"Al parecer, una bomba experimental ha sido lanzada desde la base militar Sur Coreana por error. Según informes, hackearon el sistema militar con el objetivo de hacer parecer que Estados Unidos había atacado, para que Corea responda..."
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"J-jungkoo...
"Lo siento Taehyung... a Jungkook también se lo llevaron".
Su celular calló a la cama mientras las lágrimas comenzaban a acumularse para salir de sus cuencas tal cual un río.
"¿C-como que t-tambien?" Pregunta entre quejidos.
"Se están llevando a todos los Alfa de Seúl porque son un peligro inminente, el humo hace que se descontrolen por completo, no se si viste las noticias pero han asesinado a sangre fría aunque verdaderamente no tienen la culpa y como no hay manera de saber quienes lo han inhalado y quienes no, se llevaran a todos para mantener segura al resto de la población."
Bueno, estaba empezando a tener un ataque de pánico, Jungkook era su tranquilizante natural, quien lo ayudaba cuando en raras ocaciones sus crisis nerviosas volvian, por Dios, ¡La semana pasada le había pedido cortejarlo formalmente a pesar de conocerse durante tres años!
El apenas hace unos meses estaba empezando a sentir que por fin su vida no era tan solitaria y horrible como siempre lo fue y alguien se lo arruina alejandolo de su lugar seguro.
La mujer del otro lado linea escuchaba los pequeños sollozos del menor con una gran preocupación, Jungkook sentía un gran apego por Taehyung y desde las primeras ocaciones en las que lo llevo a su casa, pedía a su familia que lo hicieran sentir acogido, incluso luego de un año de visitas constantes, pedía a sus hermanos que jugaran con el para que no se sintiera solo o rechazado.
"Oye, pequeño, Jungkook estará bien, lo sabes. Su papá lo cuidara muy bien".
La voz de la mujer en cierto sentido lo calmaba, pero no sólo eso, sino también sus palabras, no tendría porque mentirle así que decidió confiar.
"De hecho... Jungkook me pidió un favor para ti al cual yo no me podría negar ni en mil años."
El chico emitió un pequeño sonido para aclarar que estaba atento.
"El quería que te vengas a vivir con nosotros en lo que la situación vuelva a la normalidad."
"O-oh..." Taehyung sonrió poquito, le hacía sentir demasiado bien el saber que hasta en momentos así, Jungkook pensaba en él.
"También me dijo que era muy posible que te negaras para no generar molestias así que me mandó a decirte que tendrás una semana para alistar tus cosas antes de que un carro militar pase por tu edificio para recogerte incluyendo lo que quieras traer. Si es antes, mejor."
Taehyung ahora sonrió más, Jungkook era un Alfa genial y amable.
"N-no se preocupe... en una semana tendré listas mi cosas y llevaré lo que tengo aquí para aportar, no quiero vivir de gratis y molestarla."
"Querido, eso no es necesario, si lo quieres hacer, es bienvenido, pero no te sientas obligado."
"Muchas gracias Tía Jihye" a pesar de no ser su sobrino, ella había acogido a taehyung como uno y pronto esta le pedía que le dijera tía Ji en vez de señora, a veces las formalidades sobraban. "Muy amable, nos vemos en una semana" colgó la llamada después de recibir un adiós y se tiró a llorar en su cama.
Tenía la tristeza y la felicidad demasiado mezcladas y no sabía como sentirse o desfogar así que por el momento humedecería toda la tarde su almohada.
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