Se acercaba el invierno, las calles de todo Corea eran cubiertas por las intensas lluvias. Un chico sonriente siempre cruzaba las mismas calles para llegar a casa, pero no era el único, otro chico cabizbajo y tierno ante la mirada de aquel rubio cruzaba a la misma hora todos los días por aquel oscuro callejón.
Nunca se habían hablado a pesar de compartir el mismo callejón, ambos iban por el lado contrario, tan solo se encontraban en el punto medio de ese lugar. Era como si estuvieran destinados a verse todos los días. Pero no como el rubio quisiera que se hubieran dado las cosas.
Todo era normal hasta que un día de lluvia intensa, aquel castaño cruzaba apresurado aquel callejón. Iba todo mojado, no tenía a nadie que se preocupara por el que no sea él mismo. Pero un alma buena y demasiado caritativa le haría sentir que aún hay personas amables en el mundo.
—Hey! —lo llamó— Deberías llevar un paraguas o puedes resfriarte por la lluvia —le dijo preocupado, pero aquel castaño tan solo atino a quedarse paralizado.
Era la primera persona que le dirigía la palabra, no tenía amigos ni mucho menos familiares que le dijeran algo como eso. Estaba solo y que él le haya hablado había sido algo emocionante para su cálido corazón.
No salía ninguna palabra de su boca, tan solo permanecía quieto bajo la lluvia. Acto siguiente el pequeño rubio decidió acercarse hasta él para darle la paragua que llevaba consigo. Y no era solo eso, quiso ser amable y es por eso que le puso aquel gorro rojo que llevaba en su cabeza y sus demás implementos para que este chico que había visto antes por aquel lugar no se resfriará y preocupara a su familia, o eso es lo que pensaba él.
—Ya esta —sonrió— Vivo cerca de aquí, solo debo cruzar este callejón y doblar a la izquierda y ahí estará mi casa —contó sin borrar aquella sonrisa que lo hacía ver como un ángel bajo la intensa lluvia que chocaba contra su rostro y su cabeza— Llega sano a casa y promete abrigarte siempre —dijo alejándose de él para dar la vuelta y empezar a caminar hasta perderse por el callejón.
—G-Gracias —fue lo único que pudo decir ante la amable acción que había hecho aquel chico.
Esa había sido la primera vez que habían interactuado y aquel momento había quedado marcado en un inicio de su amistad. Años mas tarde aquel castaño había ingresado a una nueva universidad. No recordaba el rostro de aquel ángel que lo salvo y se preocupo por él bajo la lluvia, pero aquel ángel si lo recordaba muy bien y esperaba que aquel castaño se diera cuenta de su presencia en algún momento de su vida.
Pero fue todo lo contrario, terminó enamorándose de uno de sus amigos y él simplemente fue aquel mejor amigo que le dio la espalda cuando la mas lo necesitaba.
●●●
Ambos se encontraban en silencio luego de aquella confesión por parte del rubio. Estaban alejados y lo único que se podía escuchar en el ambiente eran sus respiraciones, el castaño estaba asombrado por todo lo que había oído y Jimin simplemente tranquilo y en paz porque al fin había dicho lo que siempre había tenido guardado en su corazón.
—Realmente me gustabas y aún lo haces "Tete" —repitió una vez mas para que el castaño dijera algo por lo menos ahora si— Recuerdas cuando te decía Tete, era el apodo mas tierno que siempre te gustó.
—Lo hacía pero dejo de gustarme cuando otro apodo llegó a mi vida —confesó, quería ser sincero en ese momento para que su ex amigo dejara de decir tonterías— No se que quieres ganar diciendo que te gustaba Jimin, pero no vas a hacer que cambie lo que pienso de ti nunca.
—No quiero que cambies, nunca fue mi intención hacerlo —dijo con un ligera sonrisa en su rostro— Tan solo quería ser sincero por una vez en mi vida —confesó— Quería que supieras que si aquella vez dije lo que dije fue porque me sentí celoso de que lo vieras a él y nunca pudieras verme a mí.
—Tal vez nunca te diste cuenta, pero la primera persona que vi fue a ti.
—¿No es necesario que mientas Tae? —soltó de repente— La primera persona que viste en tu vida fue Chae Eunwoo y la segunda persona y creo que última es Jeon Jungkook —volteó a verlo— Jamás me dijiste que era la primera persona que habías visto, nunca lo hiciste.
—Tal vez fue porque nunca te vi como algo mas que mi hermano —se sinceró con aquel chico frente a él— Para mí siempre fuiste mi mejor amigo y aunque Eunwoo se haya ido lejos, ¡Siempre te hubiera visto igual!
—Porque, porque no pudiste verme como algo diferente a lo que yo veía en ti —preguntó derramando una pequeña lagrima de aquellos ojos tiernos que tenía.
—Simplemente porque no puedo decirle a mi corazón que amé a alguien que quiero como mi familia y no como hombre —respondió viéndolo directamente a los ojos— Ahora se que tu y yo nunca podremos ser amigos, ni familia Jimin —dijo sinceramente— Pero me gustaría que Jungkook sea una familia, un hermano para ti y que no sueltes su mano aún estando en los momentos mas difíciles —dijo eso por último para alejarse poco a poco de aquel lugar.
Era difícil para ambos el haberse sincerado, pero al menos dijeron lo que sentían y lo que creían que era correcto. No se habían destrozado o dado falsas ilusiones que pudieran afectar sus vidas y sus caminos.
Si bien ambos nunca volverían a ser los amigos que eran antes, al menos el castaño se preocuparía por las amistades que la persona por la que sentía algo profundo tuviera en su vida.
●●●
A la mañana siguiente y como toda mañana, un olor delicioso llegaba hasta la habitación del castaño, ya se había acostumbrado de despertar todas las mañanas con un rico olor que emanaba su cocina, lugar que antes no era usado sino hasta la llegada de su amado.
Luego de haberse alistado y haberse distraído en la habitación, ambos chicos al fin desayunaron juntos y acto siguiente se dirigieron a la universidad para continuar libremente con sus actividades de la semana.
Al llegar a aquel lugar que era su salón de estudios, ambos chicos se separaron al fin con una sonrisa en sus rostros para cada uno dirigirse a su lugar.
Todo estaba bien y eso le gustaba a Jungkook, pero cuando menos lo pensó un pelirrubio se hacía presente a su lado. Quería hablar con él y con un rostro de aprobación por parte del castaño ambos se dirigieron hasta el campus de la universidad. Ya ahí se sentían incomodos por el pelicular momento que ocurrió con el castaño y su amigo antes.
—Solo quería que supieras que puedes contar conmigo siempre y cuando lo necesites Jungkook —sonrió el chico frente a él, acto que sorprendió al pelinegro pero le gustaba que fuera amable a pesar de todo— Siempre podremos ser amigos y se que V no se molestará por eso.
—Lo sé hyung —respondió amablemente— A pesar de todo lo que pase alrededor, se que podremos ser grandes amigos en el futuro —sonrió.
—Si! —dijo— Y-Yo solté la mano de alguien en el pasado pero te puedo prometer que...
¡No soltaré tu mano pase lo que pase Jungkook!
ESTÁS LEYENDO
ღ𝑳𝒐𝒗𝒆 𝑮𝒂𝒎𝒆𝒔ღ...❧ⱽᴷᴼᴼᴷ❣ ༒༻𝗧𝗲𝗿𝗺𝗶𝗻𝗮𝗱𝗼
Fanfiction«Jugar con fuego es peligroso, pero jugar con el amor lo es aún mas» «Estamos en un laberinto sin salida» «Lo que sentimos es parte de un juego, un juego de amor del que jamás podremos escapar» ●Historia 100% mía ●Lenguaje explícito ●Contenido +18 ●...