2 cool! - mihyun

2 cool!

— Me gustan las chicas cool

Dahyun con cara de espanto saltó en su lugar, de inmediato corriendo hacia la salida, sabiendo muy bien que es de mala educación escuchar conversaciones ajenas.

¡Pero esa no era su intención!

Ella simplemente volvió a la sala de música para recuperar su abrigo, pues de distraida manera lo dejó abandonado en el lugar; sin embargo, el frío ya no sería capaz de perturbarla, pues sus propios pensamientos eran el doble de molestos y quejumbrosos.

Está mal basar nuestros pensamientos en sólo trozos de situaciones, no disponer de todo el contexto es capaz de hacernos pensar apresuradamente para actuar de manera impulsiva, sacar conclusiones equivocadas y hacernos pasar un, perfectamente evitable, mal rato.

Ah... pero los 16 años están llenos de impulso y poca lógica.

Dahyun golpeó su frente contra un poste mientras esperaba el autobús, cuando pensaba que estaba más cerca y lista para declararse a la chica que le gustaba, esta sale con tal declaración que sacaba a relucir todos sus miedos e inseguridades.

Pero ella debió escuchar toda la conversación.

— ¿Chicas cool? — Ladeó su cabeza Momo — ¿Tú?

— ¿Qué definición tienes por cool? — Preguntó ahora Sana.

— ¡Ya saben! Como yo...

Ambas chicas guardaron silencio un momento, para luego mirarse entre ellas e intercambiar cómplices sonrisas, tratando de confirmar entre ellas si su tierna amiga hablaba en serio.

Y estallaron en carcajadas.

— ¿Qué? ¿De qué se ríen? — Momo suspiró calmado su risa.

— Ay... sí, Mina, muy cool

La tierna chiquilla hizo un puchero sonrojada, para luego notar como una prenda bien conocida había quedado abandonada.

La llevó consigo.

Dahyun se dejó caer en su cama pesadamente, ajustando sus anteojos que rebotaron por la brusquedad de su acción. Molesta, se sentó nuevamente y se miró en el espejo colgado en su pared, recordando la confianza y simpleza con la que Mina había pronunciado esa frase, sin notar el impacto que tendría en la joven Kim.

Se miraba con detenimiento, tez pálida, la pubertad haciendo presencia en sus mejillas con aquellos granos, sus redondos anteojos que necesita desde que tiene memoria, uniforme impecable, bien planchado, botones abrochados hasta arriba y su cabello negro algo desarreglado por las malas pasadas del día.

Ella no se veía cool.

Observó su alrededor, una consola junto a sus videojuegos, su escritorio bien organizado y listo para recibirla hacer sus deberes a tiempo, lo más interesante a sus ojos es aquel teclado donde desahoga sus pensamientos.

Recordar su panorama en la escuela no es alentador. Para todo lo que se aplica, no siempre obtiene relucientes calificaciones como para entrar en el grupo de "cerebritos", apesta en los deportes, y es bastante torpe en general.

¿Había algo que realmente destaque en ella?

Mina creía que sí.

Pero Dahyun no podía verlo.

— ¿Crees que soy cool? — Preguntó a su amigo perruno, quien no se molestó abrir los ojos de su siesta — Exacto...

Van en el mismo salón, por lo que se conocen hace años, pero cuando coincidieron en la sala de música, Dahyun pudo hablar en serio de su agitado corazón cada vez que chocaba con Mina. Una bailarina dotada quien bailaba cada vez que ella tocaba, sin darse cuenta ambas ya eran amigas y se veían con ojos dulces cada vez que disfrutaban sus pasatiempos favoritos.