VIERNES 23 DE JULIO.
Llovía.
Las gotas de agua caían con fuerza sobre el asfalto mientras el viento movía con fuerza los árboles del sur de Connecticut. En un barrio de clase alta, en donde todas las casas eran enormes y se rodeaban de muros de ladrillo y jardines extensos, había una residencia blanca de estilo victoriano en donde la música resonaba a todo volumen. La distancia que la separaba de las otras moradas del barrio, bastaba para que ningún vecino entrometido se quejara de aquel estruendo. Toda la casa se encontraba llena de una multitud de jóvenes universitarios que aquel día festejaban el fin de semestre en la universidad local. En una de las habitaciones de aquel lugar, en donde en realidad, había muy poca gente, se encontraba un grupo de amigos. Fácilmente podías identificar que aquellos chicos formaban un grupito. Sus sonrisas condescendientes y la belleza física que tenían, los catalogaba como la clase de jóvenes que no se juntaban con cualquier persona que fuese de su mismo estatus social.
Dos de los chicos bailaban en un espacio de la habitación. Se encontraban tan pegados el uno al otro que la chica, una castaña bajita, tenía una de sus piernas en medio de las del chico. En uno de los sillones, una rubia y un chico castaño se encontraban besándose y una esquina del lugar, un chico rubio hablaba animadamente con dos de sus amigos. Al cabo de un rato, la morena bajita anuncio que subiría un momento al baño.
El baño de la planta de arriba en donde se encontraban los dormitorios. Ese que solo los amigos de Alrik y Zoé Sanders los dueños de aquella casa, podían usar.
A pesar de que su novio insistió en acompañarla, ella se negó. Prometiendo que no tardaría en volver. Fue entonces que Astra Sallow comenzó a abrirse paso entre la multitud para llegar a las escaleras que la conducirían al piso superior. Mientras ella caminaba, no pudo evitar sentir la mirada de muchos chicos y chicas repasando su cuerpo cubierto por un corto vestido negro. Las miradas comenzaron a incomodarla cuando un par de chicos que pasaron a su lado le soltaron un comentario vulgar haciendo referencia a sus piernas y hacía el escote de su vestido. Inmediatamente se arrepintió de no haber aceptado la compañía de su novio.
Astra sabía que era guapa. Estaba acostumbrada a la atención que el mundo siempre tenía sobre ella, ya fuera por su familia, estatus social, su relación o su propia belleza. Hasta cierto punto, aquella atención le levantaba el ego. Sin embargo, odiaba cuando las personas la cosificaban. Así que se abrazó a sí misma y con su abrigo de color rosa trato de cubrir sus pechos lo más que pudo mientras continuaba avanzando. Suspiro con alivio cuando por fin llego a las escaleras, las subió encontrándose con una puerta de cristales cubierta con cortinas de seda blanca y del bolsillo de su abrigo, saco la llave que su amigo Alrik le había entregado y abrió aquella puerta que bloqueaba el paso hasta la planta superior. Cerró la puertezuela tras de sí y camino por el pasillo hasta encontrar el sanitario y entro en él.
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Who Did It?
Mystery / ThrillerJess Withaker había desaparecido sin dejar rastro. Lo último que se sabía de él, era que vestía ropa negra y que aquel viernes asistiría a una fiesta en los suburbios de Coneccticut. Desde entonces, nadie lo ha vuelto a ver, no hay pista de su parad...