Sin tu amor

3

Los meses y años pasaron. Ambos eran muy unidos, fueron educados para ser buenos omegas y poder cuidar de sus cachorros.

Pasaban todo el día juntos hasta una mañana en la que a TaeHyung le dieron ganas de ir a caminar. Estaba seguro de que su padre le dejaría. La mayor parte de su vida la había pasado encerrado y pronto se casaría con el hijo de la familia Jung, el solo quería poder conocer los alrededores.

Caminar por el territorio de su manada sin que nadie le hiciera desviarse a visitar a algún omega o beta. Incluso los cachorros le ocupaban para sus juegos. Amaba a los pequeños pero a veces sentía que daba todo de si mismo y quería conocerse mejor, tomar un tiempo para él.

Jin lo seguía sin decir nada, cuidando del menor como se le había pedido después de aquel día en que casi sintieron que lo perdían.

Sabiendo que tipo de pensamientos podían invadirlo dijo — Tae, ¿qué otra cosa te gustaría aprender antes de casarte?

— Hyung, yo solo quiero pasar un rato a solas conmigo mismo, siento que debo calmar mis pensamientos, tengo miedo de lo que pueda pasar. Solo nos hemos visto una vez y — su voz se cortó al recordar — es muy guapo, me gusta. No le conozco de nada, el compromiso está hecho desde hace años pero…

Jin le abrazó entendiendo sus sentimientos, estaba por comprometerse pero su situación era diferente — Estoy seguro de que va a amarte, solo tienes que confiar en ti mismo. Te dejaré pensar un momento a solas. Estaré en aquella zona, si necesitas algo solo debes llamarme y vendré de inmediato.

Se alejó unos pasos del menor y dejo ir un suspiro de tristeza, la situación de su hermano era muy dolorosa. Recordaba esa mañana en que todo se volvió negro en la vida del menor. La ausencia de su lobo era lo que le provocaba sentimientos de vacío en su interior, no tenía ninguna duda al respecto. Encontró un lugar con bastante sombra y con buena vista para vigilar a su hermano.

TaeHyung se quedó en su lugar, los sentimientos se desbordaban en su interior, el miedo a lo desconocido estaba dominando su ser. Había visto a su prometido en una ocasión pero no compartieron palabras. Se había dado cuenta de la bonita sonrisa que poseía y su mirada tierna.

Estaba empezando a preguntarse si estaría a la altura del alfa. Le gustaba prestar atención a todo lo que decían de la otra manada. Al estar unidas bajo el compromiso del alfa heredero con la otra manada, todo se había puesto en orden para todos.

De vez en cuando se encontraba con personas de la manada Jung y escuchaba cosas buenas sobre el alfa, siempre preguntándose en silencio si todos llegaban a experimentar el mismo vacío.

Sumido en sus pensamientos, sintió la mano de Jin moverlo y reaccionó — hyung, vamos a casa.

Caminaron juntos en silencio. Al llegar JiMin los esperaba con los brazos abiertos y una enorme sonrisa.

— Tenemos que hablar de algunos asuntos, su padre vendrá en algunos momentos y quiero que ustedes se arreglen de inmediato — besó la frente de ambos jóvenes y les permitió ir a cambiarse.

NamJoon caminaba junto al alfa Jung y su hijo Hoseok. Ambos estaban de acuerdo para que la boda fuera en algunos días, antes de la luna llena. La familia Jung estaba deseosa de que pronto llegaran los herederos de ambas manadas.

HoSeok caminaba en silencio, siguiendo a su padre. Estaba de acuerdo en la boda, pero al ver al omega con quien estaba comprometido se sintió extraño. No pudo percibir ningún aroma en él. Quiso preguntar a que se debía pero tampoco quería verse como un entrometido.

Ambos omegas salieron de sus habitaciones vestidos de manera pulcra y elegante. Su padre omega sonrió para ellos y se dispusieron a servir la comida. Todo estaba en buen estado al momento en que sintieron el sonido de la puerta siendo abierta y las voces llenar la estancia.

JiMin fue el primero en salir de la cocina con sus hijos detrás — cariño bienvenido, la comida esta lista. Pasen por aquí — les guió al comedor.

Todo se veía muy bien, la comida pasó en completa armonía. Al terminar, TaeHyung se levanto de la mesa y con cuidado limpio la mesa y llevó los platos para lavarlos.

Una costumbre que les fue dada al explicarle que estaba comprometido y que cuando su futuro esposo o alguien de su familia estuviera en casa era él quien tendría que limpiar todo. Ahora agradecía haber aprendido aquello para no avergonzar a su familia.

El alfa Jung sonrió ante el tierno comportamiento de su futuro hijo político, estaba seguro de que al lado de HoSeok serían buenos líderes, NamJoon había educado perfecto a su hijo.

TaeHyung estaba junto con su padre omega en la cocina, aquella visita les había tomado desprevenidos, pero pudieron ofrecer una buena comida.

Los alfas salieron a la terraza de la casa y TaeHyung les ofreció vino y té por si necesitaban algo más. Con una reverencia volvió al interior de la casa. Su corazón iba a mil por hora, sus nervios lo traicionaban.

— Tu hijo ha crecido muy bien, NamJoon ya es hora de que nuestros hijos se casen. Tiene todas las habilidades para comenzar a cuidar de sus cachorros.

— Si HoSeok esta de acuerdo en que la boda sea este miércoles haremos todos los preparativos, su casa ya está construida y podrán mudarse enseguida. Algunos de mis betas y omegas trabajaran para él. No quiero que se sienta solo.

— Señor Kim, yo estoy totalmente de acuerdo con lo que dice mi padre. Lo que deseamos es que la estabilidad entre ambas manadas sea eterna.

— Entonces no se diga más, TaeHyung está de acuerdo con la boda — se levanto y todos se dieron un fuerte saludo de manos — pronto seremos consuegros.