HABITACIÓN 47 (JENLISA)

Capitulo XV "Habitación 47 2/3"

Ya que la punta de su nariz está deslizándose lentamente por encima de tu ropa interior, empujando contra tu clítoris palpitante a través de la tela de algodón. Tienes que agarrarte del cuero del sofá con más fuerza y ​tu corazón se acelera.

-Ugh ... Ugh ...-empiezas a jadear y te esfuerza al máximo para no rodar tus caderas en su cara.

Ella hace un zumbido de satisfacción, que vibra contra tu sexo cuando ella planta un beso sobre tu ropa interior en el centro. Sientes una sacudida como si fuera electricidad desde tu centro a través de todo tu cuerpo entero.

-Oh ... sí ...- jadeas, con tu respiración cada vez más pesada.

Escuchas su risa y lo hace una y otra vez.

-Lisa...- te quejas con impaciencia, tus piernas comienzan a dormirse a cada lados de su cabeza.

Pero ella entierra su nariz en tu clítoris a través de la capa de algodón y repentinamente inhala fuertemente por la nariz y ella suspira sonando satisfecha, su aliento caliente bailando sobre tu piel y el material de tu ropa interior.

-Oh mierda... es una maldita broma...- gimes, tu voz es profunda  sale de la parte posterior de tu garganta. Tu cara está colorada y caliente.. Dios está tratando de matarte.

Ella engancha un dedo por el material de tu ropa interior y la aprieta alrededor de su dedo, no te das cuenta lo que está haciendo hasta que levanta las bragas de repente.

-Oooooohh...

Ella levanto la parte media de tu ropa interior, por lo que está presionando fuertemente contra tu clítoris mientras sus pliegues mojados devoran la tira delgada de material en el centro. Tus labios y  piel se están bombeando a cada lado de la correa fina de algodón, y ella continúa tirando hacia arriba más y más fuerte. Te sientes como si estuvieras a punto de desmayarte.

Gimes cuando ella deja el material, y con demasiada rapidez cada tu ropa interior por tus piernas. Instintivamente una vez que está en tus tobillos las remueves con tus pies. Ahora te inhibes y cierras las piernas porque estás desnuda, expuesta completamente a ella, pero tiene sus manos sobre tus muslos y separa suavemente tus piernas de nuevo. Decides abrir los ojos y mirarla, pero ella está demasiado ocupada mirando el espacio entre las piernas, con su boca haciendo una pequeña forma de 'o'.

Ella no pierde mas el tiempo y se inclina hacia abajo pasando su lengua por tu centro, separando tus húmedos y ya doloridos pliegues.

-Oo-oh m-mi di-os...- tartamudeas de puro placer. Su lengua es tan suave y húmeda, está haciéndolo una y otra vez, pasa la lengua lentamente desde el fondo hasta tu clítoris y no puedes respirar... Mierda... Te da escalofríos desde la base de la columna vertebral hasta el cuello y arqueas la espalda, sintiendo el aire frío golpeando tu piel por tu sudoración pegajosa y caliente.

Ella comienza a mover la lengua más rápidamente  y chupa tu clítoris, tu corazón está bombeando  sangre caliente a través de todo tu cuerpo, la mayor parte entre tus piernas. Tus piernas tiemblan un poco cuando ella sumerge su lengua en tu entrada y gira de cierta manera de izquierda a derecha y tus ojos comienzan a llenarse de lágrimas, ya que se siente tan bueno. Te cuesta respirar ante la sensación de su lengua que se retuerce dentro de ti.

Puede escucharte a ti misma haciendo ruidos ahogados, pero casi no puedes hablar, casi no  puedes incluso sentir vergüenza a través del inmenso placer.

Extrae su lengua y chupa tus pliegues, su cabeza sube y baja. La miras con asombro. Ella es muy buena en esto, ella parece saber exactamente lo que se siente bien. Ella deja tu carne sensible  con un pop húmedo y abre los ojos mirándote, una sonrisa se extendía por su boca resplandeciente-...Te gusta, ¿eh?...-ella sonríe y sólo balbuceas estúpidamente.