La muerte de Bäldr anuncio la llegada del Ragnarök. Un invierno tan largo como tres inviernos asoló la tierra.
Los lobos Sköll y Hati devoraron el sol y la luna respectivamente y la tierra se sumió en la más profunda oscuridad.
Loki y el enorme lobo...
Hola de nuevo a todos ¿Me extrañaron? Jajaja no hace falta que respondan por qué yo sé que no podían vivir sin este capítulo xd.
Pero basta de adulaciones hacia mi, es momento de que la historia continúe así que... Todos ustedes preparen el soundtrack más tétrico y aterrador que tenga por qué aquí está el nuevo capítulo.
Lentamente la brillante luz de un nuevo amanecer cubría la ciudad de Musutafu, al mismo tiempo que Izuku recién abría los ojos por los rayos del sol.
El peliverde con un esfuerzo casi inhumano se levantó de su cama, y a la vez que bostezaba y se estiraba su madre sorpresivamente entró a la habitación.
Inko: [rascándose los ojos] Izuku cariño, ya despierta, recuerda que hoy es tu festiv…
Izuku: Si, si, ya sé que hoy es el Festival Deportivo. [mirando la cara de su madre] ¿Que tienes?
Al girarse, el peliverde miró confundido la extraña expresión en el rostro de su madre, parecía como si estuviera a nada de romper en llanto.
Inko: Oh n-nada hijo, es solo que verte usar esa pijama de nuevo me trae hermosos recuerdos.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Izuku confundido miró su ropa y se extrañó bastante al ver que traía puesta una pijama de All Might junto con unos pantalones que incómodamente combinaban a la perfección.
Izuku: N-no recuerdo haberme puesto esto anoche, supongo que en el fondo también quería revivir antiguos recuerdos jeje.
Inko: [apresurada] Bueno hijo, dejemos los recuerdos para después, ahora vístete rápido y baja a desayunar.
El pecoso asintió con la cabeza y en cuanto su madre salió de la habitación este comenzó a desvestirse.
Minutos después Izuku estaba terminando de arreglarse. El pecoso optó por usar una camiseta oscura con anillos azules a los costados, un pantalón de mezclilla negro y un par de tenis largos color café.
Inko: [impaciente] ¡¡Izuku!! ¡¡Baja ya o no llegarás al festival!!
El peliverde, apurado terminó de atar sus zapatos y rápidamente trato de salir de su habitación, pero al instante de poner un pie fuera de esta Izuku se llevó una tétrica sorpresa.
El interior del hogar de los Midoriya estaba totalmente destruido, las paredes, los muebles, los objetos en general estaban hechos pedazos y todo tenía una apariencia desgastada, como si hubiesen estado así por años.
Izuku miraba atónito y algo asustado todo el desastre que yacía ante sus ojos, pero el shock sería abruptamente interrumpido por una intensa ola de frío que inclusive le sacó el aire obligándolo a poner una rodilla en el piso mientras se sujetaba el pecho con fuerza. Rápidamente intentó regresar a su habitación pero al ver que está había sufrido lo que el resto de la casa simplemente tomó el primer abrigo que tenía al alcance y se lo puso.
