Misas de sangre

I: Crucificción

A la altura de la colina la neblina se hace presente, la misma que ciega a los habitantes que intentan encontrar el camino húmedo por el rocio de la mañana, y sobre la sierra una estructura toma lugar; los niños tomados de las manos rezan enfrente de la cruz, las monjas allí presentes guían a los demás pequeños enseñándoles a como orar, una sonrisa forzada y canticos repetidos es lo usual de todas las mañanas.

 Entre todos el mas alto, Urss centraba la mirada ante Jesús crucificado quedando en silencio su vista se ponía borrosa y las voces de los demás se desvanecían mientras mas se concentraba, aun viendo la sangre pintada brotando del cuerpo de la escultura, la veía rodar y golpear el suelo, salpicando sobre sus zapatos, no había nadie a su alrededor y por encima de su cabeza las heridas en sus manos manchaban aun mas la cruz llenando el suelo, manchándolo en un charco de sangre que perseguía al niño y cada ves la mancha roja estaba mas cerca de los pies del menor.
-¡Me estas agarrando la mano muy fuerte!-

 el menor a su lado quito su mano de la de él, Urrs confundido se limito a ver al otro
-¿Que sucede? Deben tomarse de las manos-

 una de las tantas monjas que estaban allí presente frunció el ceño
-¡Me agarro la mano muy fuerte y me lastimo!-
-Vamos, tómense de nuevo, no lo volverá a hacer solo esta nervioso... ¿No es cierto?-
-S-sí...-
Volvieron a tomarse de las manos hasta acabar la misa.
En grupos se dirigian hacia el comedor donde tomaban sus bandejas para almorzabar, Urss decidio que era buena idea conocer al fin a alguien con quien hablar y entre tantos intento buscar a unl que su mirada no irradie odio, un niño a lo lejos estaba solo, asi que decidio ir con él.
-Hola... ¿Puedo sentarme aquí?-
-Claro!- el menor se movio hacia un costado dejando lugar a Urss
-¿Eres nuevo aqui?-
-Algo así, pero ellos dijieron que vendran pronto sabes-
-¿Hablas de tus padres?- acentuo con la cabeza, Urrs suspiro -Por cieeto cuantos años tienes?-

-¿13 y tu?-

-14 en un mes cumplo 15, pero aun no me adoptan y solo puedo estar aqui hasta los 16-

-¿Adoptar?-

-Estamos en un orfanato catolico Reich. Se supone que una monja deberia hablar contigo...-

-Las monjas no quieren hablar conmigo- mostro sus dientes afilados como sierras y al cerrar su boca una expresion de tristeza se hacia presente sobre su rostro

-Tranquilo, entonces yo te enseñare algunas cosas de aquí y soy mejor que dichas monjas- hablo alzando su menton con orgullo, Reich sonrió aliviado, su compañero de mesa no se comparaba con los demás, inmediatemente sintio una conexion de cariño a su lado.

-Debo llevar esto, espera- Urrs refiriendose a la bandeja se retiro de la mesa colocando los utensilios sobre unas cestas que luego seran llevadas a lavar por los encargados, antes de volver con el niño, volvio sobre sus pensamientos, imaginó que su relación estaba bien aunque con miedo intenta ser el mejor para él, un sentimiento familiar recorria su cuerpo, su rostro iluminado por la alegria le recordaba a su hermano quien no pudo salvar.

Reich miraba su bandeja que aun estaba llena de comida, el miedo de volver a estar solo no lo dejaban comer, su mente repetia las mismas palabras que decia Urrs "Yo te enseñare mejor que dichas monjas!".
Eran sentimientos usuales, nervioso, asustado, inquieto, quizas el ambiente nuevo le producia un dolor constante en el pecho
-Hey! ¿Asique tu eres nuevo aquí?- Un niño que no conocia poso sus manos sobre la mesa quedando frente a Reich
-Uhhh...-
-¡MIRAME!- Alzó la voz y tomó su menton con agresividad -Heh, te pareces a una niña, tus rasgos son finos y ademas eres tan pequeño que con mi simple toque podria destrozarte-
-¿Que piensas que estas haciendo Bosnia?- Urss se plantó enfrente del menor quitando sus manos del rostro de Reich
-Pfff ¿No me digas que estás defendiendo a esta rata? Que bajo caes Zack. Ahora que lo pienso...-
Como bestia a su presa un niño que estaba detras de Zack lo ataca por la espalda tomando sus brazos inmovilizándolo solo tuvo oportunidad de advertir a Reich.
-Reich vete de aquí y no vuelvas!-
El menor paralizado estaba indeciso
-¡CORRE!-
Luego de esas palabras el niño escapo del lugar dejándolo solo.
Bosnia jugaba con un tenedor mientras predicaba -Me llevo bien contigo, pero si quieres proteger a esa criatura tendremos un trato y solo hare esto para recordarte...- el joven coloco su mano sobre el ojo izquierdo de Urss lo ampliaba pellizcando su piel hacia afuera, los dientes del utensilio apuntaban directamente a su pupila y los esfuerzos en escapar eran inutiles pues los demas eran mucho mas fuerte que él, aunque sabia que iba a perder la vista, sus manos temblaban y su voz quebraba en llanto, sollozando rogaba por merced pero Bosnia era sordo ante sus peticiones asique con la mano firme decidido a apuñarlo -...Que estas en deuda conmigo, malnacido- Clavó los dientes sobre la fina capa blanca de su ojo, gritando de dolor quito el arma del lugar al separarse de él, se desvanecio en el suelo colocando su mano en la parte herida, sangraba, el liquido rojo se deslizaba sobre su mano golpeando el suelo, su rostro poco a poco se llenaba de eso y como Jesus crucificado lloraba a la vez que la sangre recorria por su mejilla y solo en la habitacion el eco de sus lloriqueos rebotaba por la habitacion.