Mi pequeño gran secreto ( Liam Payne y tú )

Nueva casa, nueva vida

Había pasado una semana desde que habíamos llegado a Inglaterra, casi ya toda la casa estaba lista, teníamos lo escencial y poco a poco íbamos comprando nuevas cosas.
Las cosas entre la familia Payne y mi familia iban bien, solamente que en esa familia Payne no existía ningún Liam, nadie hablaba de el en presencia y de eso me di cuenta, debido a que un día cuando decidí ir al baño por cuestión de mis necesidades fisiológicas, escuche a Karen y a Mamá platicando de el, pero al momento en el que yo entre cambiaron de tema rotundamente y decidieron hablar sobre semillas, era algo obvio, no querían que yo escuchara algo de el pero lo tome a la ligera.
Era Jueves y decidí ir al súper mercado que estaba cerca, teníamos que comprar algunas cosas para la comida, pero yo solo iba por algo de desyunar, en el camino iba con audífonos y escuchando la música demasiado alta cuando sentí una mano en mi hombro salte un poco y me quite los audífonos, voltee para ver quien era el que me había provocado tremendo susto, cuando vi a un chico de unos 17 años de ojos color verdes, al decir la verdad era apuesto, pero no exactamente mi tipo pues era muy blanco
-Oye amiga toma se te cayó
Enserio? Mi cartera se había caído y yo ni en cuenta? Eso era algo que sólo le pasaba a novatos, o al menos eso pensaba yo, el chico apuesto solo estiro la mano y me la entrego
-Ohh muchas gracias, que tonta no me di cuenta -dije un poco nerviosa
-No te preocupes, soy Alex
El chico, que ahora sabía que se llamaba Alex estiro su mano, esperando una respuesta, claro que tonta ____ saluda! Estire mi mano
-_____, mucho gusto Alex y nuevamente muchas gracias
-¿No eres de aquí cierto?
-No, ¿por?
-Se nota, es un pueblo muy pequeño y casi todos conocen a todos, es muy curioso a parte tu acento es un poco raro
Enserio? Mi acento? Diablos, tenía que practicar esa pronunciación no quería escucharme mal frente a los demás, no quería que se burlaran o algo de ese tipo, en todo el mundo existen personas que se burlan de otros y eso es realmente triste
-Jajajaja, no soy de aquí, digamos que soy del otro lado del mundo
-¿A dónde ibas? Bueno si no es mucho preguntar
-Al súper mercado, bueno a conseguir algo de desayunar
-Bueno, que tal si me das tu número, para seguir en contacto
Suena un poco raro un chico pidiendo mi número
-Mmm ¿No eres un secuestrador?
-Sí, a eso me dedico en mis tiempos libres, de hecho será para marcarte y pedirte tu dirección, se que llevarte ahorita a plena luz del día no es buena idea.
Este chico atractivo de nombre Alex me estaba dando un poco de miedo
Hubo unos segundos de silencio incómodo
-Mmm no creo que sea buena idea, te acabo de conocer y no lo se -dije un poco insegura
-No te preocupes, pero si nos volvemos a ver prométeme que me lo darás
-Claro jajajaja
-Bueno es momento de retirarme necesito llevar estas cosas a casa -dijo mostrándome una bolsa
-Esta bien, cuídate y de nuevo gracias
Simplemente me voltee y seguí caminando sintiendo la mirada de Alex sobre mi
Al llegar al supermercado no sabía que comprar, tenía hambre pero no sabía que elegir, me decidí por unos pastelitos con relleno sabor fresa y compre un galón de leche además de agarrar un par de galletas por si no me llenaba
Iba camino a casa cuando escuche los pasos de alguien siguiéndome, no decidí voltear la vista, tenía un poco de miedo, sentí una mano en mi hombre y al momento de voltear me si cuenta que era ese chico apuesto que hace unos minutos me salvo regresando mi dinero, vaya ese chico se veía un buen tipo
-Hola, estaba pasando por aquí cuando te vi y decidí pedir tu número ¿que dices?
Este chico me iba a volver loca
-No ibas a dejar las cosas a tu casa?
-No tienen prisa
-¿Entonces no fuiste a ningún lado?
-A ningún lado -dijo negando con la cabeza
-Bueno entonces hiciste trampa, no se valía esperarme que estuviera de regreso para obtener mi número
-No, dijimos que cuando te volviera a ver y miramos aquí estamos los dos nuevamente