Capítulo 26

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La casa a la que se asignó a Ji Yan estaba en el tercer piso. Era un apartamento de dos habitaciones. Aunque la casa no era grande, tenía todos los espacios internos y estaba bien distribuida. TangTang estaba muy satisfecho de todos modos.

Ji Xiao Zhuo estaba más satisfecho que TangTang y se movía por la casa con gran entusiasmo, estaba muy feliz.

Varias personas ayudaron cargando las cosas que TangTang había traído, para luego despedirse. Debian volver a entrenar.

Al ver que las personas que ayudaron a mover sus cosas durante mucho tiempo se retiraban sin tomar una taza de té, TangTang se sintió triste, pero no podía entretenerlos ahora, por lo que tuvo que sacar de una caja unas pocas botellas de la salsa que hizo. Quería entregársela a las personas que la ayudaron para expresar su gratitud: "Gracias por la ayuda, ahora en casa aun no hay nada, ni siquiera te pude atender con una taza de té, por eso quería preguntarles si no es inconveniente que les entregue una botella de mi propia salsa, tómenlo, discúlpenme por no tener nada que pueda ofrecerles".

Un joven soldado de unos veinte años lo rechazó de inmediato y avergonzado dijo: "Cuñada, eres demasiado educada. ¿Qué problema es cargar estas pocas cosas? No necesitas agradecer. Puedes quedártelas".

Dong Li y Zhang Cheng reaccionaron diferente al ver la botella de salsa, un destello de luz brilló en sus ojos al mismo tiempo, porque recordaron la salsa que comieron en la cafetería la semana pasada.

Zhang Cheng tomó sin ceremonias el frasco de las manos de TangTang. "Cuñada, yo si doy la bienvenida a tu salsa, esta salsa es muy deliciosa. Cuñada, tu artesanía es tan buena, no lo sabes, pero Ji Yan es tacaño. No estuvo dispuesto a darnos un poco de la salsa que preparaste. Cuando te des la vuelta, tienes que hablar de él".

TangTang sonrió y miró a Ji Yan, sintió una dulzura en su corazón.

Ji Yan, sin ninguna expresión en su rostro, pateó a Zhang Cheng haciéndolo gritar.

Aunque Dong Li tenía una mala impresión de TangTang, no pudo soportar rechazar una salsa tan deliciosa. Podía vivir sin nada, pero no podía vivir con su estómago insatisfecho. Así que también tomó una botella y dijo gracias con un poco de vergüenza.

Los demás soldados al ver que para dos de sus compañeros la salsa era tan preciosa, se tragaron las amables palabras de rechazo que querían decir y decidieron aceptarlas. Solo el soldado que hablo primero no tenía una botella, no sabía si irse o pedirle a su cuñada una botella de salsa, su rostro se sonrojó de repente, sin saber si pedirle o no.

TangTang vio su vergüenza y directamente entrego en su mano un frasco de salsa, "Está bien, también puedes tomarla, todos tienen una." El joven soldado Qiqi Ai dijo, "Gracias cuñada."

En la mirada de Ji Yan la alegría era evidente, y dijo: "Está bien, tómenlos, no sean educados, vuelvan a entrenar". Los soldados se fueron con alegría.

Ji Yue y Gu Zhang An, tenían una reunión mañana temprano, por lo que tenían que irse. Ji Yue abrazó a TangTang y Ji Xiao Zhuo, y prometió venir a verlos la próxima vez cuando estuvieran libres, por lo que se fue refunfuñando.

Todos se habían ido. Ji Yan miró la habitación vacía y le dijo a TangTang: "No hay ningún mueble en esta habitación para pasar esta noche. Te llevaré a la casa de huéspedes por una noche. Mañana arreglaré que alguien te lleve comprar muebles y conseguir lo que se necesite. Nos mudaremos de nuevo cuando todo esté listo".

"De acuerdo". TangTang asintió obedientemente, y luego sacó toda la salsa que quedaba en la caja. "Esposo, originalmente hice estas salsas para hacer una ceremonia de reunión para los vecinos, pero ahora solo queda unas cuatro botellas, ¿Sera suficiente?"

My Wife Spoils Me Too MuchDonde viven las historias. Descúbrelo ahora