Cuando llegue de la fiesta me esperaba mi tia sentada en aquel sofa color naranja...por un momento sentì que pasaba algo malo. Una sensacion extraña se apoderaba de mi cuerpo.
-Hola Riley- me dijo con un tono raro.
- Hola- mi vos vibraba.
-Por que llegas tan tarde?-.
-Es que...- no le podie decir que me quede con un chico hasta tarde.
-Es solo que estaba divertida la fiesta- un escalofrio recorrio mi cuerpo.
-Bueno, ya es tarde ve a dormir-.
Me dirijì a mi cuarto cuando encontre un paquete sobre mi cama, presentia que era algo malo o que me traeria recuerdos.
Era la foto de mis padres. Esa sensacion era algo que no podia describir.
Me acoste en mi casa y tome entre mis manos aquella foto. Eran miles de recuerdos los que se me venian a la cabeza.
Era algo tarde asi que me dormi al instante.
Eran las 12:00 PM cuando sonò el timbre de el departamento... me levantè lo mas rapidò de mi cama, me cambie lo mas rapido que pude y abrì la puerta era mi tìa que se habìa olvidado la llave y no podìa entrar.
-Hola tìa- le dije.
-Todavia dormias?-
-Sì-
-Esta bien, me cambiate que a las 1:00 PM viene una amiga del restaurante a comer.-
Asentì con la cabeza.
Entrè en mi cuarto y eleji mi ropa, me di un baño y salì.Ella ya habìa llegado era muy puntual.
La saludè amablemente y ella me devolvìo el saludò. Me presentò a su familia.
Y ahì estaba èl...(el chico que conocì en la fiesta). Mis cachetes se sonrojaron.
-Hola- me dijo con una vos coqueta.Era algo a lo que no me podìa resistir.
-Hola Jason- le dije.
Mi tìa me mirò con una cara extraña.
-Ya conocès a Jason?-
-Siii- mi cara cada vez era mas roja- Lo conocì ayer en la fiesta-
-Sì- dijo Jason- Es una chica muy hermosa- le aclarò a mi tìa.
Yo cada ves me sonrojaba mas.
-Bueno chicos, podrian ir a comprar al supermercado una gaseosa y un kilo de pan, para acompañar con los fideos?-
-Sì tìa, tu Jason no te molestes voy sola-
-No me molestas, te acompañare-
Salimos y mi tìa me guiño un ojo, algo sabìa.
Caminamos una cuadra y me dijo que no podìa parar de pensar en mì, desde ayer la noche.
Yo no pude evitar decirle que yo tambien, era hermoso.
Me agarrò de los hombros y sin pensarlo dio un beso. Fue algo inolvidable, despues de todo lo que me habia pasado era lo mejor.
-Te gustò- me dijo mirandome fijamente a los ojos.
-Si- lo devolvi la mirada.
-Es muy poco lo que te conozco- me dijo- Pero sabes algo me encantas-
- Tu tambien-
Entramos al supermercado y buscamos una coca-cola life y el kilo de pan.
Al llegar al departamento la comida ya estaba servida.
-Hola chicos, llegaron justo a tiempo-
-Si- respondi.
En toda la comida no me parò de mirar.Sus ojos azules penetraban en mi mirada.
Cuando ellos se fueron mi tìa me mirò y me dijo.
-Te gustà verdad-
-Si- me puse palida.
-Bueno vete a domir mañana tienes escuela-
Me sentè sobre mi cama y recordè aquel beso...