No me queda otra

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- Ni de broma, dejame en paz de una vez.
- Bueno entonces supongo que sabras llegar a tu casa
En realidad no tenía ni idea de como llegar a casa, vivia en una ciudad enorme.
-Vale, pero no quiero volverte a ver
-Tranquila que yo tampoco
Me monté en el asiento del copiloto.
Estubo todo el camino intentando comerme la cabeza. Pero no iba a dar mi brazo a torcer.
Cuando llege a casa, ni siquiera me despedí del policia. Entré, estaban mis padres sentados en el sofá con no muy buena cara.
-Cariño, sientate -me dijo mi madre.
-¿Qué pasa mamá?
- Tu padre y yo tenemos que contarte una cosa, tu padre se ha quedado en paro y con mi sueldo no podemos comprarte todas las cosas que te compramos y no podemos pagarte los entrenamientos ni la equipación del equipo.
Dios mío, no puedo vivir sin fútbol, que voy a hacer, es mi puta vida, no puede ser, a mi no por Dios.
Entonces, pensé en la propuesta que me hizó aquella mujer...
Decidí que tenía que informarme mejor.
Recordé que la mujer me dio una tarjeta con su número y la llamé:
-Buenas noches , me he pensado mejor la propuesta que me hiciste, pero hay cosas que quiero saber antes de aceptar.
-Perfecto, mañana puedo enviar un coche a tu casa a las 17:30, te parece bien?
-Sí, ¿pero cómo sabes dónde está mi casa?
Entonces colgó, y yo no volví a llamar porque me acorde que al final no fui al entrenamiento, así que llamé a mi entrenador, mientras comunicaba iba pensando en una excusa. Al final le dije que me puse mala, mi excusa para todo.

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⏰ Última actualización: Oct 24, 2015 ⏰

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Agente 019: amor imposibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora