me replanteaba la muerte como una opción pero nunca te lo dije.
Saber, cuando veia el filo, frío, rígido en la distancia y  acercaba mi mano insensato pero tú llamabas mi atención impidiendo que cada jodido segundo de mi existencia tuviera un ápice de razón para existir, un simple suspiro haciéndome pensar que podría ayudarte aunque solo fuera en mi testaruda cabeza y recibir aquellas palabras que afirmaban mis creencias diciendo "Gracias", un gracias sincero, melancólico y frágil que me hacia querer abrazarte pudiendo sentir tu calor en mis brazos, tu cabeza en mi pecho sin escuchar nada más que tú suspiro.

Esta es mi historia, mi forma de verlo quizás la más errónea pues he de admitir que soy un escritor ciego, cegado por sus sentimiento que quisieron crear un mundo ideal para poder sentirme útil, realizado pero fuera de mi cabeza solo soy, fui, seré, una carga detestable que oculta y suprime sus sentimientos con una máscara odiosa que alberga una sonrisa falta de emociones.

Esta mañana cuando después de ordenar mis ideas, mis pensamientos, mis emociones vuelvo a sentir ese amor hacia lo que nadie quiere y evitan, ese ligero sueño que se hace pesado evitando que tus ojos vuelvan a abrirse, sin que necesites más de ese aire que antes abría tus pulmones, deteniendo tu corazón con un susurro que implora su descanso por una vez desde que nací y entonces en ese momento mi máscara se romperá sacando a relucir una sonrisa en ese último suspiro que se lleve mi alma, desde arriba veré mi cuerpo esperando tener a alguien llorando a su alrededor sin entender todavía el porqué.

Ni si quiera se si alguien leerá esto, pero he de despedirme por mi falta de tiempo para decir,dónde nazco y dónde muero, un sincero, profundo y agradecido... "Lo siento"