Deseo - parte 1-

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Jisoo: Cuñis- me dijo Jisoo al contestar, lo cual me hizo reír.

Lisa: Hola Jisoo, me alegro de encontrarte de buen humor- contesto divertida.

Jisoo: No, Lisa. Yo siempre estoy de buen humor, de la que debería de sorprender es de la amargada de mi hermana

Lisa: Tienes razón- comencé a reírme, Jennie no es muy conocida por su humor.

Jisoo: Dime Lisa, ¿Para qué me necesitas?

Lisa: Quería preguntarte, yo... quería saber... sí... ¿Quieres ser mi dama de honor?- le pregunte de forma lenta.

Jisoo: ¿Yo? Claro, si me encantaría- me dijo contenta a lo cual lance un suspiro.

Lisa: Gracias- le dije en voz baja.

Jisoo: Claro Lisa, sabes que puedes contar conmigo, sé que nos conocemos hace poco, pero como te dije, la mujer que cazo a mi hermana merece toda mi admiración, cuenta conmigo para lo que sea.

Su forma de decirlo tan... desinteresada, me hizo sentir fatal, ella me admira mientras yo era una mentirosa a beneficio propio. Me trague el nudo de la vergüenza.

Lisa: Gracias Jisoo, yo también te aprecio mucho.

Una vez terminad la llamada le llame a Olivia la cual acepto encantada, ellas son las únicas que les podría pedir esto. El fin de semana se terminó entre juegos con mi hija y llamadas rápidas con Edith, de Jennie no he escuchado nada en todo el fin de semana. El lunes, Robert nos pasó a recoger, mi sorpresa fue monumental al ver a Jennie dentro del coche. Y como ya es costumbre, con su rostro seria al borde del enojo.

Lisa: ¿Qué haces aquí?- le pregunte una vez sentada en el asiento.

Jennie: Hasta donde recuerdo este es mi auto, y tu mi prometida- declaro mirándome de manera intensa.

Lisa: Nunca has venido con Robert, así que es normal que me extrañe de verte- afirme mientras acomodaba bien a Sofí en mis piernas y le colocaba su suéter.

Jennie: Tenía ganas de ver a mi prometida esta mañana- ella se encogió de hombros como si fuera algo normal en ella.

Lisa: ¿Qué quieres Jennie? Te conozco lo suficiente para saber que no haces nada sin un propósito- alegue a lo que ella sonrió de lado y entre cerro los ojos en mi dirección.

Jennie: Touché, señorita Manoban, tienes razón. Estoy aquí por un motivo.

Lisa: ¿Y se puede saber cuál es?

Jennie: Una vez dejemos a la niña, te explicare.

El resto del camino no me dijo nada más, así que aproveche para enseñarle a Sofí los edificios que veíamos por la ventana, una vez en la guardería la deje con Nadia y me encamine de regresó al auto. Al regresar, Jennie estaba hablando con Robert pero cuando me divisaron dejaron de hablar. Mi prometida me abrió la puerta pero antes de entrar me tomo de la cintura, gire a observarla pero nada salió de mi boca cuando me beso. Ahí... al centro del estacionamiento, el medio de New York.

Estaba tan nerviosa y concentrada en el beso que no me di cuenta cuando Robert rodeo el vehículo y subió del lado de piloto. El beso de Jennie me tenía en las nubes, pero en dos por tres fui bajada de golpe al suelo cuando se separó y me dijo sobre mis labios.

Jennie: Hay fotógrafos, sonríe y sube al auto.

Fotógrafos. Por eso me beso. Le sonrió de forma falsa y subo al auto con mi dignidad por el  suelo y mi orgullo destrozado. Debí haberlo sabido, ella no hace nada sin ningún motivo.

CASADA CON MI JEFA// adaptación jenlisa GiPDonde viven las historias. Descúbrelo ahora