𝙘𝙞𝙘𝙖𝙩𝙧𝙞𝙘𝙚𝙨

2.2K 216 49
                                    

Se sentía fatal.

Todo su cuerpo dolía y su cabeza daba vueltas.

"¿No estoy muerto?" pensó.

Lo último que recordaba era su pelea con Okkotsu Yuuta, su ejecutor. Recordaba la sensación de la espada de su oponente deslizarse en su pecho dolorosamente y luego todo se volvió negro.

En estos momentos no sabía en donde estaba o porqué siquiera estaba vivo, estaba muy confundido. Se levanto con cuidado y se sentó en silencio mirando a su alrededor.

-Por fin despiertas. ¡Que alivio!.

Yuuji miró sorprendido y a la vez confundido al pelinegro. No se parecía nada al Yuuta con quien peleó hace no mucho, este tipo se miraba algo simpático.

-Yo... ¿Qué hago aquí?...

-Por el mes de septiembre el profesor Gojo vino a verme y me pidió que cuidara de ti, así que no tuve más remedio que engañar a todos.- Admitió.

-¡¿Engañar?!

-Los superiores me hicieron hacer un pacto para matarte así que tuve que hacerlo, siento mucho eso.- El pelinegro decía mientras daba unas pequeñas reverencias de disculpas.

-¿Entonces por qué estoy vivo?.

-Por mi hechizo inverso.- Yuuta miró seriamente a Yuuji, el pelirosa tragó en seco.- En el momento cuando tu corazón dejó de latir utilicé mi hechizo. Así que sí, esta será la segunda vez que se fingirá tu muerte, aunque pronto se descubrirá, así son las cosas. Se supone que con tu ejecución ya terminó tu condena.

Yuuji aún no entendía nada. ¿Por qué este tipo, que ni siquiera se conocían, decidió hacer esto? Algo tan arriesgado. Necesitaba más respuestas y tenía muchas preguntas por hacer.

-¿Por qué... decidiste hacer esto?...

-Porque hay gente importante para mi, a los que tú les importas.- Respondió con simpleza.- Yo también tuve un poder que era muy peligroso, demasiado para mí. Pero ese poder fue algo que yo mismo me busqué. Tú eres distinto, ese poder que llevas no es tuyo. Tú no tienes la culpa.

Yuuji miró a Yuuta desconcertado. No sabía qué responder ante todo lo dicho por el pelinegro. Volvió a tragar en seco y enfocó su vista en el chico.

-Te equivocas... El problema no es que sea culpa mía o no.- Suspiró pesadamente, sentía un escalofrío correr por su columna hasta acabar en su espalda baja.- Yo he matado...

-¡Itadori!.

Yuuji paró en seco todo lo que tenía para decir. Reconocía la voz perfectamente, cómo no reconocerla, era la voz de una de las personas más importantes que tenía, si no es que es la primera en la lista. Con temor volteó hacia la dirección donde se escuchaban los pasos de alguien acercándose. Un chico alto, con cabello negro azabache y una piel demasiado clara se había adentrado al lugar. Se veía serio pero también algo triste.

-Fushiguro...

-¿Qué haces aquí? Volvamos al instituto. La barrera que lo protege está inestable, mientras no te muestres directamente podrás volver. Hay que reunirse con los demás y luego...

-¡No!- El grito de Yuuji sorprendió a los dos chicos, se miraba bastante en contra de lo que había dicho Megumi.- ¡No lo aceptes como si fuera algo natural! No hagas como si no hubiera pasado nada...

Yuuta miraba con atención a los dos adolescentes. Analizaba los movimientos de Yuuji y de Megumi. Había notado algo raro.

-¡¡He matado personas!! ¡¡Por mi culpa murió mucha gente!!- Yuuji se paró en todo su metro setenta y tres para enfrentar a Megumi cara a cara, a unos cuantos pasos de él.

Cicatrices | Itafushi one-shotDonde viven las historias. Descúbrelo ahora