♡~Del odio al amor~♡(Kageyama x Hinata)

Cap 12 (nunca me harías daño)

*Narra narrador*

Hinata y Kageyama recibieron un pequeño sermón y luego fueron dejados en "libertad". Ambos se dirigían rumbo a sus respectivas habitaciones cuando un olor potente a feromonas penetró sus fosas nasales. Ambos tambalearon ante tan fuerte olor, sobre todo Kageyama, quien seguía en celo. Se acercaron a  la puerta de donde salia la fragancia y escucharon jadeos ahogados y alguno que otro gemido. Abrieron la puerta con cuidado y se encontraron a nada más ni nada menos que Yamaguchi y Tsukishima dándose... algo de amor entre ellos.

Tsukishima: Ngh, Yamaguchi... usa más la lengua- fue suficiente para que el dúo de metiches cerrarán la puerta de un portazo y se echaran a correr. Llegaron a la habitación del menor cerrando la puerta tras ellos y comenzaron a reírse a carcajadas.

Hinata: ¿¡VISTE ESO?!- Hinata seguía estallando en carcajadas.

Kageyama: De todo lo que podía ver hoy, era lo último que esperaba- el mayor, por otro lado, se divertía por la situación pero no tanto como el pequeño, había algo que estaba mal. Shoyo se dió cuanta cuando Kageyama dejó de hablar por completo.

Hinata: Bakeyama ¿estás bien?- el olor comenzó a esparcirse por el lugar y el peli azul no pudo mantener la compostura y cayó al piso. Definitivamente estaba pasando de nuevo.

*Narra Shoyo*

Noté que Kageyama estaba entrando en celo de nuevo ¡en mi cuarto! Yo dormía al lado de Nishinoya y Tanaka, pero no podía preocuparme por eso cuando mi alfa se veía en tan mal estado.

Kageyama: Shouyo, yo estoy ¡UGH! Vete... vete rápido- Kageyama yacía en el piso tratando de controlarse.

Hinata: Ey tranquilo, no te controles, estoy aquí para ti- Me agaché tomando su cara entre mis manos.

Kagryama: N-no puedo, ya te lastimé la ultima vez- sentía todo su cuerpo temblar mientras algunas lágrimas escapaban de sus ojos.

Hinata: tranquilo, confía en mi, tú jamás me harías daño- lo miré a los ojos y fue suficiente para que me dejara debajo de él y comenzará a asaltar mi boca como un desquiciado.

Kageyama: *jadeos* lo siento Shoyo, lo siento- no entendí sus palabras hasta que sentí dos dedos abriéndose paso en mi entrada.

Hinata: ¡AHHH!- Me tapé la boca pero estaba llendo demasiado rápido -Kageyama ¡UGH!- introdujo un tercer dedo. Mis lágrimas comenzaban a hacerse presentes. Kageyama comenzó a besarme con cuidado y a repartir besos en mis mejillas.

Kageyama: lo siento, ya pasará- podía sentir su miembro palpitante contra mí. Bajé sus shorts y comencé a acariciarlo con cuidado. Lo escuchaba jadear y gruñir hasta que sus dedos dejaron de doler dentro de mi y se introdujo de una estocada. Por suerte pude ponerle un condón mientras lo acariciaba. Ambos gruñimos ante la sensación pero pronto Kageyama comenzó a embestir con fuerza.

No sé cuantas veces lo hicimos esa noche. Mis caderas dolían y mis piernas estaban entumecidas. Cuando parecía que Kageyama estaba listo para entrar otra vez se durmió. Noté que estaba duro todavía pero no quería arriesgarme a que despertara, sin contar que no podía moverme. Nos limpié como pude y me acosté a su lado. Su cara se veía tan tierna mientras dormía. Le dí un beso en la frente y caí profundamente dormido.

*Narra Kageyama*

Me desperté con un fuerte dolor en el cuerpo. Dudaba poder moverme pero vi a Hinata a mi lado. Se veía considerablemente peor que yo. Tenía mordiscos, marcas y moretones por todo su cuerpecito. Acaricié con cuidado su cabellos y ví como sus ojos comenzaron a abrirse.