"Necesito algo más", dijo ella con total discreción a su compañera del costado.
Necesitaba algo más, pero, ¿algo como qué? Tenia todo aquello que podía esperar una chica de su edad, y era extraño observar en ella tantos cambios. Podía en un momento sentarse a escribir bellos textos, y en otros, ser la antipática persona que a ninguna le cae bien. No era conformista y, en parte, eso admiraba de la persona que se había vuelto poco a poco. En un abrir y cerrar de ojos, no era "Mar", ella era: "la nueva Mar", muy distinta a la niña que llegó a pisar, inofensivamente ese piso del salón. Cada vez me daba cuenta que, las personas cambian, para bien o para mal, pero lo hacen, solo queda en nosotros, adaptarnos a eso, tarde o temprano.
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Secretos de una adolescente
Подростковая литератураEsta es una historia de la vida real... Toda princesa vive en un mundo lleno de monstruos.
