Joel
Una vez más llego temprano al aula donde tomo mis clases, como de costumbre mi amigo Li ya se encuentra acomodando su carrete para colocar el lienzo.
—Payne— lo salude—¿Cuándo será el día que llegue antes que tu?— bromeé mientras acomodaba las cosas necesarias para comenzar con la clase.
—Pimentel— saludo con un movimiento de cabeza— ese día no llegará, querido amigo.
—¿Hoy pintaremos algo en especial?— pregunte, el día anterior no puse tanta atención.
—Si, ¿Qué no escuchaste a la profesora? Vendrá un chico para ser el modelo.
—Dime que será un desnudo— cruce los dedos y el soltó una carcajada.
—Por supuesto que no, ¿Tienes alguna fantasía sexual con eso o algo así?.
—Sexual no, solo me gustaría pintar o dibujar a alguien desnudo.
—Bueno yo...— lo interrumpí.
—No puedes ser mi modelo, ya te he visto desnudo, además tendría que ser alguien que no conozca, así no habrá ningún tipo de tensión, incomodidad o algo por el estilo.
—Dios, yo no me iba a ofrecer como tu modelo, simplemente iba a decir que ya viví la experiencia y terminó en una follada, lo que quiero decir es que, dudo que después de eso no te termines follando al tipo.
—Yo si soy profesional, por eso quiero un modelo igual de profesional que yo.
—¿Así cómo el?— me señalo un punto del aula con la mirada.
Gire mi cabeza lo menos disimulado posible, porque eso no es lo mío y vi al chico quien acababa de entrar con la profesora.
Luce muy profesional, su expresión es seria, lleva unos pantalones ajustados junto a una camisa negra sencilla, las mangas están dobladas hasta los codos.
Y sus ojos, Dios sus ojos. Son muy lindos aunque les falta algo de brillo.
Lo imaginé desnudo y su mirada penetrante se encontró con la mía sin despegarse, mis mejillas se comenzaron a calentar.
—Muy buen día chicos y chicas—saludó la profesora— el es mi sobrino Erick y aceptó venir para hacer de modelo.
—Será un placer para mi ayudarlos con este trabajo— su voz erizo mi piel y su inconfundible acento Cubano me hizo sonreír.
—Hey, después de todo el acento Cubano no te sale tan mal— me susurro Liam adivinando mis pensamientos.
—Chicos lo que quiero que plasmen en el lienzo son sentimientos, quiero que lo pinten teniendo en mente la emoción que ustedes sienten, con el sentimiento que crean esta proyectando él. Es un trabajo sencillo, tienen toda la clase para trabajar en ello.
—Un trabajo sencillo considerando que siempre tengo cara de...
—Erick— el tono asustado de la profesora nos hizo reír.
—De malhumorado, eso iba a deci— giró los ojos— bueno suerte a todos— su mirada se volvió a cruzar con la mía y una sonrisa se surco en su rostro.
El chico se sentó en una silla frente al escritorio viendo a un punto fijo de la habitación, todos comenzamos con nuestro trabajo.
Luego de unos minutos, ya tenía la base del como quería que quedará mi pintura. Sin duda el sentimiento que me transmite es soledad, siento que tiene un vacío, como si alguien muy querido lo haya dejado solo. Pero sinceramente no se cuáles son mis emociones en estos momentos.
Me siento ansioso por empezar a pintar sus ojos, la parte de su mirada me causa un cosquilleo en la parte baja del estómago. Me siento como hipnotizado desde que lo vi, como si no me encontrara en mi cuerpo en estos momentos, casi como si estuviera flotando junto a el.
Es una sensación muy extraña.
Gire mi rostro para ver la mirada concentrada de mi amigo, siempre con el ceño fruncido como si estuviese molesto, pero en realidad solo esta tratando de concentrarse para hacer un buen trabajo.
Me dediqué a terminar la pintura.
Luego de unos minutos la mayoría de los estudiantes ya habíamos terminado y solo esperábamos a quienes faltaban para comenzar a mostrar los cuadros.
—Veo que todos ya han terminado, por lo tanto los iré llamando para que expongan su cuadro.
Asentimos y la profesora llamó a una chica rubia.
La clase ponía atención a sus palabras y yo solo me podía concentrar en la expresión del chico rizado cuando escucho a la chica decir "alegría".
Su nariz se arrugó y comenzó a mover sus manos ansioso.
La chica terminó y así continuó otro alumno y después otro, y así hasta que quedábamos solo 3 compañeros y yo.
Liam exponía su pintura con una sonrisa plasmada en su rostro, la profesora lo felicitó y aplaudimos.
—Joel, tu turno— me guió para quedar frente a la clase.
Sentí mis manos sudorosas y la mirada penetrante de Erick.
Gire el lienzo de manera que la profesora y su sobrino lo pudieran ver.
—Muy bien Joel, dime que emociones buscaste expresar en tu obra.
—Gracias, lo que el modelo me transmitió fue soledad, tristeza e inquietud— lo mire a los ojos.
Su reacción me confirmó lo que dije.
—Sus ojos son muy expresivos siento yo, sus gestos también lo son, y bueno eso sentí— su mirada se nubló y me alerte, así que cambie el tema—Yo me sentía muy ansioso por comenzar a pintarlo, sus ojos...
—Lo siento tía, no puedo— salió rápido del aula.
—Cariño espera— Erick no pudo escucharla.
Sin pensarlo dos veces salí tras el, sintiéndome culpable por su repentina salida.
Debí haber dicho algo que lo lastimó.
—Oye— lo sujete sutilmente de la mano y el giró, mire sus ojitos llorosos y me sentí mal.
—Lo... lo siento si dije algo que no debí— el negó con una media sonrisa y limpio sus lágrimas.
—No te preocupes, no has dicho nada malo, solo la verdad— dirigió su mirada a nuestras manos aún entrelazadas— ¿Me regresas mi mano?.
Sonrió burlonamente y yo me sonroje.
—Lo siento, no me di cuenta— negó indicandome que estaba bien— ¿Estás bien? ¿Necesitas hablar sobre algo? Yo.. podría escucharte.
—Eh, no lo sé, la clase creo que aún no termina.
—Está por hacerlo— dije al ver la hora— si gustas, puedes esperarme para tomar mis cosas y después podemos ir por un café ¿Te parece bien?.
—Me parece bien— me dijo sonriendo.
Holaaa estamos de regreso con un nuevo OS que esperamos les guste mucho, como saben nuestra novela esta por terminar y ya muy pronto actualizaremos los últimos capítulos. Tengan un lindo día<3