Hitou Meguri Kakure Yu (NTR)

Hitou Meguri Kakure Yu

Mikio

Esa mañana se rompió todo en mí, el ver como Chitose aceptaba a Kenzo, ver esas expresiones en su rosto, ella nunca quiso hacerlo conmigo, dijo que lo haríamos después de casarnos, pensé que con pedirle que se casara conmigo ya serían las cosas más formales entre nosotros. Pero no, el decir que me ama pero también ama el cuerpo de él no me consuela en lo más mínimo... ¡Bien! Creo que dejando esto en claro es mejor irme, y no regresar a este lugar, pensar que a ella le preocupaba proteger esta posada, pero más le preocupa estas con ese tipo, disfrutando de su pene, que se vaya al diablo todo...

- Oni-chan... ¿A dónde vas?
- me voy Mao, no tengo nada que hacer aquí.
- Sé que estás molesto y lo entiendo, pero no debes irte así nada más, debes hablarlo con ella, tiene que explicarte el por qué esta con ken...
- Espera... ¿Cómo sabes que me pasa si ni siquiera he dicho algo del tema?, Mao... ¿Tú sabias de esto?
- emm... ahh... lo siento oni-chan
- ¿Por qué no me dijiste nada?
- Quise decírtelo, pero Chitose me pidió que guardara el secreto, dijo que ella lo hablaría contigo, solo esperaba encontrar el momento adecuado para contártelo.
- ¿O sea que el mejor momento para ello era descubriéndolo? ¿Ver como ella follaba con ese tipo? No me jodas Mao, sabes, ver eso me dolió mucho, pero me duele más saber que alguien de mi propia familia solapara tal acto, pudiste habérmelo dicho. Ahorrarme ver esa imagen de ella entregándose a otro hombre.
- Lo hice porque te quiero oni-chan, te amo.
- Que cosas dices, somos familia, primos, eso no puede suceder.
- Sabia que dirías eso, que no me aceptarías por ello, así que lo siento, sé que no debí ocultarte esto, pero estaba desesperada, pensé que esto ayudaría a tener una oportunidad en tu corazón y pudieras aceptarme, aun así quise declararte mis sentimientos, lo siento Mikio, espero algún día me perdones
- No sé si pueda hacerlo Mao, esto es otro duro golpe para mí. Debo irme.
- ¿A dónde iras?
- Lejos de aquí, cualquier lugar será bueno a comparación de este sitio.
- Pero, oni-chan...
- No me digas más así Mao. Si quieres que te perdone olvídate de mí por un tiempo, eso mismo haré yo, olvidarme de ti, de Chitose, de Kenzo y de este lugar. Que cálida bienvenida me dieron.

Tomé mi maleta y camine a la estación del tren, voltee por última vez y vi la cara de Mao, con lágrimas en sus ojos me dijo adiós y se retiró lento del lugar, mis ojos comenzaron a lagrimear, quería quedarme, pero no sabía a qué, perdí a la mujer que amaba, mi prima favorita tenía sentimientos por mí, pero no podía corresponderlos, pronto me alejé del lugar que un día prometí a Chitose protegeríamos juntos, en mi mente les desee suerte y esperaba que ella pudiera arreglar como proteger y mantener la posada de los maleantes que querían que la vendiera.

Chitose

- Debo irme, debo ver qué cosas quedaron pendientes del día, además debo llamar a la escuela para pedir los trabajos ya que no fui hoy por tu culpa.
- Pero que dices. ¿Quién estaba pidiendo más de mi pene? Tu quisiste una segunda ronda, nadie te obligo.
- Eres un tonto, toma tus cosas y vete, no quiero que Mikio te vea por aquí, de por sí ya sospecha de nuestros encuentros y si me pregunta, ¿Qué le diré?
- Solo la verdad, que su mujer con quien estaba comprometida no quería tener sexo con él porque alguien más la follaba todas las noches, y ese alguien era yo, el que logró convertir a la recta y educada anfitriona Chitose en mi amiga sexual...
- Calla tonto, como crees que le diría eso, yo lo amo a él, y a pesar que solo me gusta esa parte de tu cuerpo esto no debe seguir, estoy comprometida con él y nos casaremos algún día.
- Si si lo que digas, pero esta noche igual vendré a estar contigo
- Haz lo que quieras, pero ya vete de aquí.

Después de arreglarme y sacar a Kenzo de mi cuarto, fui directo a la recepción, tenía el temor de encontrarme a Mikio y que me preguntara porque fui muy fría con él por teléfono, y también me reprocharía que no fui a la escuela hoy, si habíamos quedado de pasar la tarde cerca del lago.

- Buenas tardes, ¿qué pendientes tenemos hoy?
- Buenas tardes anfitriona, veo que estas muy agitada todavía jejeje
- ¿De qué hablas? Estoy perfectamente bien.
- Vamos no lo oculte, todos nos dimos cuenta que alguien estuvo cerca de su cuarto y estuvo entretenida toda la noche, no hace falta que se avergüence, al fin y al cabo es mujer, y todos merecemos algo de "eso".
- Ya dejemos el tema, deme los pendientes, cielos, que vergüenza.

Mientras revisaba el orden del día, observe en el computador el listado de habitaciones ocupadas, vi que habían desocupado una, pero como tenía varias cosas por hacer no le di importancia, seguí haciendo mis labores, aunque no dejaba de pensar en que decirle a Mikio, supuse que estaría molesto por no haber cumplido con nuestra cita del día, todo ese rato estuve pensando como evadir si me hacía preguntas relacionadas con Kenzo. Ya era el atardecer y no había visto a Mikio en todo el día, tomé mi teléfono y le marque, la primera vez no tomó la llamada, la segunda tampoco, intenté una tercera vez pero el resultado fue el mismo. "Supongo que si lo hice enojar esta vez" pensé, creo que hoy lo compensaré con una cena o algo, pronto viene nuestro aniversario y quiero pasar tiempo con él, solo espero que Kenzo no moleste, después veré como me arreglo con ese tipo. Cayo la noche y de Mikio ni sus luces, ya me estaba preocupando, de pronto vi que Mao se acercaba, así que decidí preguntar por él.

- Buenas noches Mao, disculpa de casualidad no has visto a tu primo, llevo todo el día buscándolo y no lo encuentro, ¿crees que este en su habitación?
- No lo sé, deberías echar un vistazo ahí...
- ¿Pasa algo? ¿Te sientes bien? Tus ojos est...
- No quiero hablar ahora, me iré a mi cuarto, no tengo apetito así que no iré a cenar, buenas noches...
- E... está bien, buenas noches.

Ahora estaba preocupada y con miedo, porque ella había estado llorando, y ¿por qué me dijo que fuera a su habitación? Me apresure a revisar y encontré el lugar vacío, el futón estaba guardado, todo estaba limpio, no había en el lugar alguna de sus pertenencias. Corrí a la recepción, a revisar las entradas y salidas solo para darme cuenta que la habitación donde él estaba había sido entregada hoy en la mañana. "Tal vez quiere que hoy estemos en mi habitación, por eso la dejó, debe estar preparándome una sorpresa..." intentaba consolarme, pero algo en mí me decía que no podía ser eso, Fui rápido a mi habitación y estaba como la había dejado en la mañana, todavía estaban mis prendas interiores con residuos del semen de Kenzo, los papeles con los que me había limpiado y mi colcha hecha bola en una esquina, esa la lavaría yo ya que tenía mis fluidos y no quería que los de lavandería vieran eso. No supe que hacer en el momento hasta que apareció Kenzo en la puerta.

- ¿Qué pasa chi-chan?, parece que estas triste.
- No está. Mikio no está. No aparece por ningún lado.
- Tal vez debe estar en su cuarto masturbándose mientras piensa en ti.
- Ya fui a su habitación y ni él ni sus cosas están, ¿Crees que se haya ido?
- Lo dudo mucho. Debe estar en algún bar cercano o no sé, lo que si se es que hoy tengo muchas cargas para darte.
- No creo que hoy sea apropiado, sin saber dónde está Mikio podría descubrirnos.
- Entonces será más excitante, como jugar al escondite, solo que él tendrá que encontrarnos, puede que vea algo para sus pajas nocturnas.
- No lo sé...
- Oh vamos Chitose, sabes lo difícil que es aguantar el no follarte, ese tipo debería irse para que podamos seguir follando como antes, sin remordimientos, escuchando tus gemidos a todo lo que da, sabes que disfrutar el tener sexo conmigo. Además te ayudara a despejar tu mente.
- creo... creo que tienes razón. Está bien.

De nuevo estuvo follando con Kenzo, el sentir su pene dentro de mi hizo que me calmara un poco, y a pesar que no tenía esaexcitación como normalmente la tengo, me hizo correr varias veces, y él se corrió dentro de mí, no sé por qué a pesar de odiarlo me gusta como de folla, como hace que llegue a tener esos orgasmos tan extremos, ¿qué pensaría Mikio sime viera? lo bueno que no son días de peligro, así que puedo follar así un par de días más sin recurrir a las pastillas. Cielos, ¿qué estoy pensado? Me hevuelto una pervertida. Pero todavía estoy preocupada, ojalá pueda verlo mañana, o saber algo de el...

Proximo Cap. 15/05/21