Algunos perros que duermen a la noche, deben soñar con huesos y yo...
Recuerdo tus huesos en la carne o en ese vestido verde oscuro y esos zapatos de tacón alto, negros y brillantes.
Siempre puteabas cuando estabas borracha, tu pelo se resbalaba de tu oreja querías explotar de todo lo que te atrapaba: recuerdos podridos de un pasado podrido, al final escapaste muriendo, dejándome con el presente podrido.
Hace 28 años que estás muerta y sin embargo te recuerdo mejor que a cualquiera de las otras.
Fuiste la única que comprendió la futilidad del arreglo con la vida, las demás sólo estaban incómodas con segmentos triviales, criticaban absurdamente lo pequeñito: Jane, te asesinaron por saber demasiado.
Vaya un trago por tus huesos con los que este viejo perro sueña todavía.
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Un poeta dice.
PoesieTe extrañaba. ¡Maldición! ¡Si que lo hacía! Decidí tragarme el orgullo, y olvidarme de mi dignidad. Quería que todo fuera como antes. Estaba dispuesto a enviarte un mensaje. Pero vaya sorpresa me lleve al entrar a tu perfil. Me borraste de tus conta...